El unificador

Ataque Zero

Nota: hola a todos y todas, espero que estén muy bien, aquí trayendo una nueva actualización y bueno, creo que este fic está llegando a su recta final.  Creo que faltarían unos 3 o 4 caps como mucho para concluir esta historia.

Muchas gracias a quienes leen, votan, comentan, eso me motiva mucho a seguir.  

Este cap en particular, tendrá notas al final y algunas imágenes que he creado con la IA Bing y Leonardo de Inuyasha y Sesshoumaru ( no son perfectas, apenas estoy aprendiendo jaja).

Sin más, a leer¡

***

– Inuyasha, ¿ no te parece curioso que el bebé siempre esté mirando la luna?– preguntó la mujer al analizar la actitud de Inutaisho que ya contaba con 5 meses.

– Es un demonio, es normal que pase– comentó y sonrió al ver a su cachorro en la cuna.

– Son cosas que una humana como yo no entiendo– levantando los hombros– los dejo descansar.

Observó cómo su amiga se marchaba y aprovechó para cargar al bebé. Lo envolvió en una manta y cargándolo con cuidado, saltó por la ventana hasta llegar al techo de la casa.

– Así podrás apreciar más la luna– comentó a su hijo– tu padre, tiene una media luna en la frente, tal vez, por eso que te atrae tanto ver la luna– añadió para luego escuchar los balbuceos del bebé.

– Contigo, comprendo mejor porqué mi madre lloraba– expresó mientras miraba la luna– no sé qué nos depara esta época, hijo mío, pero no voy a dejarte solo– suspirando– y... a pesar de que tu padre es un tonto ( refiriéndose a Sesshoumaru), sé que también te protegería.

***

El Daiyokai puso la mano en el árbol, su mirada estaba afligida* al vislumbrar el recuerdo de Inuyasha. Solo enfrente del hanyou podía permitirse quebrarse y aceptar que su ausencia era el peor castigo que pudo recibir por haberlo lastimado.

– Han sido unos años dolorosos, pero he intentado criar bien a nuestro hijo y protegerlo. Aunque su amorío no sé cómo tramitarlo, ¿alguna vez pensaste en una pareja para él?– suspiró. Hace poco había regresado al Palacio después de la conversación con Inutaisho, su hijo tenía un buen punto y era que no tenía la coherencia para quejarse de la relación. Eso le preocupó pero mucho más aún, la información sobre Naraku y la perla... eso llevó a que fortaleciera la seguridad en todo el castillo y en especial de Inuyasha.*

– Ya pronto... aguanta un poco más– mencionó aunque más para él que para el hombre dormido.

***

En la noche, el grupo estaba sentado frente a una fogata, todos estaban en un silencio incómodo que finalmente fue roto por la mujer.

– Tu padre no es llamado el Rey Bestia por nada, tiene un aura poderosa.

– Así es mi amo bonito– dijo orgulloso Jaken.

– Jaja así es– rio el demonio– el único ser que ha podido hacerle frente es mi otro padre.

– También debe ser alguien poderoso – curioseó el monje.

– Lo es– respondió Koga– ambos son una pareja supremamente poderosa y por eso Naraku quiere deshacerse de ellos, son la piedra en su camino.

– Hay que mantenernos alerta, ya que el objetivo de Naraku es el monje, puede venir a atacarnos en cualquier momento.

– Es una muy buena deducción– habló una tétrica voz desde el bosque. Esto puso en alarma a todos y mucho más al lobo y al sirviente que reconocieron de inmediato la voz.