El día que la luna dejó de brillar.

Capítulo 21.

Jesse & Joy - Ecos de amor.
«Estás tan cerca y tan lejos
Me aferro solo a un reflejo
Te pierdo»

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Capítulo 21.

Maletas a bordo.

Me levanto temprano debido al insomnio que tuve toda la noche. Solía pasarme que dormía muy bien cuando Jaden me abraza mientras dormimos, pero él no había pasado la noche aquí.

Y por esa razón me fue imposible dormir.

Estuve mandandole algunos mensajes preguntándole si estaba bien. Si necesitaba algo o si estaba en un lugar seguro.

Y a ninguno de ellos respondió.
Porque por si no fuera poco, tenía el móvil apagado.

No sé si se lo robaron a él o a su celular. No sé qué haya pasado. Y eso hace que mi ansiedad aumente aún más.

Solo pedía que contestara uno de esos mensajes y me dijera qué estaba bien. No sé qué es lo que pasó en su cabeza para irse así por así, pero no me gusta saber en las posibles respuestas.

Hoy es el viaje y ni siquiera se ha comunicado.

¿Cómo quiere que me sienta? Nos dejó solas a ambas en un momento difícil para su hermana. Yo lo necesitaba aquí para que pudiéramos hablar, y se fue.

Sé que necesita tiempo para pensar todo esto, pero ni siquiera ve o contesta mis mensajes.

Niego con la cabeza tratando de centrarme y tratar de empatizar con él. Tiene razón.

Lo más probable es que se sienta en un estado de confusión con sigo mismo. No puedo ni imaginarme que haría yo si volviera a ver a alguien que me causó tanto daño a mí y a los que quiero, y aún peor, que venga a empeorar todo.

Suelto un suspiro frustrado y muerdo mi labio inferior.

Solo espero este bien, y cuando esté listo para contarme lo que sea, yo estaré ahí para él.

Tomo aire y lo suelto enfocandome en pensar en lo más positivo que puedo.
Justo ahora es tan temprano que decidí hacer algo de provecho y ponerme a cocinar cupcakes. Quiero animar a Melanie de una u otra manera.

Espero no se me quemen porque en vez de animarla voy a deprimirla.

Sonrío ante la idea y comienzo sacando todos los ingredientes que me dice la chica en un tutorial que decidí poner para que quedarán lo mejor posible.

Bato la harina y sonrío al ver que tiene buena pinta. Los vacío en sus papelitos en un molde y los pongo en el horno. Pasados 20 minutos checo los cupcakes y, para suerte mía, quedan perfectos.  Empiezo a decorarlos con la repostería que puedo y por un momento logro sentirme mejor.

A algunos les pongo betún de chocolate, a otros betún azul y encima de estos pongo chispitas de chocolate.

Hago una mueca al ver el desorden que he dejado en la cocina y me apresuro en quitarme el mandil para empezar a limpiar. Terminando envuelvo los cupcakes en bolsitas para darle a Melanie, Jaden, Dulce (mi amiga de la neveria), Hannah e Isair.

4 horas después de dejar el espacio impecable termino tan agotada que decido tomarme un baño largo.

Saliendo ya tengo la ropa lista así que no tardo mucho en terminar de alistarme.

Me miro unos instantes mirando mi atuendo y recapacitando si lo que hago está bien. Agarro aire y lo suelto tratando de calmarme.

Antes de irme de viaje dejé algo pendiente que tengo que arreglar. Y tengo que hacerlo sola.