Epílogo: La vida sigue

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El sonido de las olas del mar llegaba a sus oídos tan lejano, casi como un susurro, que se sentía como un sueño. El leve movimiento del cuerpo que sostenía entre sus brazos la hizo salir lentamente de su ensoñación, abriendo perezosamente los ojos y teniendo que parpadear un par de veces para poder acostumbrarse a la luz natural que entraba desde el balcón.

La iluminación que recibía esa mañana le permitió darle un mejor vistazo a la mujer que parecía estar aún dormida entre sus brazos. Su cabello cobrizo recorría libre la almohada, mientras que su pecho se movía suavemente al compás de su respiración. Algunas diminutas arrugas bordeaban sus ojos, y sus firmes pómulos eran otra muestra de su madurez. Pero, para Fate, todo seguía siendo como si el tiempo no hubiese pasado nunca.

Sobre todo cuando Nanoha se seguía sonrojando profundamente cada vez que estaban juntas, y tenía la oportunidad de mirarla intensamente.

El simple hecho de poder despertar a su lado, aferrada a ella, parecía un sueño.

Solo que, su encuentro, había dejado de ser solo un sueño desde hace años.

A Fate aún le causaba algo de gracia el pensar que, luego de su reencuentro, habían hablado con tranquilidad el asunto y en conjunto habían tomado la decisión de llevar las cosas "con calma".

Al día siguiente, luego de que ambas habían procesado lo sucedido en el kínder, se habían citado en un restaurante cercano. Gracias a Hayate, quién se ofreció a cuidar ese día de Vivio, tenían prácticamente toda la tarde disponible para poder hablar un poco mejor de lo que había sucedido. Fate hizo su mejor intento en explicarle a Nanoha lo poco que entendía acerca de su reencarnación, y también le habló de los fragmentos de recuerdos que aún conservaba de su primer tiempo juntas, los cuáles por mucho tiempo había pensado que eran simples sueños. Nanoha también le habló de las cosas que habían pasado luego de su ausencia, y de cómo había transcurrido su vida luego de su separación física. Muchas cosas habían pasado en ese tiempo. Se había casado, se había divorciado, tenía una hija. Incluso había logrado fundar una empresa con Hayate.

Era obvio que el tiempo no se había detenido para Nanoha. Pero también era más que evidente que, a pesar de los años, Fate seguía siendo el amor de su vida.

Esos sentimientos siempre habían estado allí, latentes, negándose a desaparecer. Se habían quedado bajo llave, sellados por la distancia que las separaba y dispuestos a irse hasta la tumba con ella.

¿Quién se iba a imaginar que el amor de su vida iba a ser capaz de desafiar todas las posibilidades y regresar para encontrarse con ella una vez más?

También, era bastante evidente que Fate seguía sintiendo las mismas cosas por Nanoha. Como si se hubiesen quedado adheridos a su subconsciente, esos sentimientos habían permanecido dormidos esperando encontrar a esa mujer nuevamente para florecer una vez más.

Pero todo podría resultar ser muy diferente ahora. Era verdad que Fate seguía teniendo recuerdos de su no-vida anterior, pero, ahora que había nacido de nuevo, y las experiencias de su nueva vida habían sido distintas ¿Realmente seguiría siendo la misma persona?.

Y además, también estaba la diferencia de edad. Cuando se conocieron por primera vez, en teoría, Fate era ligeramente mayor. Si tomaban en cuenta solo su nueva vida, esta vez Nanoha era considerablemente mayor.

Aún así, luego de conversar bien las cosas, al darse cuenta de que esos sentimientos eran algo que no iba a desaparecer por arte de magia, tomaron una vez más la decisión de darse una oportunidad. Se tomarían las cosas con calma, empezarían a salir, y sería como si se estuviesen conociendo desde cero otra vez.

La calma les duró tres escasos meses, hasta que se pasaron de tragos en una cena.

Habían tenido la inmensa suerte de que, esa semana, Nanoha había llevado a Vivio a pasar algunos días en casa de sus abuelos, porque los ruidos que habían hecho esa noche se tuvieron que haber escuchado fácilmente por todo el costosísimo penthouse de la cobriza.

Espectral (¡Mi fantasmal historia de amor!) NanoFateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora