Kisses

04!

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iv.
𖤣𖥧 𝐒𝐈 𝐍𝐎 𝐇𝐀𝐘 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎́𝐍, 𝐍𝐎 𝐇𝐀𝐘 𝐒𝐄𝐍𝐓𝐈𝐌𝐈𝐄𝐍𝐓𝐎𝐒 𖤣𖥧

Parte II

Todos hicieron un silencio profundo a excepción de Brando que soltó una gran carcajada.

Niccolo y yo cruzamos miradas, ahí el tiempo se detuvo para mí, literalmente. Sentí cómo la garganta se me cerraba y un cosquilleo en mis pies se formaba. ¡Esto sobrepasaba los limites! No besaría al hijo del futuro esposo de mi madre.

Maldita botella. Hubiera preferido besar mil veces a su novia.

─ Bien... ustedes deciden. ─ Habló Brando.

─ Que lo decida ella. ─ Respondió Niccolo.

Era un imbécil, la respuesta correcta era "No podemos, somos casi familia y tengo novia"

¿Desnudarme? ¡Ni loca! Tengo vestido y no me siento preparada para que estos conocidos vieran mi cuerpo, a lo mejor harían fotos mías y las esparcirían por la escuela como lo decía Bella.

─ ¿En serio no puedo hacer otra cosa? ─ Todos negaron. ─ ¡Es mi hermano!

─ ¡Hermanastro! ─ Me corrigieron todos, como yo lo hacía, ya que por ser la tercera Govender en la escuela había ganado algo de "fama" y cada que me preguntaban respondía que él y yo solo compartíamos apellido.

─ ¿En serio quieren que lo bese? ─ Volví a preguntar solo para ganar tiempo.

─ Sí. ─ Respondió otro amigo de ellos. ─ No son hermanos de sangre, prácticamente ni se conocen. Tampoco se gustan, es un simple reto.

Me levanté lentamente. Mentalizándome de que es solo un juego, no debe pasar algo más allá que un besito.

Ambos quedamos en el centro de todos. Él se levantó acercándose a mí, noté la gran diferencia de estaturas. Tragué saliva y relamí mis labios mientras veía sus ojos verdes. Que a esta distancia eran muy lindos.

Él me tomó de la cintura pegándome hacia él, pasó la mano por detrás de mi cuello y yo toqué su cara con suavidad. Al final sí era mojigata, este sería mi primer beso en diecisiete años.

Niccolo fue quien dio el primer paso. Al principio resistí colocando mi mano en su pecho, pero sus labios me sumergieron en él, ya no le hacía presión sino que comenzaba a atraerlo a mí. Sus labios se sentían suaves y carnosos, se sentía tan bien cuando chupaba mi labio inferior mientras hacía presión en mi cintura.

Esto se sentía tan bien...

─ Creo que es suficiente. ─ Habló de mala gana Virginia.

Miré nuevamente a Niccolo. No sé en qué momento cerré mis ojos, pero eso había hecho que cayera nuevamente en la realidad y darme cuenta de que había besado a alguien que para los ojos del mundo era mi hermano.

Ambos volvimos a nuestros puestos y siguieron las rondas, noté cómo Niccolo me veía de vez en cuando pero yo no hice caso. Lo único que pasaba por mi cabeza era que esto era un delito ante la ley y que mi madre estaría decepcionada de mí.

El sofoco volvió, pero esta vez fue más fuerte, haciendo que por sí sola mis pies tomaran el mando saliendo de la puerta. Necesitaba aire.

🦖 || NARRA NICCOLO GOVENDER

El beso me había causado cierta emoción inquietante, no porque Virginia se hubiera molestado conmigo, sino que Emma siguiera sintiéndose incomoda con nosotros.