Capítulo 21

1.6K 235 31
                                    

Pov. Jennie.

Toda la cena estuve distraída, viendo a Tae hablar, pero sinceramente no escuchaba ni entendía nada.

Mi cuerpo estaba presente, pero mi mente no.

En algún punto supongo que se dió cuenta, porque me preguntó si estaba bien y yo asentí disculpándome solo diciendo que estaba cansada. Después de todo no era una mentira.

El día se había alargado mucho y si no estaba en mi cama hasta ahora era porque no quería llegar al departamento y ver a la estúpida socia de Lalisa. O peor, someterme los absurdos reclamos tenía para darme.

ꟷ¿Vamos? ꟷme dice Taehyung atrayendo mi atención después de pagar la cuenta y asiento agradeciendo por la comida.

La noche estaba fría y me estremezco un poco. Había salido molesta y tan rápido que no había tomado precauciones, y me había venido con ropa demasiado ligera.

De pronto siento algo tibio que me cubre desde mis hombros hasta mis rodillas, y Tae me sonríe apareciendo por mi costado.

Me había puesto su propia chaqueta ꟷEl invierno está cerca. No puedo dejar que te resfríes.

ꟷGracias ꟷrespondo de verdad y empezamos a caminar hasta el estacionamiento.

Su Subaru azul no era tan grande ni tan bonito como el Jeep de Lisa, pero tampoco estaba mal. Lo único que no lograba agradarme del todo era que el ambiente estaba impregnado con su perfume, demasiado fuerte y dulce para mi gusto. Como almizcle con otra cosa.

Nada que ver con el aroma suave y delicado a rosas y sandalo que desprendía la piel de la morena a la que le encanta atormentarme.

ꟷbien ¿A dónde te llevo? ꟷpregunta y no puedo evitar un sobresalto

Mierda ¿En qué estás pensando Jennie?

ꟷAl metro por favor ꟷle pido abriendo un poco la ventana en el lado del copiloto.

ꟷ¿Al metro? ꟷme pregunta confundido y yo asientoꟷ pero puedo llevarte a tu casa

ꟷNo es necesario, tranquilo.

Me mira enarcando un ceja algo dolido ꟷsi me sigues rechazando así, voy a pensar que no quieres que sepa dónde vives.

Abro la boca nerviosa pero el suelta una carcajada y me doy cuenta que está bromeando. Aún así, no podía negar que tenía razón. Yo no quería que él supiera donde vivo, menos con quién.

Había políticas en la escuela y aunque Lisa no era precisamente una madre de familia, si era bastante cercana a uno de mis estudiantes. Prueba de ello lo que pasó en la tarde.

ꟷNo es eso, es solo que debo pasar a comprar algunas cosas de camino, para mis clases de la semana ꟷintento explicar torpemente, pero él me cree y asiente.

ꟷEntiendo. Guíame la tienda y te acompaño ꟷresponde encendiendo el motor y me resigno.

Lo guío hacia la tienda de materiales y aprovecho para comprar más acrílicos y pinceles, que no necesitaba pero tampoco estaban de más. Tae caminaba mirando impresionado todos los elementos y materiales como un niño pequeño en un lugar lleno de juguetes nuevos y desconocidos.

Menos de una hora después, estamos de nuevo en el carro y él me mira con la espectativa de darle mi dirección, cosa en la que obviamente no iba a ceder por su seguridad y la mía.

Sabía que él era buena persona, pero si se le escapaba que estaba compartiendo departamento con la tía de uno de mis alumnos, podía tener problemas en el trabajo. Y peor aún, sería que Lisa lo viera fuera del edificio ya que según vi en la tarde, aún tenía ganas de arrancarle la cabeza, como la maldita reina de corazones que es.

OH MY ROOMATE! | JENLISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora