Abril no tuvo noticias de Samantha al día siguiente.
El lunes en el trabajo, Abril seguía mirando disimuladamente, por encima del hombro, a la puerta. Se acercaba la hora del almuerzo y esperaba que Samantha se detuviera.
-Sabes, al menos podrías intentar ser menos obvia. -susurró Molly, acercando su silla al escritorio de Abril, quien volvía a mirar hacia la puerta, saltó y se dio la vuelta en su silla. Le dirigió a Molly una mirada inocente, fingiendo no saber de qué estaba hablando- Oh, vamos Abril, no has quitado los ojos de la puerta desde que abrimos. -dijo, rodando los ojos- No estarás esperando que cierta CEO se detenga, ¿verdad? -preguntó inocentemente.
~¿Cómo sabes acerca de Samantha? ~ella respondió mientras sus mejillas se ponían rosadas.
Molly se rió.
-¿Aparte del hecho de que ella ha estado aquí cada dos días durante las últimas tres semanas? Ama me lo dijo -Abril suspiró, por supuesto que su hermana lo habría mencionado, especialmente porque Molly también trabajaba en la biblioteca.
~Molly, ¿Has estado cotilleando con mi hermana otra vez? ~Abril respondió, levantando las cejas.
-Bueno, quiero decir, no lo llamaría chisme, pero ella mencionó a Samantha en el bar la otra noche y podríamos haber... sí, estábamos chismeando. -Molly divagó, con una sonrisa tímida en su rostro. Abril puso los ojos en blanco, sonriéndole para mostrar que no le importaba.
Las cejas de Molly se arquearon, mirando algo detrás de Abril.
-Entrante. -dijo, rodando su silla hacia su escritorio. Abril le dió a Molly una mirada perpleja, antes de girar su silla para ver a Samantha entrar.
-Abril, hola. -dijo en voz baja, no queriendo molestar a las otras personas en la biblioteca. Arrojó algunos de los libros que llevaba en la ranura de devolución antes de dirigirse al mostrador- Entonces, pensé que sería mejor venir a verte en lugar de enviarte mensajes de texto para ponernos de acuerdo con las bebidas. -dijo Samantha, inclinándose sobre el mostrador. Abril sintió sus mejillas sonrojarse mientras le sonreía a Samantha. Podía ver a Molly mirando a ambas por el rabillo del ojo.
"Estoy libre cualquier noche de esta semana, ¿qué día es bueno para ti?"
Escribió Abril en una hoja de papel. Samantha inclinó la cabeza y miró al techo mientras pensaba. Abril contempló la extensión de la garganta de Samantha, su mirada se movió hacia la línea afilada de su mandibula, y luego más arriba hacia los labios de Samantha que estaban presionados. Abril bajó la vista rápidamente hacia el trozo de papel en sus manos, tratando de ocultar su cara sonrojada.
-¿Cómo te suena el viernes por la noche? -preguntó Samantha, ajena a los pensamientos extraviados de Abril. La chica asintió y escribió una respuesta.
"Suena genial, ¿tienes algo en mente?"
-Hay un bar en la calle 31 que me muero por visitar, he oído que es realmente bueno. -sugirió la CEO, esperando la respuesta de la bibliotecaria. Esta última volvió a asentir, sonriéndole a la semirubia- Perfecto. -le sonrió Samantha a Abril- Voy a buscar algunos libros nuevos, ¿Alguna sugerencia? -Abril levantó el papel nuevamente, con Harry Potter escrito debajo de su última respuesta. Samantha se rio en voz baja- ¿Harry Potter? ¿Qué no son para niños?
Abril le dirigió a Samantha una mirada de burla, escribiendo rápidamente otra respuesta.
"¡Harry Potter es para todos! No puedo creer que no los hayas leído antes."
Samantha levantó las manos en un gesto defensivo.
-Está bien, está bien, Harry Potter, volveré en un segundo. -Abril la observó alejarse en busca de los libros. El sonido de alguien aclarándose la garganta hizo que Abril saltara.
Se giró para mirar a Molly.
-Harry Potter. ¿De Verdad? -le susurró a la rubia. Ella se encogió de hombros, con la cara enrojecida- Realmente estás loca por ella -se rió Molly, haciendo que la cara de Abril se pusiera aún más roja. Ella fingió ignorarlo.
Samantha regresó con tres libros sostenidos cerca de su pecho.
-Aquí vamos, tres libros de Harry Potter. -anunció Samantha mientras plantaba los libros en el mostrador- Y me gustaría revisar estos libros de ASL nuevamente. -dijo, deslizando hacia adelante los dos libros que no había regresado.
(ASL: Lenguaje de Señas Americano).
Después de que Abril escaneó todos los libros, se despidieron, ambas esperando que el viernes llegara rápidamente.
• ────── ✾ ────── •
Esa noche, Amairani invitó a Abril a su apartamento a comer comida china con ella y Filis. Abril recogió la comida en el camino y se dirigió a la casa de su hermana.
Estaban a medio camino de su comida, con Abril acaparando su atención en los post its, cuando su teléfono vibró. Lo encendió y encontró un mensaje de texto de Samantha.
Me equivoqué, no puedo
creer que haya vivido toda
mi vida sin leer estos libros.Abril sonrió a su pantalla, su teléfono volvió a sonar cuando llegó otro mensaje.
Por cierto, el bar en la
calle 31 se llama The Pen,
¿Nos vemos allí a las 7?Abril le respondió el mensaje confirmando, mirando hacia arriba mientras volvía a dejar el teléfono. Amairani y Filis tenían los palillos levantados hasta la mitad de la boca, ambos con las cejas levantadas.
-¿Qué te tiene toda nerviosa, Garza? -preguntó Filis, con una sonrisa maliciosa en su rostro- ¿O debería decir quién? -Abril se puso rojo brillante, recogiendo otro post its para poder mantener sus manos ocupadas.
~Simplemente estoy haciendo planes para pasar el rato con un amigo ~volvió a articular después de que terminó de comer.
-Un amigo ¿eh? -Amairani preguntó- Claramente no es Molly, Osvaldo y Juan no están en la ciudad, entonces ¿qué otro amigo es este?
Abril dejó escapar un profundo suspiro, claramente sabían que estaba enviando mensajes a Samantha.
~Samantha y yo vamos a tomar algo el viernes, después del trabajo ~Abril les informó, articulando lentamente para que Filis pudiera seguir el ritmo.
-¿Bebidas? -Amairani destacó.
-Te das cuenta de que es una cita, ¿verdad? -Filis intervino.
Abril protestó, gesticulando ampliamente con las manos.
~No es una cita, es solo, no sé, sólo es ir por unos tragos ~respondió, sintiendo que sus mejillas se volvían rosadas mientras lo decía. Amairani y Filis abandonaron el tema, queriendo no avergonzar a Abril.
-Aunque te gusta, ¿verdad? Solo estoy comprobando. -preguntó su hermana con curiosidad. Abril asintió en respuesta- ¿Te gusta cómo realmente gustarte? -Abril puso los ojos en blanco a los dos.
~Sí, me gusta, pero creo que ella necesita una amiga en este momento más que cualquier otra cosa ~Abril respondió, pensando en cómo la cara de Samantha siempre se iluminaba cuando estaba cerca de Abril.
Abril sabía que haría cualquier cosa para seguir haciendo sonreír a Samantha.
Si ven algún error de edición, ortográfico, o de redacción no duden en decírmelo. Se los agradecería mucho.
Los quiero. ❤️
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Señas | Rivari
FanfictionCuando Abril tenía 12 años sufrió un accidente automovilístico en el que lamentablemente fallecieron sus padres. Desde ese día no habia dicho una palabra. Trabajando como bibliotecaria en Seattle, Abril conoce a Samantha Rivera, y por mucho que quie...