The Beach ( Jacegon)

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Maybe you're right, maybe this is all that I can be
But what if it's you, and it wasn't me?
- W.D.Y.W.F.M? | the neighbourhood

Aegon seguía durmiendo y ya eran las 12:30, lo bueno es que teníamos el día libre.

Mientras dormía plácidamente me percaté de unas marcas  adornaban su cuello blanquecino, eran los chupetones que probablemente le habría hecho anoche.

Entonces recordé que todo empezó porque el me había comprado un peluche, pero claro, cuando llegamos a la habitación no me dio el peluche por, bueno, por motivos obvios.

El sonido de las sábanas moviéndose me llamó la atención, Aegon se había despertado y ahora se restregaba los ojos.

- Buenos días...- pronuncié, Aegon se levantó de la cama y me saludó con la mano después se metió en el cuarto de baño.

Yo estaba sentado leyendo o más bien terminando el libro de Harry Potter; Aegon tardó un rato en el baño y después salió vestido, yo me extrañé.

- A donde vas?- se suponía que los sábados Aegon no tenía que hacer nada, así que se me hizo extraño verle vestido para salir.

- Tengo cosas que hacer.- su voz estaba cortante, se le notaba distante, después no me dio tiempo a decir más nada y se terminó yendo.

Una sensación de nerviosismo se instaló en mi pecho, si la noche anterior le había dado lo que tanto quería que hacía yéndose así de rápido? Tal vez podría haberme dado algún beso en los labios o algo, no?

Subí las escaleras de la recepción del hotel, la ansiedad se pegaba en mi pecho como una plaga.

Me paré frente al umbral de la puerta, después toqué dos veces en ella, empezaba a temblar y deseaba ponerme un cigarrillo en la boca para olvidar que me encontraba en la boca del lobo.

- Hola Aegon.- la mujer de cabello pelirrojo abrió la puerta, llevaba puesto un vestido de seda color verde fuerte.

- Hola mamá.- musité con molestia y me metí en el interior de la habitación, con miedo, ansiedad y presión; todo lo que había logrado probablemente hoy caería de nuevo por las manos arrolladoras de mi madre, de Alicent.

Rhaena tenía puesto un pantalon de licra y una sudadera gris deportiva, estábamos entrenando para el partido de tenis que sería dentro de poco.

Cregan estaba sentado en las gradas mirando como entrenábamos, yo aún pensaba en Aegon y su actitud de esta mañana.

- En que piensas?- preguntó Rhaena.

- Nada.- mentí.

Por supuesto que estaba pensando en algo, pero el problema era que no sabía cómo empezar a hablar de ello.

- Jace últimamente te he visto ausente, sé que estás saliendo con alguien y lo llevo sabiendo desde hace semanas...- resopló Rhaena; me tiró la pelota con la raqueta yo la devolví rápidamente.

- Desde cuando empezaste a creerlo?- pregunté rogando que no fuese por la fiesta, entonces estaría jodido.

- Te acuerdas la semana en la que Aegon vino con golpes en la cara?- preguntó, yo asentí.- Pues esa semana estabas raro, como preocupado por algo y me lo confirmaste el día de la fiesta, parecía que habías visto a alguien a quién no deseabas ver.- me sentí extraño, Rhaena había empezado a sospechar que estaba saliendo con alguien desde la pelea de Criston y Aegon? Pero en aquel instante no había pasado nada entre nosotros, solamente... Solamente empecé a preocuparme por él alrededor de esos días, así que... Aegon me gustó desde el inicio?