Duchandose

2.1K 85 61
                                    

Sally Face estaba frente al espejo con el cabello suelto y mojado, tenía unas tijeras frente a él. Es algo que pocos comprenden pero era su cabello o los brazos.

Sujeto las tijeras y recortó las puntas, justo cuando había terminado ingreso al baño Travis Phelps.

—Perdon Sal, no sabía que estabas aqui—. El rubio estaba adormilado, vestía únicamente sus boxers y una camisa de Sanity's Fall de Sal. La noche anterior habían tenido coito por bastante tiempo, los chupetones eran visibles, además el cabello largo de Travis estaba sumamente desordenado.

El peliazul salió de sus pensamientos cuando el rubio maldijo en voz alta.

—¡Mierda!—exclamó mientras separaba sus piernas dejando a la vista el hilo de semen que caía desde el interior de sus boxers hasta la mitad de su muslo.

—Disculpa, anoche ya no te limpie—. Sal tragó saliva, se veía jodidamente sexy.

—No importa, tomaré un baño—. El moreno se quitó la playera y después abrió la regadera, esperando pacientemente a que la bañera se llenará.

El peliazul siguió con la mirada cada movimiento de su novio, su espalda estaba marcada de mordidas y otras hematomas provocabas por sus labios y dientes.

—¿Te cortaste el cabello?— señaló Travis después de ver el cabello en el lavamanos.

— s-si, era eso o…—. Travis se acercó y en silencio sujeto su mano, con la otra paseo sus dedos entre el cabello recortado de Sal.

—se te ve bien, ya tenías las puntas maltratadas y ciertamente no me gustaría que lo tengas como Larry—. El corazón se Sal palpito con anhelo.

La bañera se llenó por completo y a Travis, importandole poco la presencia del peliazul se deshizo de sus boxers y se sumergió en el agua.

—¿No tomaras un baño?—. Dijo el rubio.

—s-si—. Apenas se quitó la ropa volvió los ojos a Travis y noto su sonrojo, estaba actuando como si no le importará el hecho de que apareció siendo muy sugerente pero tenía razones profundas, quería distraerlo porque era uno de esos días.

—entrare—. Travis miro a otro sitio cuando Sal ya estaba sumergido en la bañera con las piernas extendidas dejando ver su pene.

Estuvieron un momento en silencio, el goteo de la regadera era incómodo.

—¿Tu cuerpo está bien Travs? Estoy notando recién que tienes el cuerpo lleno de mordidas y además no pude evitar notar que estás algo rosado.

—¡¿Por qué?!... — nuevamente mostró sus mejillas sonrojadas y ese ceño fruncido.—pues si estoy algo adolorido pero no es nada grave, el dolor se pasará en un rato.

—disculpa si fui rudo anoche —. El cabello de Travis se veía muy bien tan largo, no hacía mucho tuvo un altercado con su padre, Kenneth Phelps lo golpeó brutalmente al punto de dejarle el ojo prácticamente inservible, no se lo tuvieron que extraer pero ya no podía ver, ese color blanquesino hacía sentir rabia al peliazul.

—Sal…¿Tú estás bien?—. El rubio abrió sus piernas entelazandolas con las de Sal para acercarse poco a poco.

—eh… si, estoy bien.—no tuvo tiempo de pensar cuando Travis le propinó un beso.

Sus labios suaves temblaban y probablemente era por su iniciativa.

—quiero que dejes de pensar por un momento, quiero que…me dejes hacer todo hoy —. El moreno se acomodo a horcajadas sobre Sal, sostuvo entre sus cálidas manos el rostro pálido del peliazul.

30 días OTP (Sally Face x Travis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora