Hay algo a lo que Gabriel comienza apenas a prestar atención, y es al hecho de que Beelzebub parece siempre estar muy bien arreglado para un demonio, su cabello siempre está cepillado incluso cuando luce como un montón de capas desordenadas y su ropa luce limpia y siempre va planchada, ¿es que acaso hacía todo eso por él?, porque se supone que los demonios no están preocupados por su apariencia o por la forma en que huelen, y Beelzebub hasta se bañaba.
Nunca hablaban sobre eso, pero Beelzebub despertaba completamente desordenado a su lado y un momento después ya estaba limpio, fresco y hasta maquillado.Gabriel lo miró, la tinta negra del delineado en su rostro, cayendo de sus ojos de una forma que no vio antes, y que aun así, hacía que luciera encantador.
—¿Por qué haces esto? —preguntó tocando con la yema de un dedo sobre las líneas que su delineador dibujaba.
—¿No te gusta?
—Me gusta —dijo —pero es muy bonito para ser un demonio.
—Tal vez quiero ser bonito para ti.
Gabriel le sonrió: —Siempre eres bonito para mí, Bee, no importa como te veas o qué lleves puesto.
—Quiero llevar este maquillaje —admitió —me gusta como me hace ver.
Gabriel continuó acariciando las líneas y en algún punto Beelzebub había cerrado sus ojos, la sensación era mejor así, porque no pensaba ni se ocupaba en otra cosa más que en disfrutar de las pequeñas caricias en su cara; y luego, los dedos que usaba fueron reemplazados por labios, y Beelzebub se deleitó con los besos suaves que él le dio.
—Eres lo más bonito de todas las cosas que son mías.
Beelzebub abrió los ojos en ese instante, eso había sido tan arrogante de su parte, y lo miró un rato como esperando que él retrocediera, pero tal como supuso, él no hizo algo como eso.
—¿Tuyo?, no te pertenezco, Gabriel.
—¿Estás seguro? —peguntó metiendo las manos dentro de su blusa y sonrió cuando él había suspirado ante el toque. —Pregunté si estás seguro.
—Me reservaré mi derecho a no responder, arcángel.
El rió solo un poco y lo tomó con cariño del rostro para poder besarlo, Beelzebub podía decir lo que quisiera o preferir no hablar, pero Gabriel sabía que era tan completamente suyo, así como él mismo le pertenecía a ese demonio. Y simplemente acaban abrazados, con Beelzebub apretándose contra su pecho y él acariciando sobre su espalda con demasiada facilidad; "no hay una sola cosa de ti que no me guste", Gabriel le dice, y hace que Beelzebub suspire entre sus brazos deseando mucho más.
—Te amo —Gabriel le dice —y me haces feliz cada vez que demuestras que eres mío.
—¿Y tú, Gabriel?
—Tuyo, mi amor.
"Mío", Beelzebub se repite, le gusta como eso suena, y Gabriel sonríe mucho por la manera en que él se abraza con fuerza a su espalda, le parece tan maravillosa como encantadora la forma en que su cuerpo pequeño se adapta al suyo con tanta facilidad, y besa su sobre cabello mientras él lo quiere abrazar más fuerte, si fuese por Gabriel, Beelzebub podía fundirse en él si eso quería.
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Ineffable Bureaucracy / Flufftober
FanficGabriel ya no puede recuperar sus memorias, Beelzebub sabe que no existe otra cosa que pueda hacer más que enamorar a su ángel de nuevo. Posiblemente no suceda tan pronto como el lord de las moscas desea, pero necesita paciencia y un montón de dulce...