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(...)

Está sentado sobre un colorido pupitre color azul pastel, mientras dibuja con acuarelas un lindo conejito comiendo una zanahoria. Es entonces que el azabache reacciona del sitio donde está.

¿Cómo es que podía verse así mismo en el jardín de niños?

Se aproximó hacia su supuesto él con intenciones de tocarlo, pero algo le detuvo.

ㅡ ¡Despierta, lindo! ㅡexclamó la profesora de aquella aula, juntando sus palmas en aplausos fuertes.

Gyuvin en seguida regresó la mirada hacia la profesora, viendo que reprendía a un niño pálido que frotaba sus ojos con fatiga, podía ver su expresión de sueño total.

ㅡ Lo siento, señorita Kang. ㅡse disculpó y regresó la mirada hacia el dibujo que estaba a medio terminar.

Vió a la profesora refunfuñar y dejarlo solo, el chico que parecía ser invisible ante todos pudo ver que su yo pequeño ni siquiera se inmutó. Solo siguió en lo suyo.

Curioso, se encaminó hacia el niño de antes, muy bajito, pelinegro y de tez pálida.

Sus ojos se ampliaron en demasia al ver el dibujo a medio terminar. Era una caricatura animada, tal cual como un manhwa, de su yo pequeño.

¿Un niño de apenas cinco años podía dibujar así? Gyuvin se sorprendió, pero... ¿Quién er...?

[ D Í A 002 ]


ㅡ ¡Gyuvin! ¡Despierta! ¡Arriba! ¡Él sol ya salió! ㅡla escandalosa voz de su madre le hizo despertar de un salto. Su sueño pasado era ahora sólo una sensación extraña en su estómago. Se quedó mirando a la nada por varios segundos intentando recordar, pero sólo le quedaba esa extraña familiaridad.

ㅡ Deja de vagar y alistate, se te hará tarde. ㅡadvirtió la mujer antes de salir, no sin antes abrir sus cortinas. El menor cubrió sus ojos por inercia.

Gyuvin suspiró, era mejor no pensar en ello.




— ♥︎ —



ㅡ Luces sinceramente extraño hoy. ㅡmurmuró su amigo al verlo. No era normal que su mirada se perdiera en la nada mientras revolvía lentamente la salsa de tomate que cubría sus papas. Oh, y tampoco que ignorara la malteada de fresa que no recuerda en qué momento llegó a su mesa.

Ricky, tampoco iba a decir en voz alta que él la había comprado. Solamente aprovechó su distracción y se la dió.

Gyuvin había estado así incluso después de recibir el regalo por parte del chico misterioso. Quien pese a hacerlo sonreír, no pudo retener sus pensamientos.

¿Qué había soñado? ¿Por tenía que olvidarlo? ¿Y por qué le importaba?

ㅡ No es nada. ㅡnegó rápidamente, bebiendo finalmente de la malteada. Fresa, sonrió. Estaba deliciosa.

ㅡ A qué luces raro, ¿no es así Shen? ㅡinterrogó el mayor hacia el chico que se mantenía en silencio comiendo. Claro que Ricky lo había notado raro, pero estaba de más preguntar algo.

El rubio alzó la mirada, topándose con los ojos del azabache. Ambos apartaron la mirada con incomodidad. Gyuvin odiaba la sensación de tener que mirarle, pues su interior temblaba con algo que jamás entendió.

Asco, eso debía ser.

ㅡ La rata es rara de por sí. ㅡmurmuró desinteresado, comiendo sus fideos.

ㅡ Idiota. ㅡbufó el menor.

ㅡ Presuntuoso. ㅡrespondió.

ㅡ Nerd de closet.

Love Gummy - SHIMKONGZ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora