LIMIT LOVE

Emboscada part 2

Al entrar a bar club solo puedo decir que era elegante, no parecía un mal lugar.

– No parece un lugar donde se hagan tratos sucios,yo mismo pedí este tipo de decoración – Dijo Jaekyung, mientras prendía un cigarro – ¿Deseas uno?

– No suelo fumar, muchas gracias – Dejo de mirarme y continuamos nuestro camino.

Tomamos un elevador al sótano y en ese pequeño espacio podía oler mucho más fuerte el olor a sangre de su ropa y la mezcla del cigarro, felizmente cuando entramos no había nadie más que los empleados, aunque no creo que algún cliente diga algo.

Al llegar al sótano había 4 mujeres y 5 hombres muy bien vestidos con ropas de ejecutivos.

Al entrar sentí las miradas de todos ellos.

– Hola a todos, les presento a mi asistente Kim Dan, por favor cuiden de él – yo solo, incline un poco la cabeza en señal de saludo y cortesía.

– Oh, Jaekyung, ¿Qué paso contigo? – Una mujer con un rostro tierno se acercó algo asustada a mi jefe.

– No pasa nada Alice, estoy bien, solo una pequeña riña con Taeoh, que siempre está inquieto por jugar conmigo.

– No seas payaso, ¿cuándo parará tu rivalidad? ¿Eh? – Jaekyung no respondió, solo dio una sonrisa a medias.

Todos en la mesa ejecutiva del lugar trataban de no murmurar con respecto al aspecto de Jaekyung.

Yo me senté a su lado.

Por lo que decían era que iban a comenzar una construcción de un hotel y que iba a tener un casino en lo alto, pero que la fachada era hacer ver como si fuera un lugar donde se reúnen para mirar arte para que la policía y fiscales no intervinieran, era una propuesta arriesgada, pero supongo que si funcionaria.

Pero estaba de por medio la licitación del mismo lote, la competencia para adquirir dicho terreno era la empresa Moon S.A, el dueño de dicha empresa era Jung Taeoh.

La reunión tomó 2 horas y habían servido diferentes comidas con nombres extravagantes, yo solo moví la boca y tragué sin decir nada, sin mirar a nadie, me sentía muy sofocado, ya que no soporto estar por mucho tiempo con tanta gente.

– Dan, ¿Te sientes bien? – La pregunta de Jaekyung me tomo por sorpresa.

– Sí, estoy bien – Mentí, me sentía sofocado.

– No lo creo, te veo pálido – ¿Pálido? se preguntó Dan un tanto avergonzado.

– No es nada, no se preocupe, puedo seguir.

– ¡SEÑORES! Doy por terminada por hoy esta reunión – mi jefe alzó la voz y eso me tomo por sorpresa – Si gustan pueden quedarse y disfrutar del club – Yo me sentía avergonzado – Dan vamos a mi casa – el susurro en mi oreja, me dio cosquillas.