Mi doña

15.¿Que paso?

La mañana siguiente, leon estaba despierto, no había podido dormir en toda la noche llorando y pensando en todo lo que le hicieron a el amor de su vida, así también pensaba como era la vida de cruel con esta mujer.

Altagracia despierta y ve que león está a su lado le pareció extraño, pero no se acordaba de nada de lo que había pasado en la noche.

León disculpa me ¿que haces aquí? Perdon si te llamé ayer la verdad es que no me acuerdo de nada.

Altagracia se percata que está totalmente desnuda y solo tiene sus bragas puestas.

No me digas que tuvimos sexo, y no me acuerdo león, que vergüenza.

Nada de eso Altagracia anoche terminaste vomitando y te quite la ropa, igual no es nada que no haya visto antes, y tú me encantas.

Peor aún león, es más vergonzoso.

Bueno olvidemos que eso pasó, toma mira, desayunas te tomas este par de píldoras y te alistas que te tengo una sorpresa.

¿A mí? Pensé que estabas enojado conmigo.

Lo estaba, pero pensándolo bien, creo que no tengo por qué, confío en ti Altagracia y olvidemos el tema por el cual discutíamos.

Está bien amor, ahora lo que necesito es que me hagas el amor en la tina.- sonríe Altagracia con picardía.

El la carga hasta la tina donde había puesto sus sales favoritas y burbujas. Ella se metió y el estaba estupefacto mirando lo hermosa que se veía, ella le tomo la mano y lo halo para que callera al agua.

Te amo, lo sabes león Contreras.

Y yo te amo Altagracia Sandoval.

Se unieron en un beso tan intenso que podrían haber querido nunca salir de ahí, Altagracia acariciando su cuerpo toca su erección que está apunto de estallar, ella lo masturba y lo besa al mismo tiempo y se detiene.

Amor ya es hora de alistarnos, luego se nos hace tarde.- ríe con picardía.

León voltio los ojos.- ahora te vienes acá y terminas lo que empezaste.- dice riendo.

Hala a Altagracia y ella se sienta sobre su pene, con unos movimientos tan rápido, que los dos se corrieron al mismo tiempo.

Altagracia y león salen de la tina para vestirse y pasar el día juntos.

Amor ¿a dónde iremos?

Es una sorpresa, no te lo diré.

Está bien se que no me llevarás a un lugar que no me guste.

León condujo varia horas, mientras platicaba con Altagracia sobre sus ideologías, ella le contó su historia con Mónica tal y como paso y el, le dice que lo siente mucho, y que sabe que no tiene por qué sentirse culpable, ella asiente.

Llegamos amor.

¡Guao!

Altagracia mira a su alrededor y ve una pequeña cabaña al lado de un lago donde el agua era casi como los ojos de león.

Se que no es mucho, yo no te puedo dar todos los lujos a los que estás acostumbrada altagracia, pero puedo venir aquí contigo a que sea la noche más inolvidable.

Es perfecto amor.- se ruboriza.

Y ya a estas alturas deberías de saber que a mí los lujos me gusta darme los a mi misma, y pobre de la mujer que no sepa bajarse la luna ella sola.

Antes no lo hacía amor, pero ahora se que si. Sin embargo doña no permitiré que no me deje mimarla, aunque sea poco lo que tengo doña, todo lo mío es suyo.

León sabes que no me gusta que tú me digas doña, eso no lo soporto, no de ti.

Lo se amor.

León ¿te puedo hacer una pregunta?

Dime amor.

¿Por qué ese cambio repentino de actitud?- pregunta un poco consternada, sabe que león no es hombre que cambie de parecer tan fácil.

León se queda callado y ella mira como sus lágrimas estaban a punto de salir y un silencio invadió el momento.

Entiendo.- dijo Altagracia.

Creo que hable de más anoche, supuse que algo había dicho tenía esa sensación, maldita sea, odio que lo sepas, ¿como puedes estar conmigo?

Y ¿Por qué crees que no querría estar contigo?

Por qué estoy maldita, por qué estoy sucia y echada a perder.

No digas eso Altagracia, yo te amo y ahora, que se esto pretendo nunca dejarlo de hacer, eres la mujer más valiosa que e conocido y la más temeraria, no soporto que pienses eso de ti.

Te amo león.

Altagracia besa a león empujándolo adentro de la cabaña, tirándole a un sofá viejo que habia para hacerle el amor.

Ese era el cuadro perfecto de altagracia por fin se sentía feliz..

Suena el teléfono de Altagracia, y ella contesta.

Hola hermana hasta que contestas ¿dónde estás?-dice Regina.

No me lo vas a creer, león se enteró de todo, y me quiere, Regina el me quiere.

Nos vemos mañana hermanita me espera una noche de sexo apasionado, te quiero.