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Los días habían pasado entre pequeños encuentros y salidas a escondidas entre Hyunjin y Felix quienes se estaban conociendo poco a poco, habían decidido mantener un perfil bajo y no hablarse en la escuela a excepción del receso dónde ambos subían a la azotea para pasar el rato, aquel lugar se había convertido en su refugio. Acerca de la relación con Kiara, Hyunjin le había prometido a Felix que terminaría con ella pronto solo necesitaba buscar un momento adecuado para hablar con sus padres, el pecoso lo comprendió y accedió a esperar por ese momento.

—¿En qué tanto piensas?—Yeji miró con curiosidad a su hermano mientras se dirigía a la nevera para sacar un poco de jugo y beberlo, hacía rato que veía al rubio distraído y un poco fuera de sí.

—¿A qué te refieres?—respondió Hyunjin mientras desviaba su mirada, los pensamientos lo estaban matando aún no sabía cómo reaccionaría sus padres ante lo que iba a decirles, temía que todo se repitiera.

—Vamos Hyunjin eres mi hermano, parece como si supieras que el fin del mundo está cerca y no pudieras decirlo—lo miró con una ceja alzada—¿Qué sucede?—insistió y el rubio mordisqueo su labio inferior—¿Es por Yongbook?—aquellas palabras hicieron que Hyunjin mirará a su hermana con cierto temor—Escucha sea cual sea tu decisión te apoyaré—murmuró Yeji regalándole una sonrisa.

—No se de que hablas—se hizo el desentendido haciendo reír a su hermana.

—Los vi hace días, él y tú—susurro y después hizo el sonido de un beso y Hyunjin abrió sus ojos con sorpresa—Tienes excelente gusto no puedo negarlo—siguió hablando notando como las mejillas de Hyunjin tomaban un tono rojizo.

—¡Yeji!—chillo haciéndola reír.

—Incluso Niki lo sabe Hyunjin, Yongbok se la pasa aquí todos los días es un milagro que mamá no sospeche nada—se encogió de hombros—Escucha si eso es lo que te esta atormentando estos días quiero decirte que tienes mi apoyo antes no pude apoyarte pero ahora puedo y lo haré, ¿de acuerdo?—estiró su mano dándole un apretón a Hyunjin en el brazo—Yongbok es un chico genial, dejando de un lado lo bonito que es, el chico es una persona adorable nadie podría odiarlo, es todo lo que te mereces—sonrió la castaña y aquellas palabras le quitaron un gran peso de encima a Hyunjin.

Que Yeji le mostrará su apoyo le había aligerado la carga de pensamientos que tenía.

—Señorita Yeji—una mujer del personal lo interrumpió llamando a Yeji mientras entraba con una gran ramo de rosas—Llegó esto a su nombre—Yeji sonrió y corrió hasta ellas agradeciéndole.

—Woah, ¿Sales con alguien?—inquirió Hyunjin curioso y Yeji lo vio frunciendo su ceño.

—¿Es enserio?—elevó ambas cejas la joven—Le comes la boca a diario y, ¿no sabes que hoy es su cumpleaños?—lo miro indignada y Hyunjin la miro con sorpresa.

—¿¡Hoy es el cumpleaños de Yongbok!?—chillo sorprendido entrando en desesperación, Yongbok no se lo había mencionado—Mierda, ¿qué se supone que haga?—se levanto de su lugar con la intención de salir de ahí.

—Si te sirve de algo hoy tengo una sesión programada con él y Somi, terminarán a las seis aún tienes tiempo de preparar algo—lo miro mal—¿Enserio que hacen? No me digas que su relación es solo sex...—Yeji no terminó su oración porque Hyunjin le tapo la boca.

—¡Jesús Yeji, claro que no!—elevo su voz mirándola como si estuviera loca mientras está reía bajo la mano de su hermano quién pensaba en que hacer para Felix—No digas cosas como esas, cuida dónde y con quién lo dices—le reprendió y esta solo rodo los ojos.

—Ya está bien ahora aléjate me asfixias—lo empujo lejos de ella mientras Hyunjin pasaba una de sus manos por su cuello notablemente avergonzado.

—¿Dónde será la sesión?—preguntó el rubio mientras Yeji acomodaba el ramo entre sus manos.

—No hemos decidido, queremos algo al aire libre—respondió y Hyunjin se lo pensó.

—La villa Hwang—murmuró Hyunjin—La villa de nuestros padres—enfatizó y Yeji sonrió pensando en el lugar, era hermoso—En lo que ustedes toman las fotos yo podría hacer, ¿una cena al aire libre?—dijo no muy convencido—¿Crees que eso sea suficiente?—miró a su hermana que tenía una peculiar sonrisa.

—Con un poco de acción tal vez sea más que perfecta—hizo un movimiento con sus cejas riendo al ver la reacción de Hyunjin.

—¡Enserio detente con eso!—elevo su voz mirándola mal.

—Esta bien—dijo tratando de detener su risa—Me parece romántico y bonito, la villa es genial creo que estaría bien siempre y cuando tu no cocines—asintió—Me encargaré de llevar a Yongbok hasta ahí tu has lo demás—dijo y Hyunjin le regalo una sonrisa.

—Gracias—se acercó a ella dándole un pequeño abrazo que la hizo reír, había extrañado tanto a Hyunjin.

—Como sea me tengo que ir—murmuró la joven viendo su reloj—Ah y Hyunjin—lo llamó mientras este le ponía toda la atención—Sin globito no hay fiesta solo recuérdalo—le guiño un ojo y se apresuró a salir de ahí justo cuando Hyunjin había tomado el tubo de las servilletas para lanzárselo.

—Te odio—grito y como respuesta solo escucho una carcajada provenir de su hermana.

Better Than RevengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora