Capítulo 11

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ꟷAsí que fuiste tú la que le enseño a hacer las figuras esas ꟷme pregunta Lalisa con una ceja levantada mientras Woo Jin corre por otro helado a la barra.

Trago saliva ¿Por qué lo hacía ver como un crimen? ꟷSi, soy su maestra de arte. Es parte de su desarrollo... Motriz y creativo...

Respondo intentando mantener un todo cordial y neutro, pero rehuyo mi mirada fingiendo poner atención a cualquier cosa a nuestro alrededor.

De todas manera, el lugar era precioso. Ambientado en 1950, con mesas y sillas de la época e incluso el personal vestido de esa forma. Era como un salto en el tiempo.

Salto que de ser posible ya hubiera dado solo para evitar los incómodos silencios que de vez en cuando nos asaltaban a ambas. Pero sobretodo a mi que no tenía el valor de iniciar nuevas conversaciones porque ¿De qué íbamos a hablar?

Estaba claro que todo en nosotras era distinto. En su círculo seguramente ella hablaba de números, empresas y compras millonarias y yo... de lo único que podía hablarle era de pintura y papel cortado.

Y ni eso.

Las dos apenas habíamos cruzado palabra directamente, pero Woonie había mencionado lo mucho que le gustaba hacer figuras de papel desde que se las había enseñado en clase y solo eso bastó para que me mirara como si hubiera cometido el peor pecado del mundo.

ꟷEntonces también fuiste tú la que le dijo que me parecía a un sapo ꟷasume y yo niego con la cabeza de inmediato.

ꟷPor supuesto que no. Jamás haría eso ꟷme defiendo.

ꟷPues él dijo que tenía ojos de sapo y que su maestra le había enseñado a hacerlo en papel.

Abro la boca para defenderme pero lo que me sale de la boca apenas lo espero ꟷ Él dijo que su tía tenía los ojos tan grandes, lindos y brillantes como las ranitas. Cosa que es bastante cierto por cierto, pero yo jamás...

ꟷAsí que crees que tengo ojos grandes, lindos y brillantes ꟷcomenta asintiendo mientras su espalda se inclina hacia atrás en su lugar.

Estudiándome con desdén...

ꟷSolo repito lo que dijo Woonie ꟷtrato de responder diplomáticamente.

ꟷEntonces no lo crees ꟷasume cruzándose de brazos y entro en pánico.

Busco al único que podía salvarme de esto y encuentro al pequeño viendo feliz como le servían el helado girandolo en la máquina antigua, mientras sostenía la correa de Kuma

ꟷTengo hambre. ¿Será que aquí venden otra cosa además de helado? ꟷcambio de tema sintiéndome como Bambi aprendiendo a caminar.

El atisbo de una sonrisa burlona se forma en su rostro, pero luego levanta la mano y llama a un mozo.

ꟷpor favor, la cuenta ꟷle pide y cuando abro la boca para protestar, se me adelantaꟷ aquí no hay nada de comer son solo dulces. Los llevaré a un lugar a un par de calles de aquí ¿La comida coreana te funciona?

ꟷobvio, soy coreana ꟷpienso en voz alta.

ꟷbien. Entonces es perfecto ꟷMe guiña un ojo y se levanta para ir por Woonie.

¿Ok?

¿Qué había sido eso?

La veo a lo lejos mientras paga la cuenta y regresa con Woo Jin de la mano.  El pequeño iba con su segundo helado en un barquillo de galleta, bastante feliz.

Intento preguntar cuánto había sido lo mío para pagarle, pero ella me mira extrañada. Como si lo que estuviera saliendo de mi boca no fuera más que una incoherencia y sigue caminando. Pienso que iremos hasta el estacionamiento, pero ella sigue de frente hacia la calle.

OH MY ROOMATE! | JENLISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora