»Amor enlazado 🌿 +18 [2 Hwang]

11

Habían pasado varios días, en los que Yeji y Hyunjin estaban molestos. Bueno, a decir verdad, la felina era la que estaba molesta con Hyunjin desde ese día, en que defendió a otra persona.

La felina había pasado en la cabaña, sin salir y hundida en las cómodas cobijas que la cama tenía, no tenía ánimos de nada, la gatita de Yeji se sentía muy perezosa, como si no hubiera dormido en meses, su hambre había sido un poco disminuída y ahora sólo comida una vez al día, en ocasiones, sentía ligeros ascos, pero lo vinculaba con la gastritis de no estar comiendo correctamente.

Hyunjin últimamente estaba más ocupado con la aldea, pues justo ayer un lobo de la manada del sur intento entrar a la aldea, sin embargo, fue atrapado antes de hacer algo. Hwang se la pasaba más fuera que dentro de su cabaña. Minho y Lía habían regresado a su cabaña cuando el peligro disminuyó, al igual que Jisung y Chaeryeong, pero también se mantenían en alerta por si sucedía algo.

Hoy era uno de esos días en el que Yeji no salía de la cama, Hyunjin tomo ropa limpia y su toalla, le dió una mirada de preocupación a la felina que estaba acostada mientras dormitaba en la cama, ignorando su presencia.

—Iré a bañarme — anunció, pero ni siquiera recibió una respuesta, simplemente paso derecho hacia el baño.

Poco después, la puerta fue tocada con un poco de insistencia, Yeji abrió los ojos y espero a que la persona que estaba tocando, se fuera. Sin embargo, eso no pasó y volvieron a tocar.

—Maldición — bufando molesta quitó la cobija de su cuerpo, se levantó colocándose las pantuflas y camino con pasos molestos hacia la puerta, al abrirla, se encontró nuevamente con esa tal Wongyoung. —¿Otra vez tú? — preguntó, odiando la estúpida sonrisa que le dió.

—Sí — dió un paso dentro de la casa, Yeji simplemente echó su cabello hacia atrás y soltó un suspiro.

—¿Ahora que quieres?

—¿Se encuentra Hyunjin? —a la felina le pareció extraño que preguntara si estaba, aún teniendo algunas sospechas, decidió negar.

—No, desde anoche no está, ¿Por qué? — preguntó a la defensiva. Wongyoung sonrió en grande antes de enredar un mechón de cabello en su dedo índice y la miro de arriba a abajo.

—Pobrecita, ¿Es que aún no te das cuenta? — Yeji frunció el entrecejo.

—¿Darme cuenta de qué, exactamente? — preguntó, cruzándose de brazos y teniendo ganas de reírse en su cara, ahora sabía que aquella chica solo era palabrería sin sentido.

—Anoche él paso la noche conmigo, me hizo sentir la mujer más dichosa de toda la aldea y probablemente hayamos encargado algo — Wongyoung palmeo suavemente su estómago, dando a entender un embarazo.

Yeji soltó una risa nasal y asintió.

—Interesante, ¿Y luego? — Wongyoung sonrió burlona.

—Los cuernos que tienes deben de ser muy pesados, no te preocupes, lo haré feliz — se dió la dicha de presumir algo que no tenía.

Sin embargo, de la habitación salió un Hyunjin recién bañado y con ropa nueva, Yeji sonrió al ver la cara de asustada de Wongyoung, tuvo tantas facciones que no sabía cuál elegir y eso le causó gracia.

—¿AsíÍ qué pase la noche contigo, eh? — preguntó, sonando molesto y confundido.

—N-No es lo que parece Hyunjin — trato de excusarse, sin embargo, lo había escuchado todo y ya no tenía escapatoria. —Y-Yo...¡Ella me amenazó! — señaló descaradamente a la felina frente a ella, quien simplemente negó con su cabeza, manteniendo una sonrisa en su rostro.

—¡Ya deja de mentir. —grito Hwang, asustando a ambas, Yeji dejó salir sus orejitas y su cola, inmediatamente lo disimulo. —No puedo creer que te haya defendido después de creer en tus palabras vacías, incluso tuve una pelea con mi pareja y al parecer eso era lo que querías al final — dijo, haciendo que Wongyoung mirará a Yeji con los ojos llenos de lágrimas.

—¡Esto es tu culpa, dijiste que no estaba aquí contigo, maldita mentirosa! — la chica trato de atacarla, sin embargo Hyunjin intervino, la tomó de los brazos y la saco de un empujón fuera de su cabaña.

—¡No vuelvas a mi casa, porque si lo haces, si te atreves a regresar, te echó de la manada, tú eliges! — regreso y cerro la puerta después de entrar. Soltó un suspiro.

Un ruido de arcadas lo hizo girar hacia la habitación, en dónde al parecer Yeji había salido corriendo. El puma inmediatamente sintió preocupación, así qué, no dudo en correr hacia la habitación y entrar al baño, encontrándose a Yeji vomitando en el retrete.

—¿Qué pasa? — se agachó con ella y le apartó el cabello, mientras le daba un suave masaje en su espalda, para tranquilizarla. —¿Te sientes mal? Podemos ir a la cabaña del médico a qué te revise — Yeji negó con la cabeza, se levantó con un poco de dificultad y se enjuagó la boca. — ¿Quieres ir a acostarte? — ni siquiera pudo responder la pregunta, cuando Yeji ya había sido agarrada por los brazos de Hyunjin, quien maldijo.

La cargo y la recostó inmediatamente en la cama, tocó su frente, encontradola con temperatura normal. Soltó un suspiro y espero a que despertará, sólo así podía revisarla el médico de la manada.