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— ¡este lugar me trae recuerdos!- exclamé al ver la pequeña casa donde vivía la madre de Marina, a la costa del río Uruguay, en un pueblito llamado de San José

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— ¡este lugar me trae recuerdos!- exclamé al ver la pequeña casa donde vivía la madre de Marina, a la costa del río Uruguay, en un pueblito llamado de San José.

— no se parece en nada al rancho dónde vivías- acotó Lorenzo. Le dediqué una mirada gélida.

— pensé que habíamos acabado con nuestras diferencias- gruñí. Habíamos tenido una pequeña charla antes de fugarnos.

— nuestra habitual pelea le da el toque a nuestro romance- me guiñó un ojo.

— ¡y tu pene inquieto que se mete en cuanto culo encuentra le da el drama a esta relación!.

Todos me miraron con sorpresa, no era tan directo al dar mis opiniones pero Lorenzo me ponía los pelos de punta. Me había besado y pensaba que un beso iba a reparar todo. El muy hijo de puta continuó como si nada, como si no lo hubiera visto sacando personas de nuestra habitación o aún peor, que no hubiera escuchado como le decía a esas zorras "así,así,más rápido."

— eso quedó en el pasado- dijo dolido y avergonzado- ahora estoy contigo.

— mejor dejen el tema para más tarde- nos interrumpió Ank- es mejor que bajemos y nos fijemos si está todo en orden.

— ¡qué lástima!- se quejó María- yo quería seguir observando la novela.

Habíamos acordado no separarnos por si existía una segunda pelea con Marina. Nuestro plan era el azar, básicamente nos subimos a una combi y nos lanzamos desde el sur hasta Entre Ríos con el fin de descubrir algo y luego ver qué hacer.

Ahora estábamos estacionados al frente de la casa de Marina. Una vieja casa venida abajo con un inmenso patio, parecido al campo donde yo vivía, con vista al río Uruguay. El paisaje era hermoso, lo salvaje se mezclaba con lo pacifico, me recordó a Marina.

El primero en bajarse fue Bek, quién cruzó la calle y encaró hasta la casa, Ank le siguió por detrás. María y Aurelio decidieron quedarse por si había que salir lo más rápido posible. Lorenzo bajó después de mí.

Golpeamos la puerta tres veces pero nadie atendió, a juzgar por el patio parecía que hacía meses no había nadie en el lugar. Marina es una chica que le encanta mantener el jardín y una vez me comentó que su madre le había inculcado eso. Si había un jardín allí, la maleza lo había cubierto por completo.

— deberíamos rodear la casa- propuso Lorenzo- Bek y Ank vallan por ese lado- señaló un portón en el lado izquierdo- nosotros iremos por allí- señaló un sendero en el lado derecho.

Lo seguí en silencio hasta que me jaló del brazo y me pegó contra la pared de la casa. Me besó con fuerza y eso me encantó. Mis piernas quedaron temblando.

— esto es por decir que me voy por cuando culo veo- dijo entre beso y beso.

— sabes que es cierto- le contesté. Dejó de besarme pero me aprisionó contra la pared.

— y eso es lo que más me duele- se sinceró- te hice daño creyendo que hacía lo correcto. Mí vida siempre fue hacer lo correcto... Y ahora veo que no es así. Quiero cambiar Bruno, voy a dejar de ser ese idiota, te lo prometo.

— cuándo cambies recién pensaré en hacerte caso- aclaré. No me va ver la cara de pendeja dos veces.

— será mí meta- me dió un pico y seguimos buscando señales de vida.

Detrás de la casa había una galería con un ventanal que daba a la huerta. Algún animal había entrado y acabado con todas las verduras. Solo quedaba un pobre zapallo a mitad comer.

Lorenzo miró por el ventanal. Algunos vidrios habían sido destruidos.

— parece que no hay nadie- dijo.

Tomé el picaporte de la puerta que había al lado del ventanal y está se cayó apenas la toque.

— eres bien sigiloso- me molestó Lorenzo. Entramos.

La casa estaba echa un desastre, como si hubiera habido una pelea. Muebles rotos y tirados, platos partidos, sábanas hecha nudos en la cocina.

— aquí pasó algo- dije.

— entraron por de techo- me informó Lorenzo. Miré hacia donde señalaba y vi un perfecto circulo en el cielo raso.

— ¿Por qué?- pregunté.

— para que no ladraran los perros- dije Bek apareciendo de la nada- los acabo de encontrar- señaló la galería, dónde Ank tenía a dos animales algo flacos.

— eso quiere decir que la mujer estaba atenta- dedujo Lorenzo- los perros le avisarían para que pudiera escapar a tiempo.

— o defenderse.

Bek buscó algo de agua y se dispuso a alimentar a los animales.

— eran tres- comentó mientras se aseguraba que los animales estuvieran bien- el tercero murió de un balazo.

— Marina tenía razón, vinieron por su madre- concluyó Ank.

Seguimos rebuscando entre las pertenencias de la casa para tener una pálida idea de lo que sucedió.

No pudimos sacar nada en claro, salvo que había habido una pelea.

— la mujer se defendió- dijo Lorenzo sacando un arma de debajo del un mueble- efectuó tres disparos- miró el cargador y luego se dispuso a buscar los impactos. Había uno en el refrigerador, otro en un cuadro y  ni rastros del último.

— está pared tiene manchas de sangre- señale al ver las gotas de sangre. Observé mejor y vi que hacían un camino, lo seguí y me encontré con un cadáver- ¡Chicos!.

Me tapé la nariz, el olor era insoportable. Me pregunté porque no lo habíamos sentido antes.

— ¿un soldado?- dijo ank- parece de las fuerzas especiales.

Del uniforme podía verse poco, ya que el cuerpo se había hinchado y el uniforme estaba a punto de explotar. Sin mencionar que también estaba cubierto de moscas.

— ¡es un agente de la SCG!- dijo Lorenzo. Buscó un pedazo de algo que fuera largo y lo movió. El olor se hizo más fuerte.

— Bek saca ese cuchillo de su ropa- pidió Lorenzo. Bek usó su magia y lo apartó.

Salí del lugar unos instantes porque no podía evitar las nauseas.

Al cabo de unos segundos mis amigos salieron en silencio. Lorenzo se me acercó para ver si estaba bien.

— ¿Qué haremos con el cuerpo?- le pregunté.

— Bek lo acaba de enterrar- informó Lorenzo.

Bek sonrío. No quiero saber cómo lo hizo.

Lorenzo tomó el cuchillo que le sacamos del uniforme al soldado y le quitó la vaina.

— sé quién tiene a la madre de Marina- dijo muy serio.

— ¿quién?- preguntó Ank.

— mí abuela- respondió mostrando el grabado de la hoja.

El cuchillo tenía grabado DR en el metal.

Espectros, Amores y Fantasmas (LGBT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora