XVII

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[Jane]

Las niñas lloraban en el piso de abajo y yo ya no podía dormir más por el ruido así que decidí a bajar para ver qué pasaba.

—¿Por qué lloran? —Dije bajando las escaleras. Mi madre le ponía el chupete a Gemma.

—¿Que haces? Los chupetes pueden llegara causar caries y problemas en el paladar. —Dijo mi padre al ver qué mi madre le estaba poniendo el chupete.

—A mi como si causan gangrena o verrugas genitales. Las mantiene calladas. —Suspire al ver que nadie me hacía caso y fui a la cocina directamente a hacerme el desayuno.

—Dale una de mis camisetas siempre las tranquilizan. —Argumenta mi padre.

Él se la dio y la niña se relajó un poquito pero seguía llorando.

—Oye, esto no es por el chupete, ¿verdad? —mi padre hizo una pausa y me senté en la mesa a comer el simple sándwich de mantequilla y mermelada que me había hecho. —Esto es porque tú, le montaste la pierna a un tío como vaquero de rodeo.

Casi me atragantó.

—¿¡Qué!? —Mis padres se quedaron mirándome y yo decidí terminarme el sándwich en la puerta de mi casa.

—Jane... —Mi madre intentaba solucionarlo pero yo ya había salido por la puerta.

Después de un portazo tras salir, me senté en las escaleras de mi casa mientras las lágrimas caían sin parar, también comía y ocultaba el dolor del moratón lo mejor que podía.

—Hola, loca. ¿Estás bien? —Carl se paró delante de mi casa y yo lo mire sin decir una palabra. Él noto que algo pasaba y se sentó a mi lado. —Soy tu novio, me lo puedes contar.

—Mis padres no paran de pelear, una y otra vez. En bucle. —Agache la cabeza y Carl me acarició la mejilla para que lo mirase.

—Pronto lo solucionarán, son Kev y Vero, no pueden estar el uno sin el otro.

—Mi madre se restregó en un hombre en una fiesta. —Mire a Carl a los ojos. Los ojos que me salvaban de todo y me hacían olvidar toda una gama de tonalidades.

—Te prometo que lo solucionarán, loca. —Me besó y se levantó de la escalera. —Me tengo que ir a trabajar, después nos vemos. —Me tiró un beso de despedida y se fue.

¿A trabajar?

[Carl]

Nunca había estado tan orgulloso de mí mismo. Tener novia mola, y aparte es un bombón que lo flipas.

Me metí en un callejón y me puse la ropa de pijo que me dió G-Dogg. Repasaba los apuntes en mis brazos de las medidas que tenía que dar. He estudiado más para esto que para cualquier examen del cole.

Veinte con cincuenta y tres gramos son una onza...tres con cincuenta y cuatro es una bola...

Me giré y me encontré con el encargado de G-Dogg.

—Cojo, ponte en la esquina o te machaco con un martillo. —Me amenazaba él.

—Tranqui tío, ya voy. —Lo tranquilizaba y me fui sonriendo de allí.

[Jane]

Mi padre se fue al parque con las niñas y yo me quedé con mi madre viendo la televisión.

—Jane...

—Mamá, ¿por qué?

—Fue un accidente. Sabes que nunca le haría eso a Kev a conciencia. —La mire y me acerqué un poco más a ella.

Avec Toi ~ [Cᴀʀʟ Gᴀʟʟᴇɢʜᴇʀ] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora