Mi Alfa Bestia {YOONTAE}

D I E C I O C H O

CAPITULO 18

Reconstrucción 

Advertencia: Contenido +18

Cuando Seokjin sale de la habitación, no espera por el pasillo escoltado por guardias, encontrar al rey Min Yoongi con el cabello sujeto en un moño alto, el hanbok oscuro y en las manos sosteniendo un plato dorado con duraznos rebanados.

Cuando ambos alfas se encuentran frente a frente, el rey Min inclina su cuerpo sosteniendo la fruta. La reverencia es marcada y Seokjin abre los ojos con sorpresa.

—Me inclino ante ti, como cuñado —, dice el rey —. Lamento profundamente el dolor que he causado en tu familia, soy consciente y estoy dispuesto a aceptar las consecuencias de mis actos ante las decisiones que tú y tu hermano quieran resolver sobre mí.

La reverencia termina y el rey mira a los ojos al alfa mayor con cautela.

—Pero no me arrepiento ni por un solo momento. Aún si después quieres matarme, Seokjin, lo entenderé, pero no será fácil, porque no pienso dejar a Taehyung solo nunca.

Seokjin no responde. Mira perplejo a su cuñado y pronto intercambia miradas entre los ojos del rey la fruta.

—No ha estado comiendo bien —, explica Yoongi de forma espontánea —. Está demasiado triste, y sólo quiero que su salud no se afecte. Duraznos es lo único que ha estado aceptando comer.

Al alfa Kim le empiezan a brillar los ojos con destellos dorados y los puños se cierran.

—Claro que te quiero matar, Yoongi —, dice, con la mandíbula apretada.

Yoongi asiente aceptando con la cabeza, como si estuvieran hablando de la brisa fresca del anochecer.

—Mataste a mi padre y debería matarte, pero no entiendo por qué entonces tengo deseos de agradecerte.

Yoongi le mira. Ambos alfas emanan aromas tranquilos, a pesar que en los ojos del mayor parezca asomarse el fantasma de una lágrima entre las esquinas.

—Como cuñado te pido que protejas a mi hermano. Taesung y yo hemos decidido que no haremos nada, por ahora.

Yoongi lo sabe, pero se siente bien escucharlo de Jin y no de los labios de Namjoon. La confirmación lo tranquiliza, sobre todo porque no desea brindar una nueva preocupación a su pareja.

—Iré a resolver todo. Cuídalo por mí. De verdad que no comprendo nada. Estoy sintiendo tanto, y sólo... —la mirada baja—. Entiendo. Creo... Sé lo del tráfico de omegas. Entonces creo que entiendo, que has liberado bestias a costos muy altos.