Skylar
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A su alrededor todo se sentía como si estuviera ocurriendo al menos medio segundo más lento. Las voces, el movimiento de los ojos deslizándose sobre su vestido e incluso los saludos corteses a los que Skylar respondió mecánicamente con una inclinación de cabeza y uno que otro: "Buenas noches", "gracias por haber venido". Todo parecía estar muy lejos, lejos de sí misma y sus pensamientos.
Esa noche, los conceptos de protección y cazar se encontrarían en la misma línea de definición.
Resultaba irónico cómo dos acciones tan opuestas en significado literal, podían llegar a converger y depender la una de la otra con tanta desesperación.
No podía lidiar con todo, al menos no al mismo tiempo, pero sí que podía concentrar toda su mente e incluso su cuerpo en un punto a la vez, de manera que todo lo demás pasara a un segundo plano el tiempo suficiente para que las cosas se alinearan por su cuenta o ella encontrase una mejor forma de afrontarlas.
Hasta el río más turbulento encuentra su calma en algún punto de su trayecto.
Ragnor la ayudaría a controlar sus poderes, claro que lo haría, era Ragnor después de todo. No podía calcinar a Theodor Gerald aunque la idea le resultase de lo más tentadora, pero sí que podía demostrarle que no necesitaba de su "favor" para ganarse a los miembros del círculo y sobre Traian...
"Traian...".
Tan pronto cruzó la puerta de la biblioteca sin volverse para mirarla ni una sola vez, Skylar entendió algo que debió de haber descubierto mucho antes. La mejor forma de borrar la debilidad, era fingir que no la tenía en absoluto. Estas personas requerían de una líder fuerte, una unificadora y ella podía ser eso. No era la primera vez que actuaba, pero sería la primera vez en que lo haría persiguiendo sus intereses personales. Dar con Christian. Nada más importaba.
Esta vez, Skylar no formaría parte de la obra. Ella sería la dueña del teatro.
—¡Sky! —La voz de Esteban la atrajo al presente. El muchacho se encontraba a los pies de la escalera junto a Nathaly y aparentemente habían acudido a su encuentro, lo que hizo que un grato sentimiento de familiaridad se distendiera a través de todos los puntos de tensión de su cuerpo como un bálsamo— Siento mucho el habernos ido así antes, pero ya sabes... Parecía que necesitaban un poco de privacidad. No tenía idea de que el viejo Theodor fuera tu pariente, aunque debí imaginarlo, habiendo solo dos Gerald...
—Por Dios Esteb, no seas tan metiche —le regañó Nathaly, arrancando una sonrisa a Skylar. La dinámica de esos dos era tan típica, que atraía hasta ella una bocanada de normalidad capaz de aligerar la tensión que cargaba a flor de piel. ¿De verdad algún día podría llegar a tener esa misma soltura con Addy considerando todo el tiempo que habían estado separadas?— Lo siento prin... Sky —se corrigió con una sonrisa—. Niños, ya sabes.
—¡Niño me dice! —se quejó Esteban, en una exclamación que provocó que un par invitados se volvieran hacia ellos con sobresalto—. Un año y cuatro meses, esa es la gran brecha generacional que nos separa.
—Como sea —se encogió de hombros Nathaly, volviendo su atención a Skylar—. ¿Estás bien...? Todo eso se vio un poco intenso.
—Intenso es una buena manera de definirlo —suspiró Skylar, feliz de poder formar parte de lo que parecía ser la conversación más normal que había sostenido en mucho tiempo. Bueno claro, si es que podía considerarse como normal el conocer al hombre responsable de gran parte del dolor que tuvo que sobrellevar su abuela en su juventud y que resultaba ser no solo un miembro de un importante grupo de guardianes al cual tenía que hacer todo lo posible por agradar, sino que también era su tatarabuelo—. Yo tampoco tenía la más mínima idea de quién era ese hombre hasta hoy y no tengo la más mínima intención de conocerle mejor. Alguien capaz de hablar y de referirse a Ragnor de ese modo no es alguien a quien quiera como una parte activa en mi vida.
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El legado de Orión ©
FantasySaga Trono de luz y oscuridad. Libro 2: El legado de Orión. --------------------------------- Tras el ataque a Gealaí, un crudo resentimiento ha mermado la relación entre guardianes e hijos de la luz. El tiempo avanza con rapidez y la fecha final pa...