¡NÚMERO TRECE!

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Un par de horas más tarde, el casting ha terminado, sin embargo el CEO de Masquerade, permanece cómodamente sentado en su posición más elevada, mientras observa con interés al grupo de elegidos, mientras ascienden por una de las gradas que rodean la pasarela.
—Recordad chicos y chicas, os quiero aquí el Sábado a las cinco en punto, ahora id con Jen, quién os proporcionará el vestuario,¡Y haced el favor de ducharnos primero!.
Relajados, todos ríen su ocurrencia.
—¡NÚMERO TRECE!—nombra, alzando un poco la voz, para que puedan escucharle por encima de las excitadas risas y comentarios del grupo, al reunirse con la joven que los aguarda junto a la salida.—Número trece,¿Puedes bajar un momento?.
Al escuchar su número, el chico voltea.
—¿S-se refiere a mí, señor?—inquiere este titubeando.
—Si, chico,¿Tú eres, el número trece no?.
Mientras el joven un poco azorado por los silbidos y gritos que emiten sus compañeros, desciende de nuevo la grada, Park Jimin sonríe levantándose de su asiento.
—Hola—saluda al chico ofreciendo su mano, cuando este alcanza su posición frente a la pasarela—tu nombre, es Jeon Jungkook,¿Verdad?.
El seleccionado con el número trece se muestra nervioso,y un tanto avergonzado mantiene la mirada fija en sus botas, sin devolverle el saludo.
—¿Te llamas Jeon Jungkook, no?.
Mientras repite su pregunta, los pequeños dedos del CEO, empujan suavemente hacia arriba la barbilla del chico, para poder ver mejor sus encantadores ojos.
De repente, en lo alto de las gradas junto a la puerta, se hace el silencio. Todos han salido, exceptuando a Jen quien observa la escena, con evidente molestia.
—¡Ejem!,¿Señor Park?.
—¿Si Jen, qué ocurre?—inquiere Park Jimin, dejando que su mano resbale suavemente sobre los pectorales del escogido, sin dejar de sonreír.—¿Puedes bajar?, no quiero tener que alzar la voz de nuevo.
La secretaria, recepcionista y chica para todo, desciende las gradas, hasta situarse a unos metros de su jefe y el sudoroso chico que con expresión neutra, permanece de pié sin moverse.
—¿Has entregado a todos, su ropa?.
—Sí, señor Park.
—¿Han firmado todos su consentimiento, con las normas del evento?.
—Si, por supuesto señor Park.
—Excelente— expresa sin dejar de sonreír—ahora, ¿Puedes dejarnos a mi y al señor Jungkook a solas?.Y haz el favor, de cerrar la puerta cuando salgas.
Jen asiente, para después darles la espalda y subir de nuevo las gradas, no sin antes dedicar una furtiva mirada, al que ella cree será, el futuro nuevo amante de su jefe.

—Pobre chico— piensa Jen para sí, mientras sus manos empujan ya la puerta—no sabe lo que le espera, lo usará, lo exhibirá, y cuando le haya sacado todo el jugo…lo echará a patadas.
De repente, una idea cruza su mente como un rayo.—Tal vez, podría quedarme solo un rato, solo para ver…qué ocurre
Silenciosamente, Jen vuelve a cerrar la puerta y con precaución, se esconde detrás de una de las butacas verdes.

—Decías, que te llamas Jeon Jungkook, ¿No?.
El interrogatorio del CEO de Masquerade, prosigue como si nadie los hubiera interrumpido y sus dedos acarician ahora,  los musculosos bíceps  del chico.
—Si, señor Park.
Ante la respuesta, Park Jimin rueda los ojos, hasta ponerlos en blanco.
—Mmmm…—gime, al tiempo que se muerde el labio —me gusta cómo suena "señor Park" dicho por tu boca.
Después, la mirada de la mente creadora de Masquerade, se vuelve más fría.
—Pero vayamos a lo que nos ocupa, ¿Qué opinas del evento?,¿Tienes alguna reticencia, alguna pregunta?,¿Alguna oposición a participar en la orgia?.
Jeon Jungkook, que hasta ahora había aguantado estoicamente, que un desconocido le sobara los pectorales y los bíceps descaradamente, da un paso atrás con expresión asombrada.
—¿Una orgia?.
Park Jimin, suelta una sonora risotada.
—¿No lo sabías?—responde ocupando nuevamente su butaca—de hecho, es una bacanal, o sea una fiesta…
—En honor al dios Baco—prosigue Jungkook, frunciendo el ceño—sé lo que és, no soy estúpido.
El CEO de Masquerade, sonríe de nuevo y mientras cruza las piernas, le indica con un gesto que se acomode en la pasarela frente a él.
—Sé, que no eres estúpido hermoso, por eso estás ahora aquí.
Sin dudar, Jeon Jungkook se arrodilla frente a él.
—Si—asiente con voz ronca— sé perfectamente, por qué estoy ahora aquí.
Tras esas palabras, el escogido con el número trece, apoya sus grandes manos de largos dedos sobre las rodillas de su futuro jefe y empujándolas delicadamente, descruza sus piernas.
Instantes más tarde, hasta el escondite de Jen, llegan susurros entrecortados y gemidos, provocando que el corazón de la joven recepcionista, comience a latir desbocado.
—¡No puede ser!—jadea al escuchar los gemidos, cada vez más intensos y acelerados—¡No puedo creer que estén haciendo esto aquí!.
Temerosa por ser descubierta, Jen escucha petrificada con sus sentidos a punto de estallar, como su jefe Park Jimin y el chico número trece, mantienen relaciones sexuales.
—¡Maldita sea!,¡Tengo que salir de aquí!—sisea desesperada, al tiempo que se incorpora un poco, justo para observar desde su punto de vista, la cabeza del chico nuevo, moviéndose arriba y abajo entre las piernas del CEO de Masquerade.

Continuará…

MASQUERADE -TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora