Sperâre [Hazel Levesque. Frank Zhang]

XVII. Es mas hermoso el pasado

● Hazel Levesque ●

La primera vez que vi a Frank quede totalmente enamorada de él.

Era el chico de mis sueños.

Y yo solo era la hermanita de su mejor amigo.

Que cliché, ¿No creen?

Recuerdo que hacia de todo para me notará, y yo sin saber que desde el inicio el siempre me notó ahí.

● Doce años atrás ●

—Tienes que aprender a esquivar golpes, Hazel —dictó Clarisse.

—¿Y de qué sirve? Yo quiero aprender a golpear —le dije rascándome la muñeca debido a la picazón que provocaba la venda que envolvía mis manos— En todo caso no me hubieras vendado

—Mira, yo se que tu entusiasmo es aprender a golpear y todo eso. Pero primero tienes que aprender a esquivar

—¿Y por qué se llama boxeo si solo voy a esquivar?

—Solo se paciente, niña

Odio cuando me llaman así. Pero para todo ellos soy una niña

Nos pusimos en posición y tiró un movimiento de gancho izquierdo.

—¡Agáchate!

Hice caso a lo que me ordenó y me agaché como me había enseñado con anterioridad.

—Buena —lanzó un golpe recto ahora— ¡Retrocede!

Avance de reversa y casi tropiezo con mis propios pies.

—Cuidado. Recuerda un paso a la vez

Asentí y ella dio otro gancho lanzando la misma orden y yo la acate.

—¡Agáchate! —gritó y otra voz le siguió.

—Muy bien, mi cielo

Santa Roma Bendita

Gire la mirada observándolo ahí parado de pie con su torso desnudo dejando su musculatura libre a mi vista, la cual desaparecía en el inicio de sus shorts. Quien fuera esos shorts.

—Lárgate niño bonito —le amenazó Clarisse— No me la distraigas

—Ay por favor —exclamó y avanzó hacia nosotras— Yo no la distraigo, ¿Verdad que no te distraigo?

Mis mejillas se calentaron rápidamente cuando lo sentí cerca de mi. Y empecé a temblar de los nervios.

—Ya la descompusiste, idiota

—Jajaja —Frank se rio y sus brazos me envolvieron abrazándome y dejando un beso en mi frente.

Ahhhhhhhhhhhh

Envolví mis brazos a su alrededor y escondí mi cara roja en su pecho.

¿Cómo carajo se respira?

—Ash —se quejó Clarisse— Seguimos mañana, Hazel

Asentí y escuche sus pasos salir y la puerta abrirse para continuamente cerrarse.

La risa de Frank resonó en su pecho.
—Creo que se enojo

—No debiste venir

—¿No querías verme?

—Si pero... Clarisse se molestó ahora y bueno, ella...

—Al rato se le pasa, lo sabes —dejó otro beso en mi frente— Ven te quito esto

Avanzó hasta un cajón y me senté mientras Frank se inclinaba enfrenté de mi apoyando su rodilla en el suelo.