Capítulo 24.

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The night we met - Lord Hurón
«I had all and then most of you
Some and now none of you
Take me back to the night we met
I don't know what I'm supposed to do
Haunted by the ghost of you»

Capítulo 24.
Parque de los sueños
mágicos.

Dos días antes de regresarnos a Rosenthal y acabar con esta aventura nos encontramos en la sala de la abuela haciendo un maratón de películas. Hemos pedido comida suficiente para toda la tarde, incluidas hamburguesas, pizza, pollo, Nuggets, helado, paletas de nieve, golosinas… madre mía, siento que esta vez sí que nos hemos pasado.

La sala está hecha un completo desastre; hay envolturas, huesos de pollo, restos de la orilla de la pizza por la mesita que mi abuela tiene frente al sillón, gomitas por todos lados.

Aunque..., a pesar de todo el desastre que en este momento tenemos puedo negar que me la he pasado genial. Hemos reído, gritado, y quejarnos de las acciones de los protagonistas por toda la tarde. La abuela se ve demasiado feliz, que incluso por un momento, la vida no parece tan mala.

Justo ahora estamos viendo una película triste, la última que veremos porque la abuela está cansada, y nosotros también debemos irnos a dormir temprano, ya que el vuelo es a primera hora en la mañana.

Todos estamos atentos a la última escena, en donde la chica y el protagonista discuten por sus posiciones sociales; ella cree que no podrá con eso y él le asegura que estarán bien.

—¡¿Pero por qué haces eso, chica?! —grito a la pantalla cuando la última escena está apunto de acabar. La chica se despide de él y le pide que no la llame porque no esta lista para los prejuicios de la gente a su alrededor.

La abuela me mira casi riendo y Melanie mira el televisor con el ceño fruncido. Jaden no tiene ninguna expresión en su rostro, pero sé que esta viendo atentamente la película.

—Hace lo que cree que es lo correcto. A veces, el amor llega a un punto inaudito en el que sabes que, estando separados, aunque te quiebres, es lo mejor. Al menos por ahora —responde la abuela viéndome de una forma significativa. Y yo sé a qué se refiere; la charla que tuvimos el día de ayer me dejó reflexionando más de lo que me gustaría admitir. Y no me gusta la única solución que le estoy encontrando a esto.

—¿Pero cómo vas a dejar a alguien que amas?

—Amar no solo consiste en quedarse con esa persona. También significa soltarla y dejarla porque sabes que es lo mejor.

—¿Cómo eso va a ser lo mejor si dejas destruida a la persona?

Ella pone una cara seria y se pone de pie lentamente con mi ayuda. La película ya ha acabado, pero yo sigo esperando una respuesta.

—Toda perdida tiene que tener un duelo, Ashley. No hay situación, cosa o persona que se olvide por completo. Y si sabes que lo estás dejando por tu bien y el de él, entonces eso quiere decir que cuando todo esté mejor pueda haber un después.

—¿Por qué después y no ahora?

Ella me sonríe. Melanie y Jaden me observan con curiosidad.

—Como que ya te clavaste mucho con la película, ¿no crees, Ashley? —pregunta Dani con el ceño fruncido. La abuela no ha dejado de verme. Y yo sé a dónde quiere llegar, pero yo no quiero seguir con esta charla. Me pongo de pie para ayudarla a recoger el desastre y le sonrío a Melanie.

—Tienes razón, debería dejar de darle tantas vueltas al tema.

Pasados unos minutos estamos todos en la mesa de la abuela jugando juegos de mesa. Y me alegraría decir que estoy normal después de haber perdido 5 RONDAS seguidas; pero lo siento, soy muy rencorosa en este tipo de juegos. Si tengo que embarcarme con el banco, lo haré. Todo con tal de ganar.

El día que la luna dejó de brillar. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora