Señas | Rivari

Capítulo 3

Esta vez fueron tres días.

Abril estaba caminando de regreso a la biblioteca después de su hora de almuerzo cuando vió a Samantha parada entre las filas de libros, leyendo el reverso del libro que estaba agarrando con su mano.

Abril se dejó caer detrás del mostrador, saludando a su mejor amiga Molly, quien era la encargada de ciencias computacionales de la biblioteca, antes de sentarse detrás de su escritorio. Tomó un sorbo de su café y miró por encima de la pantalla de su computadora para ver a Samantha, que estaba sacando otro libro de los estantes.

Un pequeño pliegue se formó entre las cejas de Abril mientras miraba a Samantha ¿era correcto juzgarla por su hermano? Parecía tan dulce, especialmente cuando se puso nerviosa el otro día. Incluso ahora, mientras Abril la miraba, Samantha parecía tan normal, hojeando las páginas del libro que sostenía.

Unos minutos más tarde, Samantha salió de las pilas de libros, llevando una pequeña pila con ella. Abril la miró fijamente, con la esperanza de que ella mirara, y cuando la atención de Samantha se deslizó hacia la recepción, Abril saludó con la mano. Una amplia sonrisa iluminó el rostro de la semirubia mientras caminaba hacia la chica rubia.

-Me estaba preguntando dónde estabas. -dijo Samantha a modo de saludo, mientras Abril buscaba el bloc de notas más cercano.

"Era mi tiempo para almorzar, tuve que hacer una parada para tomar café."

Abril levantó el bloc de notas, recogiendo la taza de café que había olvidado mientras miraba a Samantha. Tomó un sorbo, esperando la respuesta de la chica frente a ella.

-Estoy terminando mi propio almuerzo, pensé en pasar y recoger el material de lectura nuevo. -explicó Samantha- Me alegro de haberte encontrado antes de irme.

Abril sonrió al bloc de notas, mordiéndose el labio mientras garabateaba una respuesta.

"No esperaba que regresaras tan pronto, todavía te quedan cuatro días para devolver los libros que tomaste prestados".

Samantha soltó una breve carcajada y rápidamente se tapó la boca con la mano ya que, el sonido perturbaba el silencio de la biblioteca. La chica en cuestión se disculpó con un estudiante universitario irritado que la estaba mirando por encima de su computadora portátil. Se inclinó más cerca de Abril, bajando la voz a un susurro.

-Pensé en regresar pronto, hubo algunos temas que me llamaron la atención la última vez que estuve aquí.

Con una sonrisa, Abril tomó el primer libro. "Lenguaje De Señas Para Dummies". Rápidamente volvió a mirar a Samantha, que todavía estaba inclinada sobre el mostrador con una sonrisa en su rostro.

-Alguien me recordó que el lenguaje de señas no es solo para personas sordas. -susurró Samantha, guiñándole un ojo a Abril. O al menos ella trató de guiñar un ojo. Salió como un parpadeo, lo que Abril pensó que era aún más lindo. Sintiendo su cara sonrojarse, Abril tomó el siguiente libro y se puso nerviosa cuando se dio cuenta de que era otro libro sobre lenguaje de señas americano.

Escaneando el último libro, Abril lo colocó encima del resto de la pila. Seis libros, todos sobre lenguaje de señas. No podía dejar de sonreír cuando le devolvió a Samantha su tarjeta de la biblioteca.

-Bueno, será mejor que empiece. -dijo Samantha, recogiendo los libros y mostrándole a Abril otra sonrisa- Nos vemos la próxima vez.

No era una pregunta. Samantha sabía que volvería a ver a Abril, sacando más libros como excusa para seguir regresando. Y Abril sabía que estaría contando los días hasta que volviera a ver a Samantha.

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Era viernes por la noche, lo que significaba que Abril estaba en el antro favorito de Amairani, sentada junto a Molly en una cabina, a quien había arrastrado junto con ella.

Ama y Filis llevaron cervezas para todos, antes de instalarse frente a Molly y Abril. Ya estaban inmersos en una conversación sobre uno de los casos de Filis en el departamento de policía.

-Así que logramos rastrear a uno de los muchachos hasta un almacén abandonado donde habían estado creando su club de lucha subterráneo. Lo llevamos a la estación y, a los cinco minutos de interrogarlo, teníamos el nombre de la persona detrás de él -dijo Filis, con aire de suficiencia.

-Cierto, porque eres muuuuy intimidante. -se rió Amairani- ¿Qué hiciste, le enseñaste tus hoyuelos? Apuesto a que estaba aterrorizado.

-Puedo ser muy amenazante cuando quiero serlo Garza -Filis hizo un puchero, fingiendo fruncir el ceño cuando Molly y Abril se unieron a la risa de Amairani.

~Ok, detective hoyuelos. ~Abril le articuló a Filis, provocando otra ronda de risas.

-¡Oye! Si te entendí. -resopló, cruzando los brazos- Aprender el lenguaje de señas para ti fue una idea terrible, estás hiriendo mi orgullo aquí Abril. -bromeó.

-Solo estamos jugando contigo bebé, estoy muy orgulloso de ti. -dijo Amairani, besando a Filis en su mejilla- Pero tienes que admitir que tus hoyuelos son muy bonitos.

Abril sonrió, se sintió cálida por dentro al ver a Amairani feliz con la persona que amaba. Tomando un sorbo de cerveza, su mente se volvió hacia otra persona que conocía con lindos hoyuelos.

-¿Abril? -volvió a la conversación y miró a Molly, que acababa de hablar- ¿Estás bien? Has estado distraída durante todo el día. -continuó.

Ella asintió, sonriendo mientras sostenía su botella de cerveza vacía. Hizo un gesto hacia la barra cuando se levantó. Tomando la botella vacía con ella, la señaló y levantó cuatro dedos hacia el bartender.

Mientras esperaba, pensó en lo que Molly había dicho.

Era cierto, había estado distraída todo el día pensando en Samantha, y había llegado a la conclusión de que tomaría una decisión sobre ella.

Ella entendió porque Amairani le había dicho que tuviera cuidado, ella siempre había sido demasiado confiada, pero sabía que su confianza no estaba fuera de lugar en Samantha.

Mientras llevaba las botellas de vuelta a su mesa, sonrió para sí misma.

No podía esperar para volver a ver a Samantha.

Si ven algún error de edición, ortográfico, o de redacción no duden en decírmelo. Se los agradecería mucho.

Los quiero. ❤️