"Del amor al odio y del odio al amor hay un solo paso.",
Lorenzo me guió en silencio hacia la planta alta. Se lo veía terriblemente molesto. Decidí que lo mejor que podía hacer era guardar silencio y evitar todo lo posible el contacto visual. Entramos en la tercera puerta a la izquierda del segundo piso. La habitación era enorme. Había dos camas en cada extremo con una mesita de noche cada una. Al frente de estas había dos puertas. Una estaba abierta y era el baño. La otra no tenía ninguna idea de lo que podía ser.
- dormirás en la cama de la derecha- me dijo y acto seguido lanzó mis cosas sobre ella- este es el baño- señaló la puerta abierta- y aquí- abrió la segunda puerta- está nuestro clóset- era una salita bastante grande con dos estantes en cada extremo. Estaba repleto de ropa, toda eran de marca.
Lorenzo comenzó a vaciar uno de los lados y acomodar lo sacado en el otro extremo. Era un chico muy metódico y ordenado. Acomodaba las cosas con gran agilidad.
- puedes poner tus cosas de ese lado.
Me sentí avergonzado al colocar mí ropa en aquel mueble. Casi podía decir que era un insulto para el clóset guardar mí ropa ahí. Tenía un par de prendas decentes que había heredado de mí padre, su campera de cuero más que nada. Pero el resto era de las ferias del usado que se hacían cada domingo en la plaza del pueblo. Ropa gastada y muy vieja. Mis zapatillas hacía años que habían dejado de ser decentes. Aún así acomodé mis cosas rojo como un tomate, evitando a toda costa mirar su reacción.
Lorenzo supervisó toda la acción con una expresión aséptica. Comienzo a sospechar que no es muy fan de las sonrisas. Esperó hasta que terminara para hablar.
- creo que es necesario que aprendas una serie de reglas- le dediqué toda mí atención- la primera- sacó de sus bolsillos una cinta adhesiva negra y con una agilidad increíble dividió el clóset en dos partes iguales. Hizo lo mismo con la habitación- mantente en tu lugar. Número dos: si ves esto- me enseñó una corbata- en la puerta no entres estoy con alguien.
- ¿Con alguien?
- teniendo sexo- miré rápidamente al suelo, esa palabra aún me daba pudor y el la había dicho como si nada.
- okey- respondí patético.
- número tres: tienes prohibido tener sexo aquí- di un paso hacia atrás. El pudor se transformó en enojo. ¿Acaso él podía pero yo no?. Pensé en discutir la regla número tres pero decidí callar, tenía que reconocer que no era un chico guapo y soy bastante raro como para encontrar alguien para hacer "eso". En él tenía más sentido, era increíblemente apuesto- y una advertencia más: el consejo de la DIES y mí madre creen que deberías estar aquí, pero yo no. No te lo has ganado. Eres nadie y mucho menos tienes las capacidades mínimas para entrar a selecto grupo. Ellos creen en ti y yo respeto eso, pero quiero que quede bien en claro que todos los que formamos GC6Y estamos altamente calificados. Somos lo mejor de lo mejor. Y tú eres un simple granjero.
Terminó la última frase antes de dejarme solo y frustrado. Entiendo que yo le moleste pero no tengo la culpa de estar aquí. ¡Él hizo todo lo posible para que viniera aquí! ¡Hasta me obligó a venir!.
Me senté en la cama y puse mis cabeza sobre mis rodillas. Todo esto está mal. ¿A poco sería un sueño?, porque si lo es, parece una tremenda pesadilla.
- ¿estás bien?- me preguntó una voz. Levanté la cabeza con pesadez y me encontré con Bek- vine a devolverte a Bigotes.
- ¡debo buscarle un lugar donde dormir!- exclamé de repente. Me había olvidado del gato completamente- dudo que dejen que lo tenga aquí.
- ¿Lorenzo? Quizás no. Es un buen líder pero es un amargado.
- ni siquiera sé que hago aquí - confesé.
- si estás aquí es por algo. Además eres el chico más afortunado del mundo, ¡vas a dormir a centímetros de todo un Adonis!
Me puse rojo como un tomate por quinta vez en el día. Lorenzo me intimidaba pero Bek tenía razón, vestido estaba para el infarto, no me quiero imaginar en pijama... o sin nada puesto.
- duerme en boxer- dijo Bek como leyendo mis pensamientos- ¿Te van los chicos...las chicas... ambos?, perdón la pregunta... es que me dio curiosidad.
- los chicos- contesté.
- ¡estás en graves problemas! Lorenzo le van ambos y es todo un rompecorazones. Dos chicos en una sola habitación con gustos afines... Ya sabes lo que pasa...
- no le caigo bien- no sé porqué pero me sentí mal por eso.
- Lorenzo es capaz de dormir con su propio enemigo. Su única diversión es tener sexo con quién sea. Para él un agujero es un agujero.
- no seré su diversión- Bek me miró con pena. No me creía una palabra, le demostraré que se equivoca.
- te daré un recorrido por la casa. La cena estará en media hora- mí estómago demandó comida. No había probado bocado en todo el día.
Para que se den una idea del lugar voy a decirles que es inmenso. El edificio tiene tres plantas. La primera es donde están: la cocina/sala de estar, la biblioteca, el despacho, el gimnasio y un baño. La segunda planta tiene cinco habitaciones. Todas idénticas a la mía con Lorenzo. La tercera planta tiene habitaciones que Bek llama "para el oficio" aún no sé que hay dentro de ellas pero supongo que lo sabré más adelante. Son cinco habitaciones. Y una dice "Sala de Juegos". Le pregunté a Bek porque tenían una sala de juegos si todos eran mayores de 18 años. Se rió a carcajadas y luego me dijo que lo descubriría muy pronto.
El tour termino justo cuándo una voz femenina nos llamó a comer.
- es Operadora 3.0- respondió mí compañero cuando arrugué el ceño- la casa es inteligente. Básicamente vivimos dentro de un robot.
- ¡súper!.
- ¡escucha esto!... ¿3.0 te has enterado de nuestro nuevo integrante?.
- afirmativo, su archivo acaba de ser cargado a mis sistemas. ¡Bienvenido a GC6Y Bruno!.
- ¿hola?- era extraño hablar con la casa.
Bek me guió a la cocina donde los demás nos esperaban. Al parece Operadora 3.0 cocinaba de forma automática porque los platos fueron servidos por manos mecánicas que salieron de la isla.
El grupo era bastante diverso pero todos buena gente, a excepción de Lorenzo todos se comportaron lo más amables y amistosos conmigo. Incluso ese tal Aurelio que parecía vivir en las nubes.
Luego de comer. La casa o lo que sea operadora 3.0 nos indicó que debíamos irnos a dormir. Fue algo raro que una pared me diera órdenes pero obedecí. Y lamenté hacerlo.
Entré a la habitación sin tocar y encontrando a Lorenzo totalmente desnudo. Quedé como una estatua, totalmente rojo y sin apartar la mirada de su cuerpo. No sé qué demonios me pasó, sentí una punzada de algo desconocido dentro de mí y mí amigo de allí abajo comenzó a crecer.
Su cuerpo desnudo era magnético, ¡no podía dejar de mirarlo!. Todo a mí alrededor se transformó en una niebla negra y sus perfectos abdominales iluminaban el lugar.
- no llevas ni media hora aquí y ya te me quieres tirar encima- habló el muy idiota. Salí de mí ensoñación muy avergonzado- dime una cosa campesino... ¿Te gusta lo que ves?- y comenzó a posar para que lo vea mejor.
Tragué saliva mientras él me regalaba una sonrisa arrogante.
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Espectros, Amores y Fantasmas (LGBT)
Fiksi UmumBruno cree que es un chico común con bastante mala suerte hasta que aparece Lorenzo y lo sumerge en un mundo donde los superhéroes son reales y luchan por mantener la paz en los cuatro mundos. *Todos los personajes de esta historia tienen más de 18...