- Jinnie... -Susurró moviendo ligeramente el cuerpo dormido de Hyunjin.
- Mmh?..
- Hyunjin...
- Déjame, quiero dormir... -Balbuceó
- Porfavor despierta, no quiero salir y encontrarme con tu madrina, me da vergüenza..
- No me molestes.. - Dijo volviendo a acorrucarse en las sábanas.
- ¡Hyunjin! - Al no resivir una respuesta pataleó en la cama hasta que se le ocurrió hacer algo.
Volteó a dónde Hyunjin dormía tranquilamente y se acercó hacia él.
- Jinnie... - No hubo respuesta.
- Hyunjin.. - Nada.
Unos segundos en los que pensaba en sí decirlo era buena idea.
- Amor...
Y lamentablemente...nada.
Eso hasta que entendió que él más alto ya estaba dormido, por lo que volvió a acostarse dándole la espalda y sintió su corazón apretarse un poco.
Sus ojos empezaban a arder y estaban haciendo su mayor esfuerzo para no derramar ni una lágrima. Nisiquiera sabía porqué estaba triste.
Sus pensamientos fueron interrumpidos cuándo sintió que el más alto en un rápido movimiento lo tomó de la cintura y lo volteó del lado opuesto para luego abrazarlo.
- Vuelve a llamarme así.
- ¿E-eh?..
- Porfavor.
Dudó por unos segundos pero tomó la decisión de esconderse en el pecho de Hyunjin y respiró profundo para luego si decirlo.
- Amor..
El más alto aplicó más fuerza en el abrazo y cerró los ojos nuevamente, sintiéndose calmado y tan feliz que no podía explicarlo.
Tampoco había una diferencia en lo que sentía Felix, su corazón latía y se sentía nervioso pero a su vez tan feliz que podría gritar de emoción.
Ya pero, eso sí que no era de amigos.
Ambos estaban en la cocina "preparando el desyuno" o esa era la idea principal porqué lo que realmente pasaba es que estaban besándose hace más de 10 minutos entre risas.Felix estaba sentado en el mesón de la cocina y Hyunjin entre sus piernas, sosteniendo su cintura
- Deberíamos comenzar a cocinar.. - Dijo el más bajo
- Na..
- Jinnie.
- Cinco minutos más
- No, ya vas a comenzar a ponerte de necesitado.
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My work of art • Hyunlix
FanfictionEstaba apunto de dormir cuando escuché un ruido, parecía que algo se hubiera caído. Alguien había entrado a casa. Con miedo en toda mi sangre tomé el valor para ir hacia la cocina en silencio y agarrar un cuchillo. Me dirigía hacía aquella habitació...