One Shots Joseph Quinn|Eddie Munson (Parte 2)

CRUSH|Eddie Munson

—¡Ahhh! ¡Entré! ¡Mamá! ¡Papá!—Un gritó a lo lejos logró despertar a Eddie.

—¿Esa no es __?—Rick volteó a mirar a Eddie, quien se había quedado dormido la noche anterior sobre el sofá.

—¿Qué?—Eddie miró a su amigo lleno de confusión—¿Qué hora es?—Cuestionó Eddie.

—Las seis—Respondió Rick y puso de nuevo su atención en la pantalla de la televisión—Te quedaste dormido luego de que te gané por segunda vez—Sonrió él con suficiencia.

—¿Y no has dormido nada?—Eddie se acomodó en el sofá.

—Bueno, no—Respondió Rick mientras se encogía de hombros.

—Debiste dormir un poco, se supone que hoy ensayamos temprano—Mencionó Eddie.

—Parece que alguien entró a la universidad—Gareth también se había despertado por los gritos que había logrado escuchar; Eddie lo miró.

—Oh, por eso gritaba—Intervino Rick y Eddie volteó los ojos con diversión; no pudo evitar sonreír.

Estaba feliz y orgulloso de que hayas logrado entrar a la universidad, sabía que además de ser uno de los sueños de tus padres, también era uno de los tuyos. Estaba emocionado y quería que ya anocheciera para así poder escabullirse dentro de tu habitación; deseaba tenerte entre sus brazos y llenarte de besos hasta que le dijeras basta.

La otra noche, luego de que se percatara de que te habías quedado dormida, se había alejado de ti con extremo cuidado de no despertarte y salió de tu habitación antes de que amaneciera. Sabía que debía hablar contigo pero aún no sabía cómo iba a hacer para que decidieras sincerarte con él. No era idiota, todas las señales apuntaban a que el muy imbécil de su novio te estaba agrediendo; pero tampoco entendía la razón del por qué no decidías hablar y alejarte de una vez por todas de tu agresor.

—¿Alguien ya preparó café?—Cuestionó Steve con ojos soñolientos.

—Gareth—Respondió Eddie y luego bostezo.

—Bien, a las siete empezamos a ensayar—Agregó Steve mientras se adentraba en la cocina.

—Te lo dije—Susurró Eddie a Rick cuando este último volteó a mirarlo con sus grandes ojeras—¡Yo despierto a Billy!—Agregó con emoción mientras se levantaba del sofá.

—¡No le lances agua!—Gritó Gareth mientras salía corriendo de la cocina; Eddie ya se había alejado—Se enfadara y no va a querer ensayar—Agregó mientras suspiraba; ya era muy tarde para intervenir.

—Me haces sentir orgulloso cariño—Mencionó tu padre; él y tu madre preparaban las maletas, tenían otro viaje de negocios—Te prometo que cuando volvamos iremos a cenar para celebrar—.

—De acuerdo—Asentiste sonriente—¿Cuando vuelven?—Preguntaste.

—Esperamos volver el domingo, cariño—Respondió esta vez tú madre—Daniel vendrá más tarde para hacerte compañía en los próximos días—.

—¿Tienes que ir hoy a la secundaria, cariño?—Cuestionó tu padre.

—Sí—Asentiste—Aún puedo lograr más créditos extra—.

—¿Quieres que te llevemos?—Preguntó esta vez tú madre—Si te apresuras nos da el tiempo justo para llevarte—.

—De acuerdo, iré a prepararme—Respondiste para luego alejarte hacia tu habitación.

Las buenas noticas habían logrado mantener tu buen humor, al igual que a tus padres. La noticia de que habías sido aceptada en la universidad que querías le había caído bien a la familia; lastimosamente las buenas noticas y el buen humor desaparecieron en cuestión de segundos. Tus padres se habían tomado el tiempo para dejarte en la secundaria antes de tomar el vuelo hacía su viaje de negocios, para tu mala suerte, divisaste a Andrew antes de que tu padre detuviera el auto por completo.