Turn and Run | Taylor York

15| Skyler

Bebo un sorbo largo de la botella en mi mano antes de pasársela a Ronnie y darle una calada a mi cigarro. Es de noche y estamos en la apare alta de mi edificio, si no fuera porque subí una manta conmigo me estuviera congelando.

- Deberías salir con ese chico lindo del que te escondiste una vez - me dice ella y cierra los ojos.

- Sal tú con él - me río amargamente mientras recuerdo la penosa escena.

Simplemente pensé que era alguien que conocía, alguien que no sé si deseo o no ver. Estaba tan nerviosa que esperé detrás del mostrador, simplemente observando al chico hasta que Allison me dijo que no fuera una cobarde y saliera mientras se burlaba de mí.

La cosa es que regresó los demás días y siempre trata de hacer conversación conmigo, es muy amable.

- Tengo a Liam, lo siento.

La razón por la cual Ronnie sugiere esto es porque después de la fiesta, después de que nos besamos más de una vez, que todos nos dijeran lo bien que nos veíamos juntos, Taylor ignoró la situación. No sé qué sucedió, no dormimos juntos, ni nada por el estilo, pero sucedió algo, y él simplemente lo pasó por alto.

Al día siguiente cuando desperté, él no estaba en casa, y no regresó hasta en la noche diciéndome que le había salido trabajo en otra ciudad y que regresaba en una semana.

Creo que lo que más me molesta es el hecho de que ni si quiera se despidió debidamente, y que no me ha llamado. Han pasado tres malditos días, y ni un mensaje de su parte. Y yo no voy a ser la que llame primero.

- No saldré con él, me recuerda a alguien.

- ¿A tu ex? - pregunta sagaz.

Me río y no le contesto nada, simplemente cierro los ojos y dejo que el ruido del tráfico llene mi silencio.

No quiero salir con él, porque estaría mal, creo yo. Pero no quiero admitir frente a ella, ni en voz alta, el hecho de que de alguna manera me estoy reservando para Taylor. En algún lado de mi cerebro, el que no está molesto, creo que no me está ignorando, que me está dando mi tiempo o algo así, realmente quiero creer eso.

En algún momento me quedé dormida. Ronnie me despertó porque mis labios se estaban poniendo azules, y porque su querido novio ya estaba esperándola afuera.

En la comodidad del sofá hice lo que me había puesto hacer las noches anteriores después de que Taylor se fuera. Esperar. Acostada, viendo la pantalla de mi celular esperando que me llegue una llamada, un mensaje, algo.

Ni siquiera les he preguntado a los demás si saben algo de él. Me da vergüenza pensar en ellos, que tal si le llamo a alguno de ellos y me preguntan cómo vamos y no sé contestar. Solo lograría enfurecerme un poco más.

Los minutos se pasan, y mis ojos arden por el cansancio, pero hago mi esfuerzo por permanecer despierta. Después de media noche me rindo, él no va a llamar.

Al día siguiente en el trabajo, ahí está de nuevo el chico. Aún me causa un sentimiento extraño cuando lo veo, como de añoranza. Voy hacia él y me preparo mentalmente.

Él levanta su cabeza hacia mí, y sonríe un poco. Y ahí están, un poco cubiertos por su oscuro cabello, ojos verdes y brillantes.

- Hola, bonita - me saluda. Por alguna razón no encuentro el tono de picardía en su voz, es como si simplemente quisiera ser amable.

- Hola - digo amablemente en respuesta.

Tomo su pedido y me pongo a atender a más clientes. En cierto momento veo a Allison conversando animadamente con el chico de ojos verdes, aunque él se ve algo incómodo. Le alzo las cejas en cuanto topamos miradas, pero ella se ríe y niega con la cabeza.