16| Taylor

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Siento que lo he arruinado todo, total y completamente.

En mi cabeza he formulado todo un discurso que decir para el momento en que vuelva a ver a Skyler.

Acabo de llegar, y esperaba encontrarme con ella, sin embargo no está, pareciera como si nadie hubiera estado aquí en todo el día. Las luces están apagadas al igual que la calefacción, me pregunto por qué si Skyler salió del trabajo hace horas.

Estuve ausente toda la semana. Había aceptado el trabajo de una revista que ya me había contratado antes. Nada pudo haberme salido mal, a excepción de que cuando me fui no me despedí debidamente de nadie, y apuesto a quien está más molesta es Skyler. Lo peor no fue eso, estuve sin poder comunicarme toda la semana, cuando llegué al hotel el primer día me di cuenta de que mi celular no traía batería y que no había cargado conmigo el cargador. Tuve la brillante idea de llamar por el teléfono que estaba en el cuarto, pero no me sé su número.

Fue la peor semana de mi vida, pasé la navidad solo en el maldito cuarto de hotel. No sé cómo rayos se me ocurrió aceptar, pero por lo menos me pagaron muy bien.

Extrañé a Skyler demasiado, y sé que estará molesta, me fui tan repentinamente que podría parecer que me fui evitando cierta situación, espero que no piense eso. Me pasé toda la semana pensando en la fiesta, y en las muchas ganas que tenía de verla de nuevo para besarla otra vez.

Dejo mis cosas en mi habitación y pongo a cargar mi teléfono, que sorpresa, el cargador estaba justo encima en la cama. Tengo llamadas perdidas, junto con mensajes de texto con imágenes adjuntas de la fiesta. No tengo nada de Skyler, como era de esperar.

Me doy una ducha rápida, y me preocupa que Skyler aún no haya llegado, son casi las once... y no estoy seguro si debería llamarla, no quiero parecer desesperado.

Tengo una mejor idea y llamo a Hayley.

— ¿Dónde andabas, desaparecido? — es lo primero que dice al contestar.

— Hola, ¿cómo has estado, todo bien?, ¿sí?, me alegro — bromeo.

— Sí, sí — la escucho reír —, ¿cómo has estado, Tay? ¿Has comido bien?

— Sabes que sí, ¿y tú?

— Bien también, ahora estoy en casa de Jeremy. Pero ya dime, donde te habías metido, te estuvimos llamando.

— Trabajando lejos, sin tiempo... ni batería.

— Oh, es verdad — reconoce —, Skyler comentó algo de eso, ¿cómo te fue?

— ¿Ah sí? — Eso llamó toda mi atención —, pues ahora tengo dinero para sobrevivir tres meses más.

— Qué bien Tay... Sí, pero no creo que sepa eso de la batería, creemos que está enojada, el otro día le gritó a Joanna por teléfono.

Frunzo el ceño, ¿por qué ella estaría molesta con los demás, si el problema es conmigo?

— ¿Por qué?

— Oh — se escucha como si se arrepintiera de decir eso —, Tay creo que deberías hablar eso con ella.

— ¿Qué pasó?

— No se supone que te diga yo, hombre. Espera a que llegue a casa.

— ¿Cómo sabes que no está aquí?

— Deja de hacer preguntas estúpidas — se ríe, pero puedo notar su nerviosismo.

Comienzo a preocuparme más, ¿qué demonios sucedió en esta semana?

— Hayley, me estás asustando.

— Ya sé, Tay, te prometo que todo está bien, Skyler está viva y feliz, creo.

Turn and Run | Taylor YorkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora