13. Jamie

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Hoy me tocaba recoger a Sophie en el aeropuerto de California. George y los chicos estaban inmersos en el estudio, finalizando las últimas canciones del álbum, así que seríamos solo Sophie y yo por un buen rato.

Esperé pacientemente unos 20 minutos en la terminal hasta que divisé a Sophie, inconfundible con sus gafas de sol, shorts blancos, blusa del mismo color y una sobrecamisa azul a rayas con el logo de Ralph Lauren.

Corrí hacia ella y la abracé con fuerza.

— ¡Line! — exclamó, devolviendo el abrazo con entusiasmo.

— Te extrañé — le dije sinceramente.

Cogimos su equipaje y salimos del aeropuerto. Durante el trayecto de vuelta al Airbnb, la conversación estuvo plagada de preguntas y lo que parecía ser una entrevista sobre lo que había sucedido con Matty.

Después de aclarar todas sus dudas, llegó el momento de contarle cómo había estado George durante su ausencia. Al principio, noté que estaba un poco distante y absorto en su teléfono, pero luego volvió a ser el George de siempre.

Sophie realmente lo había extrañado. Estaba segura de que había contado los días para volver a verlo, estableciendo alarmas para saber cuándo llamarlo o darle las buenas noches. Sin embargo, no vi a George hacer lo mismo por Sophie. No es que debiera ser una regla, ya que ambos son muy diferentes, pero creo que Sophie estaba un poco más entregada a la relación. O tal vez lo percibo así porque es mi mejor amiga y quiero que sea feliz.

Una vez en el Airbnb, dejamos las cosas de Sophie en la habitación que compartía con George. Después, bajamos a la piscina, donde nos esperaba una cerveza fría. Sophie me puso al tanto de las noticias sobre la familia de Thomas, quienes alegaban difamación por el robo a la empresa de mi papá. Rodé los ojos y le pedí que cambiáramos de tema.

Sophie accedió y continuó relatándome más sobre sus días lejos. Me compartió detalles de sus salidas de compras con sus amigas modelos, luciendo espectaculares en las fotos que mostraba. Además, me habló sobre los nuevos restaurantes carísimos que visitaba. Entre risas y cervezas, la tarde transcurrió de manera amena, evitando cuidadosamente mencionar la situación entre Matty y yo.

Sin embargo, Sophie, con su aguda percepción, no pudo resistirse a plantear la pregunta que temía.

— Oye, Line, ¿y... piensan formalizar esto o...? — me preguntó, reflejando la incertidumbre en su tono.

Me quedé callada por unos segundos, sin saber qué decir. La verdad era que no lo sabía. Honestamente, tenía miedo.

— Me gusta Matty, pero me aterra enamorarme de él. Su mundo es tan complejo, y tú más que nadie lo sabes. No creo poder lidiar con cientos de mensajes comparándome con su exnovia o con miles de comentarios sobre mi apariencia. Ni siquiera era su novia cuando la gente comenzó a llenar mis posts de malos comentarios, así que ahora imagínate si llego a serlo. Además, no soportaría que la gente nos persiguiera con cámaras y nos hiciera preguntas estúpidas. Mi papá, que valora mantener un perfil bajo, enloquecería al verme en programas de chismes. — admití.

— Line, es Matty, la prensa tampoco lo sigue tanto. Al menos no sales con Harry Styles — se encogió de hombros, tratando de restarle importancia al asunto —. Matty es tan hogareño como tú, y lo sabes, no tendrían tantos problemas con la prensa.

— Que no te escuché comparándolo con Harry Styles — reí, recordando la polémica que había causado esa comparación.

— ¿Qué? ¿Acaso compartir exnovia no le agrada? — preguntó riendo, sabiendo a qué se refería.

— Matty dice que jamás salió con Taylor. Al parecer, solo intercambiaron números y ya. No volvieron a hablar — le expliqué, repitiendo lo que Matty me había contado.

Oh Caroline!  (Matty Healy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora