When Kyle falls in love

Episodio 14

Durante la cálida mañana de un sábado en el que no tenía un plan en particular Kyle dormía cómodo y tranquilo en su cama, con su cabeza descansando sobre una suave almohada y su cuerpo cubierto por las sábanas de dicha cama que le ayudaban a mantener el calor en su cuerpo.

Su ciclo de sueño fué interrumpido gracias a que el llanto de un bebé lo hizo despertarse y levantarse. Salió de su habitación para entrar a la que estaba al lado, en donde había una pequeña bebé dentro de la cuna, llorando e intentando llamar a sus padres. La pequeña de rizados cabellos pelirrojos fué tomada en brazos por Kyle en un intento por tranquilizarla y hacer que deje de llorar.

- ¿Ya se despertó? - preguntó un cansado y evidentemente somnoliento alpha que entró a la habitación al escuchar que su pequeña bebé estaba llorando.

- Sí, pero no te preocupes, puedo calmarla. Siempre lo hago.

- Kyle... Hey, judío, despierta...

Los bonitos ojos del omega se abrieron luego de haber tenido ese extraño sueño. Al hacerlo se dió cuenta de que no estaba en su casa, estaba en la sala de una casa ajena y durmiendo recargado sobre el hombro de Eric, se había quedado dormido mientras veían una película juntos.

Uno de los brazos del alpha rodeaba su cintura mientras que el otro jugaba y se paseaba a través de ese rizado y desordenado cabello rojo, y aunque para Kyle fué sumamente vergonzoso Eric de algún modo vió normal el hecho de que el omega tuviera esa clase de contacto físico con él, pues al haberse quedado dormido a mitad de la película su cuerpo buscaría tener más cercanía a lo primero que encuentre cerca.

- Ah, ya despertaste - la sola voz de Eric llamó su atención e hizo que nuevamente volteara a verlo a los ojos - estaba pensando en pedir algo de comer o subir a mi habitación y tener sexo así que... Te dejo decidir esta vez, ¿qué prefieres?

- Si decido que quiero comer... ¿Qué comeríamos?

- Puedo pedir una pizza, o si lo prefieres podemos comer pollo frito.

Kyle suspiró y negó con la cabeza. Eric se estaba convirtiendo en un deportista profesional, lo que significaba que debía empezar a comer más saludable así que se ofreció a cocinarle algo pero sin decirle que haría algo saludable, Eric accedió.

Kyle no tardó demasiado en tener algo listo, pues en la cocina de la casa del alpha habían un montón de cosas que había podido usar para preparar algo que pudieran disfrutar los dos. Terminó decdiendose por hacer pescado a la plancha acompañado de vegetales salteados, y si bien Eric se quejó diciendo lo mucho que detestaba la comida saludable al final terminó acabándose lo que había en su plato cuando Kyle lo amenazó con dejarlo sin sexo ni besos durante cinco meses, además de que al final no se quejó demasiado de los vegetales cuando el pelirrojo le dijo que podía agregarles salsa de soja y así tendría un sabor diferente, y tenía razón, así sabía mejor. En realidad pensaba que al omega judío se le daba muy bien cocinar pero prefirió no decírselo al creer que sonaría muy cursi.

Alpha y omega disfrutaron de una agradable comida juntos, y cuando los rayos solares comenzaban a ocultarse dejando detrás de si un bonito color anaranjado en el cielo y anunciando la pronta llegada de la noche subieron al cuarto de Eric y dejaron que sus cuerpos expresaran la fuerte atracción y el deseo sexual que había entre ellos, acto que concluyó con Kyle durmiendo sobre la cama de Eric por lo cansado que lo había dejado y Eric acariciando las blancas mejillas del chico, apreciando su rostro más de cerca y sintiendo una calida sensación en su pecho. No se había dado cuenta (o simplemente no prestó demasiada atención a eso) pero algo en él y su mundo había cambiado con la llegada de Kyle a su vida, y sin saberlo jamás fué el mismo desde aquel día.