¡Sal de mi Cabeza! (Drarry)

3 Miradas que Conectan.

La biblioteca de Hogwarts, con sus estanterías llenas de libros que se alzaban hacia el techo, ofrecía un refugio perfecto para la tarea que Harry había decidido llevar a cabo. Habían llegado temprano por la tarde, antes de que la mayoría de los estudiantes se reuniera para estudiar y hacer sus tareas. La paz y la tranquilidad del lugar eran un bálsamo para sus nervios. Se sentaron en una mesa apartada, con una montaña de libros de pociones y otros temas relacionados con la magia en frente del trío dorado.

Ron, al ver todos aquellos libros delante de él, empezó a sudarle la frente y sentir mareo. -No toco un libro nunca, y ahora me ponéis todos estos para que también lo revise, ¿me queréis torturar?- 

Hermione lo miró enfadada. -No tienes que estudiar, Ronald. Solo céntrate en buscar una solución para Harry, y no te quejes tanto.- Dijo mientras comenzaba a ojear uno de los tantos libros que había en la mesa.

Harry también se dispuso a mirar los libros en busca de una solución. No quería permitirse el lujo de perder más tiempo. Era obvio que siempre se le iba a escapar algún pensamiento, era inevitable, y Malfoy no se quedaría callado haciendo como que no "escucho" nada. Al igual que él.

Al cabo de unos minutos, Draco y Blaise aparecieron por la puerta de la biblioteca, haciendo que Harry apartase la mirada durante unos segundos de aquel libro para mirar al rubio caminar hacia una de las mesas, algo alejada de donde estaban ellos.

---------------------

Blaise no se sentó como hizo Draco, ya que fue a buscar libros referentes a esto. Después de haber escuchado la idea de Harry, este no dudó en comentárselo a Zabini y también le pareció buena idea, por lo que también se dispusieron a ir lo más rápido posible.

Este dejó caer una pila de libros que parecía rivalizar con la del Trio Dorado con un suspiro exagerado y se recostó en su silla. -¿Por qué siempre tenemos que meternos en estos líos? No, perdón. ¿Por qué TÚ siempre tienes que meterte en líos?-

Draco, mientras hojeaba uno de los libros con expresión concentrada, le lanzó una mirada cómplice a su amigo. -¿Recuerdas la última vez que nos metimos en problemas? Esa vez que casi quedamos petrificados por una serpiente gigante en el baño del profesor... ¿Lockhart, verdad?-

Blaise rió suavemente mientras asentía. -Para no acordarse. La verdad que no podemos negar que nuestra vida en Hogwarts nunca es aburrida. Supongo que es parte del encanto de esta escuela.-

Draco suspiró y dejó el libro que estaba mirando. Miró a su alrededor, asegurándose de que nadie los estuviera escuchando. -Espero que podamos encontrar una solución pronto...Empiezo a sentirme algo incómodo.-

-¿Incómodo? Draco Malfoy admitiendo que algo le resulta incómodo. Esto es histórico.- Ironizó Blaise mientras miraba de soslayo a su compañero, apoyando su codo en la mesa y recostando su cabeza en su mano.

Draco rodó los ojos pero no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa. -No te acostumbres a esto. Es solo una situación temporal.-

-------------------

Hermione había visto ya dos libros prácticamente completos, y nada de lo que ponían servía para una solución a corto plazo para su amigo.  Sus cejas estaban fruncidas en concentración, y sus dedos pasaban rápidamente por las páginas, mientras murmuraba en voz baja sobre las teorías y posibilidades que había encontrado. 

Ron, sentado a su lado, miraba con desesperación las pilas de libros que habían acumulado. -¿No encontraste nada aún, Hermione?- bufó exasperado.

Hermione suspiró y apartó un mechón de cabello de su rostro. -No lo sé, Ron. Esto es más complicado de lo que imaginaba. No hay instrucciones claras sobre cómo deshacerla...-