COD SMUT SHOTS

Sgto. Keegan P. Russ

-Keegan...esto...esto es un error...no es lo que parece...Escúchame- llorabas siendo llevada a rastras por Keegan quien sujetaba tu mano con firmeza causandote un poco de dolor-Creí que eras tu el que estaba en la habitación....porfavor Escúchame- volvías a suplicar pero este no lo te escuchaba por lo enojado que estaba.

*****
Una semana antes...

Keegan y tu eran pareja desde hace año y medio, se habían conocido en uno de los cuarteles militares cuando el equipo Ghost colaboró en búsqueda de elementos químicos.

Desde que se vieron, ambos se sintieron atraídos el uno por el otro, su relación iba muy estable hasta que, un año después, comenzaban las desapariciones, los celos e inseguridades, comenzando a fragmentarse poco a poco.

La última pelea se suscitó una semana antes de que vivieran juntos, Keegan regresaba de una larga misión en caracas, pero, por alguna razón no te avisó que llegó antes, tu por otro lado programabas tus días para recibirlo el día que llegaba, y cuando supiste que llevaba 3 días en tu ciudad comenzaste a sentir una inseguridad sobre del por qué evadirte.

-O sea si me explicaras, sin problema entendería...pero si no me dices nada ¿como sabré que es lo que te molesta?- renegabas frente a la puerta de Keegan de manera sarcástica.

-Pasa y hablamos a dentro, no quiero molestar a los vecinos- soltó de manera fría, te dolía que se comportará así contigo, pero sabías que tenía razón, cruzaste junto a el hacia la sala de su departamento y sin tomar asiento te volviste hacia el para escucharlo- ¿no te has fijado que últimamente...discutimos mucho?- dijo cansado, sentiste una presión en el pecho...era verdad- solo...argh... t/n lo que más deseo es llegar a casa y descansar, sabes que las misiones son agotadoras y créeme que lo último que quiero es estar discutiendo contigo todo el tiempo- ouch, pensaste- no sabía que llegaría un par de días antes pero lo hice, y pensé que sería bueno mínimo descansar antes de verte- de nuevo sentiste un pequeño dolor- no digo que no quiero verte...solo... quiero tiempo- miraste al suelo, tu contabas los días para verlo pero, era verdad, últimamente discutían por cosas sin razón, y también te sentías cansada en ciertos momentos, solo que aún con tu cansancio tu preferias ver todo lo posible a Keegan antes de irte a alguna misión.

-Tienes razón- susurraste sintiéndote mal- me disculpo por armar tremenda  escena... te veré la próxima semana- de nuevo cruzaste por su lado y saliste de su departamento sin dejar que terminara la frase que diría, te sentías dolida.

Caminaste a casa durante 45 minutos sola por la noche, no había peligro alguno del cual preocuparte pero en ese lapso de tiempo pensabas una y otra vez en como las cosas comenzaban a tornarse, tu amabas a Keegan de eso estabas segura pero...en el fondo de tu corazón sabias que Keegan no te quería lo suficiente, tenía miedo, de ser traicionado, de ser abandonado o que algo te pasara, era algo complicado.

Llegaste a casa, al entrar por tu puerta y cerrarla tras de ti, te deslizaste por esta hasta el piso soltandote en llanto...te dolía mucho amar a Keegan.

La semana transcurrió sin problema, efectivamente decidiste darle tiempo a Keegan, al no escribirle este tampoco te escribió de regreso, sentías ese sabor amargo en la boca pero sabías que debías superarlo.

Dentro del cuartel visualizaste a su equipo a lo lejos y a el, pero, evitaste más de una vez mirarle por tanto tiempo, querias darle su espacio, comenzabas a dar vuelta al hecho de que si le presionabas, el se terminaría alejando.

-T/n la fiesta de Omega y Delta será este fin de semana...¿iras?- cuestionó tu compañero Erick, era tu amigo y era un romántico empedernido....entre su mismo sexo.

-Aun no se... tengo que...ver a alguien- se suponía verías a Keegan para una "cita".

-Ay cariño, tomate un descanso, te ves estresada...yo digo que vayamos a la fiesta y bueno luego ves esa "cita"- codeó para animarte, sonreíste.