/Nota de la autor: acabo de publicar todos los capítulos, no se olviden de darme Corazones, y Gracias!!! /
El silencio era relajante. Tashigi había podido dormir toda la noche y, al despertar, no tenía la energía para levantarse. Allí estaba, recostada al lado de Nami, quien se veía profundamente dormida.
Ella pensaba que debía levantarse, pero estaba muy a gusto en la cama, y en cuanto parecía que se volvería a quedar dormida, un ruido la alertó.
Rápidamente se cambió de ropa. Al salir de la habitación, vio a algunos miembros de los Mugiwara.
—¡Robin-chan! Sin duda, acabas de alegrar mi mañana bendiciéndome con tu maravillosa belleza! —exclamó Sanji en la cubierta del barco, sin dejar de alabarla. Detrás de él llegaban Zoro y Luffy.
Tashigi rápidamente se agachó para que no la notaran.
—¡Sanji! ¡Deja de molestar a Robin y escúchanos! ¡Danos de comer! ¡Estamos muriendo de hambre! —exclamó Luffy, agonizando.
—¡Tú eres el único! ¡Si tanta hambre tienes, ponte a ayudar!
—¿He, en serio?
—No. —exclamó rotundamente Sanji, sabiendo que cualquier ayuda que Luffy proporcionara terminaría en desastre—. Espera una o dos horas y quizás tenga algo para ti.
En eso, Nami salió del cuarto.
—¿Eh, Tashigi? ¡Aquí estás! Discúlpame, tengo el sueño muy pesado.
Sanji volteó de inmediato al notar la presencia de Nami y volvió a convertirse en ese torbellino de corazones.
—¡Nami-chan! ¡Tashigi-chan! ¡Buenos días!
Zoro se volteó al escuchar que estaba Tashigi, y ella, al notar que Zoro comenzó a buscarla con la mirada, se armó de valor para dejar de estar escondida y saludar gentilmente.
Zoro, sin percatarse, sonrió, y Robin lo notó.
—¿Ara? ¡Zoro-san! ¿Por qué sonríes tanto?
—¡Es cierto! Zoro, ¿por qué sonríes así? —preguntó Luffy, ya que se le hacía raro.
—¿Qué? ¡No te atrevas a sonreírle como un pervertido a mi espléndida Nami!
—¡No le sonreí a Nami!
—¿Entonces le sonreías a la marin, Zoro-san?
—¡Suficiente! ¡No le sonreí a nadie!
Tashigi se puso roja y se arrepintió de haber saludado.
—¿Sanji, ya vamos a comer? —exclamó Nami, ajena a la discusión, aún bostezando. Sanji se puso serio y galante.
—Les preparé lo antes posible algo de mi mejor comida, un platillo exquisito, usando los ingredientes de la mejor calidad que tanto protejo de estos idiotas y...
—¡Suena bien!
—¡Haaai, Nami-chan!
—¿Qué? ¡Eso no es justo! ¡Dijiste en dos horas!
Zoro miró con seriedad a Robin y le susurró.
—¿A qué juegas?
Pero ella simplemente suspiró y regresó la mirada a las chicas.
—¿Crees que ella te extrañe cuando regrese a la Marina?
Zoro se molestó al oírla.
—¡Eso no te incumbe!
—Vamos, Tashigi, quiero contarles que llegaremos pronto a la próxima isla —exclamó Nami mientras bajaba corriendo las escaleras.
Tashigi se apresuró a seguirla, pero de repente tropezó. Intentó mantener el equilibrio, y a pesar de que cayó un par de escalones, alcanzó a agarrarse de las barandillas.
Luffy se rió al verla tropezar y los demás se asustaron, pero no fue grave.
—¡Tashigi! Perdóname, es mi culpa, no debí haberte hecho correr.
—No te disculpes, fue mi culpa. Olvidé mis lentes en la habitación.
—Quédate aquí, iré a buscarlos.
—¿Tashigi-chan, estás bien?
—Sí, no se preocupen por mí. Nami fue por mis lentes.
—¡Oeee, Sanji! ¡Tengo hambre!
—¡Haaai! ¿Cómo hartas? Está bien, les daré de comer...
Todos fueron detrás de Sanji, y fue cuando Robin notó a Zoro serio. Intentó preguntarle si iría con ellos, pero de repente se dirigió hacia Tashigi.
—¡Oeee!
—¿Hmm? —se preguntó Tashigi al verlo serio al pie de la escalera.
—No tienes por qué correr; ten más cuidado la próxima vez.
—¿Qué, no ves que estoy bien? ¡No tienes por qué venir a hablar así!
—¡Tonta! Si llegaras a caer en verdad...
—¡Tú eres el tonto! Si llego a caer, me levanto. ¿Cuál es el problema?
—¡No estás siendo realista! ¡Maldición!
—¿Zoro? No molestes a Tashigi, ella está bien. ¡Déjalo así!
—Solo intento decirle que tiene que ser más cuidadosa.
—No tienes que decirme nada, no soy una niña.
—Es cierto. Tashigi, ten tus lentes y ve con los demás. Yo hablaré con Zoro.
—¿Pero...?
—Tranquila, iremos enseguida.
Tashigi se puso sus lentes, y a pesar de que miró hacia atrás, ellos no empezaron a hablar hasta que ella entró a la cocina.
—Escucha, Zoro, sé que la salvaste y estuviste al pendiente de ella, pero se encuentra bien. Ya no debes cuidarla; y por cierto, solo faltan unos días para llegar a puerto. Compórtate hasta entonces, ¿quieres?
—¿Días?
—Sí, por favor. Trata de que no te recuerde como el loco que le grita por todo, ¿sí? Vamos a comer.
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(Zoro y Tashigi) One piece [Limón]
FanfictionTashigi termina mal herida y zoro la lleva al barco ¿Su deceo por conocerce ira más allá de una simple charla?