Blue
Caminé a hurtadillas hasta salir de la cabaña y cerré la puerta con la mayor delicadeza que pude para no despertar a Fede.
Había vuelto a casa borracho y casi desorientado. Nada me apetecía más en el mundo que alejarme de él cuando estaba en ese estado de embriaguez.
Fui hasta la barca y quité el nudo que la mantenía sujeta con la intención de subir, pero unos pasos detrás de mí me sobresaltaron.
-Es muy tarde ya como para que una muchacha respetable ande por ahí.
Esa voz.
Me giré de golpe y observé al tipo encapuchado que tenía enfrente.
-A no ser que seas una meretriz que en ese caso…- se quedó en silencio mientras yo me centraba en mi respiración y buscaba en mi mente completamente bloqueada una forma de escapar.
-¿Te has quedado de nuevo muda?- sonrió dejando que se le formaran dos hoyuelos en las mejillas- ¿O soy yo que te dejo sin palabras?
-¿Me ha estado siguiendo?- pregunté al fin con el cuerpo tembloroso.
Otra sonrisa.
-No exactamente.
Le miré esperando a que continuara hablando.
-Busco a una bruja, y me dijeron que vivía por…- señaló la puerta de mi cabaña- aquí.
-Se equivoca, señor- me giré de golpe y subí a la barca, pero cuando me quise dar cuenta, él ya estaba sentado dentro.
Ahogué un grito y me alejé lo que pude de él mientras la barca comenzaba a dejarse llevar por las olas.
-¿No eres tú la bruja?
Negué con la cabeza.
Sus ojos claros se desviaron hacia el cielo y estiró las piernas con una calma que me paralizaba.
-¿Vas a quedarte aquí?- pregunté.
-Que remedio…-contestó- ya no puedo llegar a tierra.
Miré a mi alrededor asustada y cuando sus ojos volvieron a clavarse en mí, me quedé petrificada.
-¿Sales en camisón por las calles?- preguntó.
Con rapidez me cubrí el cuerpo.
-Siento haber dicho que eras una meretriz- sus ojos se me clavaban tanto que me costaba hasta respirar- solo hay que verte bien para saber que no.
-Ni bruja.
Esbozó una sonrisa.
-En eso no estoy tan de acuerdo- se humedeció los labios y cerró los ojos- aún no comprendo porque una chica de bien saldría a estas horas para adentrarse en un bosque.
No contesté provocando que él abriera los ojos para volver a mirarme.
-¿Escapas de un matrimonio forzado?- preguntó con curiosidad-¿De un esposo maltratador o…
-No le incumbe en absoluto mi vida privada.
El tipo esbozó una ligera sonrisa.
-Entonces he dado en el clavo…-susurró- un esposo maltratador.
Guío su mirada hacia mis manos y chasqueó la lengua.
-Pero no hay alianza…
-Bajese de mi barca ahora mismo- dije.
Él me miró, casi queriendo llegar a mi interior, y al final se llevó los dedos a la boca y silbó con fuerza provocando que un enorme rugido resonara en la lejanía.
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La semilla del dragón. (Segunda parte). AEMOND TARGARYEN 💚
RomanceFANFIC HOUSE OF THE DRAGON