Un gruñido escapa de los labios de Adora al sentir como Catra se trata de alejar de su cuerpo, la cazadora se queda en calma por unos minutos pues casi olvidaba esa necesidad básica de tener a su pareja cerca en época de celo.
-Adora necesito ir a orinar- exclama Catra acariciando el pómulo derecho de la rubia.
-Pero regresa- pide la mujer lobo soltando la cintura de la chica –No quiero que te alejes por mucho tiempo de mí, quiero tenerte a mi lado todo lo que pueda.
(...)
Adora trata de mantenerse en control, el calor en su cuerpo es un infierno pero el estar al lado de Catra es ciertamente reconfortante en más de un aspecto, es cómodo, cálido y sobre todo seguro.
-¿Quien fue tu primer amor?- cuestiona Adora tratando de alejar su mente del calor que la quema -¿Fue bueno?
-Nunca he tenido un primer amor- confiesa Catra provocando una felicidad rápida en el corazón de la mujer lobo.
-Quiero ser tu primer todo- susurra la rubia dejando que sus manos entren debajo de la playera de la castaña –Quiero que me quieras tanto que no te puedas alejar de mí.
Catra trata de decir algo pero es rápidamente callada por los labios de Adora quien ahora está encima de la castaña, ambas respiraciones son demasiado rápidas, el ambiente es caliente por culpa del cuerpo de Adora.
-Te quiero, te quiero, te quiero- repite Adora dejando pequeños besos húmedos a lo largo del cuello de la castaña –Joder te quiero tanto que no te lo imaginas.
-Espera- gime Catra tratando de alejar el cuerpo de la rubia –Por favor espera.
La mujer lobo se aleja con problemas de la chica, su rostro está lleno del color carmín, la necesidad se puede ver a través de los brillantes orbes azules y es más que claro que pelea con su lobo interior por no saltar encima de la castaña.
-Tengo miedo- confiesa Catra con el rostro ruborizado –Jamás pensé que tendría sexo con alguien que se transforma en lobo, en primera jamás pensé que conocería a alguno vivo.
-Escúchame- pide Adora tomando las mejillas de la chica entre sus manos y dejando pequeños besos sobre sus labios –No te voy a lastimar, no voy a hacer nada que no quieras Catra, me importas más de lo que me importa cualquier otra persona en el mundo.
-Porque tienes que ser tan malditamente adorable- susurra la castaña antes de besar a la mujer lobo quien acepta ese gesto con gran gusto –Tengamos sexo.
Inmediatamente Adora se separa de la cazadora quien no puede evitar soltar un jadeo ante la falta de contacto con la rubia. Catra está apunto de protestar cuando Adora se quita la playera quedando en sostén deportivo.
-No tendremos sexo Catra- comenta la rubia pasando sus manos a través de la tela suave del camisón de la castaña –Porque yo te hare el amor- asegura con la voz ronca provocando que las piernas de Catra se derritan.
El camisón de la castaña desaparece poco a poco, las caricias se vuelven suaves y en ocasiones fuertes provocando que las manos de Adora se graben en el cuerpo de Catra como una prueba de que por esa noche le pertenece únicamente a la rubia.
La manos de Catra se entierran en la espalda de Adora, rasguñando, abriendo la piel y dejando que pequeños hilos de sangres broten, pero eso no le interesa a Adora quien esta deleitada por como la cazadora curva su espalda con cada beso, cada caricia y cada pequeños toque dentro de ella.
El sudor en la piel canela provoca que Adora pierda el control, el ver como sus caricias provocan un accionar tan seductor en el cuerpo de la castaña es tan adictivo que está segura que después de esa noche no podrá estar con ninguna otra persona que no sea Catra. Es como si sus cuerpos encontrar un vaivén perfecto, un estado superior entre la excitación, el placer y el amor que podría llevarlas a la locura si se lo propusieran.
-Más lento- gime Catra sobre los labios de Adora –Tienes que calmarte.
Adora niega con la cabeza dejando que sus dedos exploren la zona intima de Catra, entrando y saliendo, ocasionando tantos gemidos que a Catra le preocupa ser escuchada por alguna otra persona fuera de esa habitación. Pero al contrario Adora disfruta la idea de que todo el mundo se entere de que Catra es suya. Que por fin es suya.
(...)
En ocasiones era curiosos como todos los humanos de la manada podían coincidir en el mismo lugar, es decir anoche no habían dormido nada y necesitaban desesperadamente un bocadillo para recuperar un poco de energía.
-Entonces es mi idea o todos tuvimos la misma noche- exclama con diversión Sea Hawk abriendo una alacena y sacando un cereal –Les juro que pensé que moriría, Mermista fue tan ruda que siento que estoy lleno de marcas.
-No eres el único- sentencia Catra recostada en la mesa –Adora no se cansaba con nada, sabes cuantas mordidas tengo en todo el cuerpo, creo que mi cintura es morada ahora.
-El lado positivo es que tenemos salud- la voz de Bow suena cansada mientras se recarga en la fría superficie del refrigerador –Ustedes han notado que ellas prácticamente queman, su temperatura sube demasiado, me sorprende que no mueran por ello.
-A mí me sorprende que tengan tanta energía- se queja Scorpia recostada en el sofá del comedor –Perfuma parece compresiva pero casi me asesina anoche, mi espalda arde de tantos rasguños.
-Al menos tú no tienes que liderar con un alfa- replica Catra con cansancio –Hace unas horas no podía pararme por el dolor en las piernas.
Todos se quedan en silencio desayunando, rogando porque sus respectivas parejas no despierten y hagan un caos por no encontrarlos a su lado.
-Esa es una cicatriz fea- exclama Scorpia señalando el cuello de Sea Hawk.
-Esto- señala el chico con tranquilidad –Es la mordida de Mermista, cuando te "casas" con una persona mitad lobo esta mordida es algo como un lazo que los atara por siempre.
Bow asiente para bajar un poco su camisa dejando ver la mordida en su cuello junto con un montón de chupetones, Catra se pone de pie de golpe sorprendiendo a todos, levanta la playera holgada que trae puesta y muestra su abdomen lleno de marcas.
-¿Están igual?- cuestiona mirando a sus amigos.
Sea Hawk imita la acción siendo seguido por Scorpia y Bow, parece ser que los abdómenes de todos están llenos de caricias más fuertes de lo que su piel puede soportar, es en ese instante que escuchan la puerta de la cocina ser abierta por una mujer de cabello azabache con un largo vestido que al verlos suelte un gemido de terror.
-¡O por dios!- grita Casta tapando su rostro -¡Mis niños quien los golpeo de esa forma tan horrible!
-¿Tía?- cuestiona Glimmer entrando a la cocina con el cabello hecho un desastre.
-¡Glimmer!- grita la mujer con seriedad -¡Llama a todas tus amigas golpeadoras ahora mismo!- ordena logrando que Glimmer asienta y vaya a cumplir su encomienda.
Los chicos bajan rápidamente sus playeras pero Casta los obliga a caminar a la sala y sentarse en gran sofá esperando a que bajen sus parejas del segundo piso de la mansión.
-¡No puedo creer que ellas no entiendan que ustedes son humanos!- sentencia con seriedad la mujer -¡Pueden lastimarlos seriamente! ¡Necesitan aprender bilogía básica esas idiotas!
Con cariño A Real Hero
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Wolf and Hunter || Catradora
FanfictionEs curioso cómo funcionan las cosas que no recordamos y las que no podemos olvidar. Adora no recordaba la última vez que salió de su manada a pesar de ser la alfa, la persona que debía mantener a salvo a todos los miembros de esta. Catra no olvidaba...