COD SMUT SHOTS

Cnel. Alejandro Vargas pt 2

-T/n...despierta debemos irnos- la dulce voz de un somnoliento coronel poco a poco te fue despertando, hace un par de meses decidieron mudarse a vivir juntos.

-Mmmm...- te removiste desnuda entre las sábanas al no querer despertar.

-t/n... chula- bostezó profundamente, tampoco se quería levantar- ya es hora, vamos- insistía en despertarte.

-Alejandro...hoy no...quiero dormir- alegaste caprichosamente, claro estaba que se habían desvelado al ver una serie que finalmente la dejarían para tener sexo una y otra vez.

-Vamos...debemos ir- hoy se presentaban nuevamente al cuartel, ambos habían pedido permiso de fin de semana cada uno por razones diferentes, manteniendo oculta su relación ante el cuartel mexicano.

-Bien...vamos- te levantaste pesarosa jalando las sábanas para cubrir tu desnudez y dirigirte al baño, dejando a un Alejandro desnudo sobre la cama.

Te cepillaste los dientes y te despojaste de la sabana para meterte a la ducha, el agua caliente comenzó a recorrer tu piel lentamente, una sensación de relajación cruzaba tu cuerpo cuando sentiste unas manos subir desde tu abdomen hasta tus senos, cubriéndolos por completo, esas manos de gran tamaño que tanto te volvían loca.

-Ale...-el comenzó a besarte el hombro desnudo subiendo hasta tu cuello, acercándose poco a poco por tu espalda haciéndote sentir su gran erección contra tu trasero- si seguimos así llegaremos tarde- con una de sus manos tomó el jabón y lo pasó por tus piernas, tu abdomen, tus pechos y nuevamente bajó a tu abdomen jugando cerca de tu intimidad, poco a poco te ibas excitando más.

-Solo estoy ayudándole a mi Chula a bañarse...- mordió ligeramente el lóbulo de tu oreja- no tiene nada de malo- susurró con voz grave y seductora.

Amabas que el jugara así contigo, el agua los abrazaba a ambos, dos cuerpos que emanaban una gran cantidad de vapor, te diste vuelta para encontrarte con Alejandro, le miraste como esperando su permiso lo cual no fue necesario, se avalanzó sobre tus labios de manera salvaje, devorandote de placer, pegando tu cuerpo a lo frío de los azulejos y abriéndose paso entre tus piernas.

Te sujetó del trasero y te levantó haciendo que enrolles tus piernas en su cintura y de manera rápida te penetró.

-Ahh- gemiste de satisfacción al tiempo en que el gruñía en tus labios.

-No podré contenerme en el cuartel- confesó penetrandote con fuerza, tu cabello mojado caía sobre su rostro, jadeando una y otra vez sobre sus labios-Te quiero hacer mía una y otra y otra- hacia enfasis al embestirte de manera brusca cada que hablaba- y otra puta vez- arremetió con fuerza sujetandote con firmeza cargando todo tu peso sobre el, por lo que sus músculos bien tendidos se marcaban aún más al tenerte follando como a él le gustaba.

Sus embestidas eran rudas, profundas y muy satisfactorias, gruñía cada que te penetraba, le prendias al solo gemir su nombre por qué sabía perfectamente que te gustaba, te gustaba que te cogiera de esa manera, dónde te hiciera sentir de su propiedad...sujetaste su cabello entre tus manos y lo jalaste levemente hacia atrás levantando su rostro directamente al tuyo.

- Eres mi Vaquero - escupiste con deseo, a lo que el sonrió con una mirada de lujuria, amó escuchar eso, sus penetraciones comenzaron a ser más rápidas obligándote a gemir más alto-Ahh ahhh Aleee..- encajaste tus uñas en su espalda, sentías que estabas a punto de tocar la cima del placer.

-Vamos chula....incluso el que llegues me pertenece- susurró nuevamente en tu oído, logrando en ti una sensación de placer realmente bueno, liberando finalmente tu orgasmo, sintiendo que cada centímetro de tu ser se desenvolvía ante el acompañándote un par de estocadas más, liberando su ser dentro de ti- mierda...- jadeaba cansado, lentamente bajó cada una de tus piernas saliendo de ti-¿Estás bien?- sonreíste cansada apoyándote contra la pared.