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La luz del sol se colaba por la gran ventana y azotaba mi cara, un movimiento en la cama hizo que me percatase de la falta de Jace en la cama.

Lo más probable es que estuviese en el lago como la anterior vez, pero no fue así. Entonces decidí ir al huerto de Corlys, tal vez habría decidido ir a mirar las plantas.

Cuando entré en el huerto había una marea de colores y holores, a mi alrededor habían plantas coloridas y preciosas.

No más preciosas que Jace; él estaba regando una planta color violeta que por el olor supuse que eran lavandas (no poseía conocimiento alguno en la botánica)

- Qué haces?- Jace se sorprendió al oír mi voz detrás suya, se giró y sonrió levemente.







- Estoy regando las flores de Corlys, tu no parecías querer hacerlo.- el agua fluía con lentitud por las flores violáceas. Jace llevaba puesta una camisa de manga hueca que relucía los músculos de su brazo y esa prenda le provocaba mariposas en el estómago a Aegon.

Ambos estuvieron un rato haciendo labores en el huerto aunque mayoritariamente era Jace, pues Aegon no tenía idea ninguna.

En la cocina había un silencio cómodo entre ambos, Jace estaba cortando fresas para merendar y su cabello húmedo goteaba en la camisa holgada que llevaba puesta, Aegon estaba al lado suyo fumándose un cigarrillo, llevaba puesta una sudadera de la banda the neighbourhood.

- Tienes planeado dejar de fumar algún día?- Aegon terminó de expulsar el humo que estaba conteniendo, ahora se giró para mirar al castaño. Jace que estaba concentrado en cortar las fresas no mostraba una sonrisa, el comentario había ido en serio.

- Para ser sincero no lo sé, supongo que ya sucederá.- espetó con el cigarillo aún entre las manos.

- The Neighbourhood?- preguntó Jace con la cabeza ladeada, ahora había dejado parte de las fresas en un boll. Miraba con curiosidad el logo de la sudadera, que contenía el letrero de The Neighbourhood. Y una casa del revés.

- Sí, es una banda, les conoces?- el cigarillo bailó entre los labios del rubio, miraba con curiosidad a Jace, pues The Neighbourhood era su banda favorita y pensar que su gusto fuese compartido por Jace le hacía sonreír.

- Vale, no te sorprendas... Pero, no les escucho. Es decir, he oído algunas canciones de ellos, pero no soy fan como tal.- Jace ahora sacó un vasito lleno de crema blanca y la fue vertiendo poco a poco en los recipientes con la fruta.

- Podrías escuchar algunas, está bastante bien... Aunque no sé cuál es tu estilo de música, nunca me lo has dicho.- Aegon volvió a darle una calada a la zona de filtración del cigarro.

- Escucho a Cigarettes after sex, Taylor Swift y alguna que otras canciones sueltas de varios artistas.- Jace se giró y le acercó el recipiente, Aegon expulsó el humo y agarró un pedazo.

- Pero podría empezar a escuchar a la banda, veo que te gusta bastante.- Jace señaló con el dedo libre la sudadera de Aegon, el rubio soltó una leve sonrisa y siguió fumando.

- Supongo que algún día podría ponerte varias canciones.- ambos salieron al lago y se sentaron en una manta que estaba posicionada sobre el césped para disfrutar de la compañía del otro, cada uno hablaba de temas distintos. Jace sobre el tenis y Aegon sobre que este viernes iría al fin a tocar el piano en un auditorio y de lo mucho que deseaba que asistieran personas al lugar.

Ahora se había instalado nuevamente un silencio entre ellos, aunque era un silencio cómodo, Aegon se deleitaba con la imagen del lago, los rizos de Jace, el sonido de los pájaros y el dulce aroma a fresas y flores. Era simplemente la calma que llevaba años sin experimentar.

- Rhaena me preguntó sobre nuestra ausencia, le digo que vinimos juntos ?- Jace preguntó carraspeando, Rhaena era consciente de la relación poco usual que había entre Aegon y Jace y tal vez el que sus amigos sepan que están juntos levantaría sospechas, o tal vez era Jace pensando demasiado.

- Dile la verdad y mándale saludos de mi parte.- Aegon pronunció, después busco en el césped su caja de tabaco y de ella sacó uno, el encendedor era color plata, la chispa de fuego brillo, después solo se vio humo salir.

Jace observó con detalle el perfil de su novio, el cual era afilado pero atractivo y no podía evitar perderse en esos ojos esmeralda.

Sentía algo fuerte e irremediable por su tío y lo peor era que su tío también sentía lo mismo.

Eran como dos imanes que se atraían con tal fuerza que era arduo conseguir que se alejasen.

















- Me gustaría adoptar un gato.- los ojos del rubio brillaron con especial destello, Jace le miró incrédulo yendo a agarrar una fresa.

- Se pueden tener gatos en la escuela?- Jace jugó unos minutos con la fruta en las manos, luego se la llevó a la boca.

- No estoy seguro, pero creo que sí.- musitó Aegon, el seguía con el cigarrillo encendido.

Estuvieron un rato hablando hasta que hubo un silencio nuevamente entre ellos, ambos sabían que había un tema que los dos deseaban sacar, pero ninguno se atrevía. El tema era: el sexo.

Estaba igual de claro que disfrutaron como de que deseaban volver a repetirlo, lo que no estaba tan claro era quien sería el primero en hablar de ello.

- Aegon...- la voz aterciopelada de Jace sacó de sus pensamientos a Aegon, se giró y chocó directamente con los ojos avellana de Jace.

- Si?- pronunció con nerviosismo, pues en su fuero interno deseaba que sacase el tema de conversación acerca del sexo.

- En respecto a lo de anoche... Es decir.- Jace se rascó la cabeza con nerviosismo, Aegon sintió que su corazón se calentaba. - Iba a preguntar si te gustó, pero creo que es obvio, no?- Jace estaba sonrojado y a Aegon le pareció chistoso que la noche anterior le haya follado como nunca y ahora le de vergüenza articular una pregunta sobre ello.

- Deberíamos repetirlo.- los labios de Aegon se curvaron en una sonrisa pícara, el nerviosismo desapareció de Jace y ahora había una tensión palpable entre ellos dos.

- Bueno, si quieres podríamos...- Jace no pudo terminar la frase por los labios de Jace, que estaban atacando los suyos vorazmente.










Jace se tumbó sobre Aegon para empezar ha darle besos y roces fogosos, Aegon reposó las manos en los hombros, los cuales tenían aún las marcas de las uñas de él.

- Joder, espera...- habló con voz temblorosa Jace, pues Aegon había empezado un vaivén de fricción entre las partes íntimas de ambos.

- Vamos a hacerlo aquí?- hubo un silencio en lo que Aegon buscaba la respuesta.

- Sí.- respondió volviendo al movimiento.

Nota: siento que estoy poniendo demasiado sexo, ayuda denme opiniones por fa 😭

The Beach  ( Jacegon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora