42. Post-Mortem

16 3 1
                                    

Caroline:

Suspiré profundamente, sintiendo el peso de la decisión en mi pecho. El apartamento de Nicholas, ahora vacío y silencioso, sería el escenario no solo de una despedida, sino de un acto de honestidad conmigo misma y con Greg. No había mucho que decir; lo apreciaba, sí, pero no estaba en mí forzar un sentimiento que no existía, y menos aún prolongar el dolor.

Greg entró con esa sonrisa que siempre me había cautivado, pero hoy, esa sonrisa no alcanzaba a ocultar la premonición de lo que estaba por venir. Afortunadamente, Nicholas estaba en Noruega, ajeno al drama que se desplegaría en su sala de estar.

- Ya viví esto una vez, Caroline - comenzó Greg, su voz un eco de resignación mientras colgaba su abrigo. - Y aunque parte de mí tenía la esperanza de que esta vez sería diferente, parece que me equivoqué.

Mi estómago se retorcía en nudos, y me encontré jugando con mi cabello, una maniobra nerviosa que siempre me delataba.

- Lo siento, Greg - las palabras salieron de mí, un susurro apenas audible.

- ¿Es por Matty? - Su pregunta fue directa, sus ojos azules buscando los míos con una intensidad que me desarmaba.

Negué con la cabeza, mi orgullo herido por la insinuación.

- No he hablado con Matty desde aquel día en el hospital. Él no es parte de esto - afirmé con convicción, sintiendo cómo mi voz se fortalecía con cada palabra. - Estoy cansada de que la gente piense que mi vida gira en torno a él. Matty fue importante, sí, pero estoy forjando mi propio camino, por mí, por mi bienestar. Hemos estado más tiempo separados que juntos, y eso, Greg, tiene que significar algo.

Greg me miró con una mezcla de comprensión y pesar.

- Lo siento, es solo que él apareció de nuevo y pensé que... bueno, que habías decidido terminar esto por él. Pero me alegra saber que no es así - dijo con sinceridad, y pude ver la genuina preocupación en sus ojos.

Suspiré, una exhalación que llevaba consigo la pesadez de la situación.

- Caroline, siempre supe que eras alguien que no se conforma con menos - continuó Greg, su voz firme pero teñida de tristeza. - Eso es lo que siempre admiré de ti, esa fuerza para perseguir lo que realmente quieres.

- Gracias, Greg... lamento no poder corresponderte como tú quisieras. Lo intenté, de verdad - dije, encontrando su mirada con la mía, permitiéndole ver la sinceridad en mis ojos.

- Lo sé, lo notaba. Pero no puedes obligarte a sentir algo que simplemente no está ahí. Ven aquí - dijo suavemente, extendiendo su mano hacia mí.

Con un paso vacilante, me acerqué, y él me envolvió en un abrazo sincero y cálido. En ese abrazo, no había promesas ni expectativas, solo la aceptación de un final y el respeto mutuo que siempre nos caracterizó.

El abrazo se prolongó por un momento más, un silencio cómplice entre nosotros. Finalmente, Greg se apartó, sus ojos aún fijos en los míos, buscando una última confirmación de que todo estaría bien.

- Sé que encontrarás lo que buscas, Caroline. Siempre lo haces - dijo con una sonrisa triste, un último gesto de apoyo antes de dar media vuelta hacia la puerta.




Greg había renunciado al Love On Tour, y aunque no lo dijera, sabía que en parte me culpaba. Era la recta final y habíamos trabajado codo a codo durante dos años. Harry, por su parte, aunque intentaba ocultarlo, estaba molesto. Sentía el peso de sus miradas sobre mí, una carga que amenazaba con aplastarme, pero no me dejaría vencer tan fácilmente. Con rapidez y eficiencia, encontré un reemplazo para Greg, demostrando que no había obstáculo que no pudiera superar.

Oh Caroline!  (Matty Healy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora