Balas Perdidas

Octubre

Octubre agridulce, la pausa perfecta, suave y desordenada, pateando hojas entre las opuestas miserias del verano y el invierno.
(Frase de lunas de octubre)

Con todo lo que ha pasado en estos días, siento que más que dormir, necesito el descanso eterno.

Después de las confesiones que me hizo Arturo ya no me quedaron ganas de preguntar aún más.

Todavía tengo dudas respecto a Damian.

Pero Daniela me ha asegurado que está bien y que mientras estemos en casa debemos ser cuidadosas con lo que decimos y hacemos.

No hay ni un minuto que deje de pensar en Gael, no se dónde diablos está, no se si este bien si necesita algo.

Me froto la cara

Dios esto terminará por volverme loca

Decido que es hora de estudiar un poco, llevo semanas sin estudiar en serio que ya ni recuerdo de que trata mi carrera...

Tomo un baño y me siento en mi escritorio decidida a aprender todo lo que existe en los libros de derecho.

Algo de música no me hara daño

Amo la música siento que es la historia escrita de vidas que no conozco.

Siento que la música son palabras que han quedado atascadas entre sentimientos y emociones que no sabemos expresar.

Esos sentimientos que solo el sonido, una pluma ágil, y un cerebro brillante plasman en las letras de cada canción.

🎵 Pude haber sido yo
Pero dejaste un loco enamorado
Buscando un beso tuyo en la estación 🎵
Y no hay peor desgracia que extrañar lo que nunca pasó 🎵

🎵 Sé que me cuesta ver que al final voy a ser yo quien termine herida
Pero debo entender que en las guerras de amor siempre hay balas perdidas 🎵

Ja,ja,ja alguien ya escribío tu historia hermanaaa- dice la Avery burlona

Decido que es hora de dormir, nada mejor que un sueño para reparar las neuronas.

Braulio lleva algunos días sin aparecer así que eso me mantiene tranquila de alguna forma.

Trato de conciliar el sueño

Pero mis pensamientos no paran.

Mi padre, sigo sin entender porque se quitó la vida

Mi madre porque desaparecio y me dejo sola

Damian no se cuando piensa regresar

Gael mi constante pensamiento

Divagó entre ideas

Cuando escucho alguien acercarse a la entrada de mi habitación

Mi corazón empieza a acelerarse

No quiero morir está noche
No sin arreglar algunos pendientes con ojos marrones antes.

Daniela entra con una sonrisa como la del gato de la niña que se perdía en un cuento con un conejo, algo así.

—Daniela por dios, me vas a matar de un infarto- digo con la mano en la frente

—Avery, necesito ver a Arturo- dice

—pues aunque no lo creas no lo eche en mi mochila la última vez que lo vi- digo rodando los ojos

Daniela ríe

— no idiota, acompáñame- dice con las manos juntas

Entiendo a qué se refiere