Capítulo 52

1.4K 151 10
                                    

Pov. Lisa

Ver a Clara parada ahi, con sus ojos fijos en mi, me tomó totalmente por sorpresa. Ella era alguien con quien solía salir de fiesta hace mucho, de verdad mucho tiempo, pero se puso intensa y decidí mejor dejar eso por la paz.

Me puse nerviosa. Más que nada porque ella acostumbraba a hacer comentarios sin filtro y no quería incomodar a Jennie. Aunque debía reconocer que ver sus expresiones intentando disimular su molestia era muy divertido.

Lo que jamás se me ocurrió fue la respuesta que le dió en un arrebato, cuando Clara se puso intensa de nuevo, intentandome llevar con ella aunque ya le había dicho que no.

Con su postura firme, sus ojos llenos de fuego y su voz que obviamente no admitía réplica, dijo expresamente que era MI esposa.

Era una mentira completa, porque a este punto ni siquiera me había dejado dormir en su departamento. Pero no podia evitar sentir un cálido sentimiento de felicidad al escuchar esas palabras.

Así que cuanto la chica me preguntó si me había casado. Obviamente ni por un segundo se cruzó por mi mente desmentirla. Más que eso, aprovecharía esta grandiosa oportunidad que me había dado para de una vez por todas acabar con esa pequeñísima brecha que aún teníamos que resolver.

ꟷAsí que... esposa mía... ꟷempiezo a hablar con mucha emoción por dentro, apenas Clara desaparece indignadaꟷ ¿Cuándo pensabas decirme que nos casamos?

Jennie me pone los ojos en blanco

Suelto una risita sin poderlo evitar y ella suspira.

Tomo una de sus manos sobre la mesa y la miro a los ojos, me encantó ver esa postura en ella. No sabía si habían sido celos o solo la molestia porque la otra estaba presionando, pero si ya de por sí, se veía muy sexy hoy, con eso... Me tenía a sus pies...

ꟷGracias por hacer eso ꟷdigo muy bajo y beso su muñeca con cariñoꟷ yo no sabía cómo librarme de ella.

ꟷ¿Ah sí? No me había dado cuenta ꟷdice con sarcasmo, desviando la mirada y sé que aún está irritada

Me muerdo los labios intentando no sonreír, pero es inevitable. Se veía tan adorable con los labios y el ceño fruncidos. Sus mejillas se veían aún más abultadas.

ꟷAmor... ¿Estás celosa? ꟷpregunto juguetonamente y ella me da una mirada asesina.

ꟷSí y qué. Pirqui ni mi llimiste... estúpida ꟷempieza a murmurar por lo bajo y no puedo aguantar más, me levanto de la silla y me acerco para envolverla en mis brazos con fuerza mientras sonrío de oreja a oreja.

Estaba pletórica. La emoción que me recorría por dentro iba más allá de cualquier sentimiento.

ꟷAmo. Qué te pongas así ꟷconfieso sincera y sé que me está poniendo los ojos en blanco otra vez, pero no me importaꟷ me encanta.

ꟷpara ꟷme pide intentando safarse de mi, pero no lo permitoꟷ la gente nos está mirando.

ꟷ¿Y qué? No me importa la gente. Además... ꟷbusco sus ojos desconfiados y le sonrío con maliciaꟷ... Eres mi esposa ¿Recuerdas?

ꟷDios no ꟷse queja mirándome casi divertidaꟷ ¿Y ahora quién te baja de esa nube?

ꟷNadie ꟷrespondo firme y ella niega con la cabeza.

Cuando un mozo por fin nos guía hacia el salón, nos comenta que ya habían personas esperando adentro. Jennie me mira con algo de angustia, pero tomo su cintura y nos guío.

Las miradas curiosas no se hicieron esperar. Ahí estaba todo mi equipo en pleno. Mi asistente, que ahora había asumido un cargo más importante como coordinador general y las cuatro cabezas de los equipos con los que me había estado apoyando en el proceso de transición post Mariela. También estaban los líderes de los proyectos que habían ganado la subvención para sus startups. Tres en total.

OH MY ROOMATE! | JENLISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora