Un año y tres meses después – Hallowen en Casa Kim Park
- ¡Listo! – Rose había terminado de ayudar a sus mellizas con sus respectivos disfraces – No puedo creer lo que están viendo mis ojos – les dijo mirando orgullosa a sus dos hijas disfrazadas de enanitos. Tenías puestos calzas de colores y una chaqueta con un cinturón de otro color, para que contrastara con la parte inferior. En los pies tenían zapatitos negros y en la cabeza un gorrito en punta. Por supuesto la cereza del postre, o en este caso del disfraz, la otorgaba la barba blanca de juguete que se tenían que poner.
Las mellizas se miraron - ¡Nos vemos geniales! – Festejó Ava - ¡Venga los cinco All! – pidió a su hermana el choque de manos que Ally concedió con pocas ganas.
- ¿Nos vemos bonitas mamá? – le preguntó Ally dudosa de su apariencia
- Por supuesto cariño – les aseguró – Muy bonitas – agregó
- ¿Tan bonitas como estás tú cuando mami pone cara de boba al verte? – Para las pequeñas la cara de boba de Jisoo al mirar a Rose era buena señal.
- No... Más bonitas. Están tan hermosas, que su madre va a poner la misma cara de babosa que pone cuando las mira a ustedes – les dijo. Para Rose no había mejor momento que agarrar a su esposa mirando atontada a sus hijas.
- Me pica mamá – Ally se quejaba de la barba
- Te la sacas y te la pones antes de irnos Ally – la convenció Rose mientras las llevaba a la sala donde Maddie y Lexi veían por milésima vez buscando a Nemo – Ya tenemos listo dos enanitos – anunció – Tu turno Lex – Estiró su mano a la pequeña – Hora de ir a bañarte – anunció.
- Quiero que mami me haga la danza del baño – Por supuesto que Lexi iba a querer bañarse con la danza del baño.
- ¡No se vale! Nosotras no hicimos la danza – se quejó Ava
- Es verdad – Ally apoyó la queja
- Lexi, no tenemos tiempo para la danza del baño – negó la petición de su hija
- Entonces no me baño – caprichosa, Lexi, se cruzaba de brazos.
- Esta bien... Pero la haces conmigo – Rose no tenía intenciones de molestar a su esposa después del día que había tenido Jisoo. La pelinegra se había enterado de que el equipo quería transferir a Jeongyeon a otra ciudad y había estado toda la tarde peleando a capa y espada con la entrenadora y el presidente del club.
- Pero tú no te la sabes – la acusó
- Lex llevo años escuchándola, me la sé de memoria – se defendió
- Pero tienes que hacer los gestos y todo – le advirtió la pequeña.
- La voy a ser a mi manera – Era imposible igualar a Jisoo en la danza del baño.
- Pero mamá... – Ava, más bien el enanito Ava, volvía a protestar.
- AVs... te prometo que la próxima vez la hacemos ¿Si? – La mirada no dejó lugar a protesta.
Las dos mellizas se sentaron al lado de su hermana mayor de brazos cruzados.
Maddie se rió y por eso le tocó golpe en su cabeza - ¡Auch! – Maddie se acarició la cabeza - ¿Y eso? – le preguntó a su madre por la causa del golpe.
- Por inventar la daza del baño – le respondió.
- ¡Yo no lo inventé! – se defendió – Fue mami Soo – dijo
- Bueno, entonces fue por incentivar a tu madre a que la inventara, si no te hubieras escapado cada vez que te íbamos a bañar, no hubiera existido la estúpida danza del baño – el stress de Hallowen estaba llegando y le hacía decir cosas "horrendas" a Rose. Se arrepintió de usar la palabra "estúpida" apenas vio la cara de sus tres hijas.
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Cuando, donde y como el amor quiera-Chaesoo
Sonstigeskim Jisoo es una aclamada jugadora de básquet en Londres hasta que es elegida para jugar en la WNBA, con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New york sin saber que un encontronazo con una rubia , mandona, idiota le va a cambiar la vida...