Nabi es una escritora estancada que trabaja para una editorial a punto de despedirla, Minho el egocéntrico ex integrante de un grupo de K-pop.
¿Qué tienen en común?
-Nada. (Eso seguro)
Pero, Nabi debe tomar una dificil decisión si quiere conservar...
Al finalizar el día, Minho me llevó de regreso a casa.
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Al día siguiente fui a recogerlo, ya me estaba esperando en la entrada del edificio con su pequeña maleta y una gran sonrisa, parecía un niño.
Subió al taxi conmigo y luego le dije al conductor que siguiera al lugar que le había indicado antes.
-¿A dónde me llevas?-Preguntó feliz.
-Dijiste que no te importaba a donde te llevaría, así que no preguntes.-Le dije sonriente.
Llegamos al aeropuerto.
-Te tengo una sorpresa, pero como es sorpresa, no puedes escuchar ni ver nada, ¿okay?
-Okay.
Le puse unos audifonos, reproduje "Take care" a todo volumen y luego tapé sus ojos con mis manos.
Empezó a tararear la canción.
-¡¿Acaso es esto una declaración de amor?! ¡¿Acaso quieres que sea tuyo?!-Gritó refiriéndose a la letra de la canción, mientras las personas volteaban a vernos debido a sus gritos.
Destapé un poco su oído.
-Minho, no porque no me escuches quiere decir que yo a ti tampoco, no grites.. -Susurré en su oído haciéndolo estremecerse por el cosquilleo.
Nuestro vuelo estaba siendo anunciado.. Caminamos pero le dije que debería cerrar los ojos.. Pasamos nuestros boletos luego del registro y subimos al avión.
Ya en el avión nos sentamos uno al lado del otro, Minho estaba más que feliz, parecía un niño al que su mamá lleva de paseo por primera vez.
Estábamos a punto de despegar, esta parte siempre me pone nerviosa, él lo notó y tomó mi mano... Lo volteé a ver y el solo me sonrió, le sonreí de vuelta y apreté su mano.
El vuelo fue bastante corto, una hora y 5 minutos cuando mucho.
Al llegar al aeropuerto le avisé que ya podía abrir los ojos.
-¿Jeju?-Gritó contento.-¿Me trajiste a Jeju?- Estaba más que solo feliz y su alegría se me contagió, no pude evitar sonreír al verlo.
-¿Te gustó tu sorpresa?
-Es perfecto Nabi, gracias.
-Andando, esto solo es el incio, la verdadera sorpresa será cuando pruebes la comida de mi mamá.-Le guiñe un ojo y luego caminamos hacía la salida.
Tomamos un taxi y en cuestión de minutos estábamos en casa de mis papás.
Empezó a avanzar pero lo detuve del brazo.
-Bien, antes de entrar, debes saber que son un caos, mi mamá te hará mil preguntas y mi papá igual, no contestes nada, yo lo haré por ti, Cake es algo especial, no le gustan los extraños y Kitty es muy empalagosa, no le hagas mucho caso o no te la quitarás de encima, nunca.- Hablé rápido y con nervios.
