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Según los noticiero estatales, el invierno iniciaría dentro de dos semanas. Sin embargo el armario del azabache estaba en esa estación desde hace días, cuando los abrigos dejaron de ocupar el fondo para estar al alcance de Gyuvin. No odiaba el invierno, más bien, odiaba sentirse un enorme rollo de sushi entre la felpa de su abrigo. Incluso la bufanda le parecía asfixiante, pero sentía que de no llevarla puesta terminaría con hipotermia.

Apenas llegó a su casillero abandonó su esponjoso abrigo, quedando únicamente en un suéter de cuello alto y su bufanda tejida en tonalidades marrones. Últimamente sus ánimos arrastraban por el suelo, así que sintiendo sus energías absorbidas por el cercano invierno, se dirigió hacia su aula para su primer clase. Milagrosamente iba a tiempo, por lo que no se molestó en correr.

Habían pasado dos semanas desde su "cita" con Zhanghao, por no decir "La peor salida de su vida". Semanas en las cuales no recibió ninguna nota, lo que le llevaba a deducir una cosa... Hao sí era el dueño de ellas. Lo que lo llevaba a otra, depresión de juguete post-decepción amorosa.

En su salón de clases todos esperaban a que el profesor llegase, algunos frotando sus manos para conseguir calor y otros con simples camisas de manga larga que sonreían como si fuese verano. Gyuvin bufó mientras avanzaba a su pupitre adornado con una bolsita de gominolas...
Espera, ¿ositos de goma?

Disimuló una carrera hasta su asiento, tomando el regalo que estaba sobre este. Temía que fuese alguna nota directa del pelirrojo. Incluso si era una disculpa, no quería que fuese él, y sabía lo terrible que era idealizar pero se había montado todo un teatro con su "admirador". Zhanghao no podía arruinar eso.

El temblor de sus manos no parecía producto del frío invernal, apenas leyó la primera línea sintió su corazón palpitar nuevamente.

❝ ¿Crees que los ojos de Zhanghao
reflejan todo lo que te hago sentir
con una simple nota?

¿Crees que un chico que
se esconde detrás de notas
te invitaría a salir así de fácil?

Tengo mis motivos para ser anónimo.❞
ㅡO4


Alivio. Eso fue lo que sintió y lo que necesitó para recargar energías en una sola fracción de segundo. Jamás había disfrutado tanto una bolsa de gomitas.

Guardó la nota dentro de sus pantalones y comió las golosinas en el transcurso de su clase.

Y se sentía contento por saber dos cosas, de las cuales estaba completamente seguro.

1) Zhanghao no era el chico de las notas, así que su amigo tenía razón.

2) Definitivamente, Zhanghao estaba lejos de ser su tipo ideal.

Cancelen eso, borrenlo. Rebobinénlo.

Nota mental: No se dejen guiar por una cara bonita.









— ♥︎ —







El alto chico de cabellos castaños no tenía un interés mínimo en la termodinámica, hidroestatica o lo que estuviese explicando su profesora de Física II. Su monótona, chillona y fatigada voz le hacían sangrar los oídos mientras a regañadientes anotaba en su libreta todas las fórmulas que usaría después en el exámen.

A Gyuvin no le importaría morir en ese momento.

¿Qué era aquel sublime llamado de los dioses que detuvieron la explicación de la horrible mujer frente al aula? Gyuvin iba a besar los zapatos de quien fuese su salvador.

ㅡ Señorita Lee, la profesora de literatura mandó llamar Kim Gyuvin y Shen Ricky a la sala de maestros. ㅡera un hermoso ángel, que parecía de un grado inferior.

¿Qué importaba? Había detenido su agonía.

El azabache ni siquiera esperó la afirmación de su profesora para salir huyendo de esas asfixiantes paredes.

¡Libertad! ¡Silencio! ¡Aire fresco!

Gyuvin estaba tan extasiado de dejar aquella molesta voz en el olvido, que su cerebro no procesó al otro individuo que también habían llamado.

ㅡ Parece que no querías estar ahí. ㅡdistinguió la voz del rubio a sus espaldas, algunas veces le asustaba reconocerle con tanta facilidad. Aunque, vamos, habían estado juntos toda su vida escolar.

¿Era lógico, no?

El menor estaba de buen humor, así que no le dió mayor importancia a su presencia.

ㅡ ¿A ti te gusta física? ㅡla incredulidad era palpable en su voz, su compañero negó sin dudarlo.

Ambos chicos emprendieron camino hacia el sitio citado, siendo Gyuvin quien seguía los pasos del que era unos centímetros más bajo. Fue hasta ese momento que se permitió pensar para qué es que le llamaban.

No había hecho nada mal, no que recordara. Hacía todas sus tareas y era silencioso en clases. Estaba seguro que era de los mejores alumnos.

ㅡ ¿Nos llamaba, señorita Kim? ㅡ Ricky se detuvo bajo el umbral de la sala de maestros, haciendo que Gyuvin regresara de sus pensamientos para mirar a su profesora favorita.

La profesora Yongsun era literalmente un sol brillante que siempre sonreía dulcemente hacia todos sus alumnos. Aunado el hecho de que sus clases eran dinámicas e interesantes, y aunque Ricky no lo admitiera, también era su clase y profesora favorita. Nadie podía odiar a Kim Yongsun.

ㅡ Oh, sí. Pasen, pasen. ㅡlos animó a tomar sitio dentro del área de descanso para docentesㅡ Supongo que ya lo saben, pero dentro de dos semanas es la demostración de los proyectos del semestre. ㅡexplicó mientras ordenaba algunos documentos sobre su escritorio y dejaba de lado su taza con café sin azúcarㅡ Puesto que son mis mejores alumnos, quería pedirles su apoyo para la presentación.

ㅡ ¿Qué debemos hacer exactamente? ㅡel azabache no se molestó en contestar, pues Ricky tomó palabra al instante.

ㅡ Deben recolectar cada uno de los trabajos leidos en clase y hacer una exposición. Será fácil, la mayoría de libros del semestre ya han sido leídos por ambos. ㅡacomodó sus gafas sobre el puente de su respingada nariz y les sonrióㅡ No es tan pesado, pero sería mejor que trabajasen en equipo para tener ambas perspectivas. ¿Me ayudarían?

Ni siquiera tuvieron que mirarse para conocer la afirmación del otro, ambos chicos asintieron.

ㅡ Por supuesto, cuente con nosotrosㅡhabló el de hebras claras, siendo apoyado por Gyuvin.

ㅡ ¡Excelente! ㅡaplaudió emocionada, sabía que podía contar con ambos. ㅡ Deben empezar a trabajar, la próxima semana veremos los detalles. ㅡlos despidió tras ofrecerles un caramelo, el cual Gyuvin aceptó sin dudar y salieron de ahí tras regalarle una reverencia.

Fue hasta ese momento, y mientras saboreaba su caramelo de cereza, que Gyuvin fue consciente que debía trabajar en un proyecto con Shen Ricky...a solas.

¿En qué se había metido?

Bueno, era escolar. Tampoco podía negarse, no podía negarle nada a esa dulce mujer. Estaba completamente seguro que por ella podría hacerse bisexual.

ㅡ ¿Cuándo iniciaremos? ㅡ Ricky cortó el hilo de sus pensamientos, notando como el azabache se sonrojaba al sentir que interrumpían sus fantasías amorosas con su profesora de literatura. Eso hizo que inconscientemente una mueca se dibujara sobre sus pequeños labios.ㅡ Podemos ir a la biblioteca después de clases para recolectar los libros e ir a mi casa...ㅡsugirió entonces, al notar lo distraído que Gyuvin estabaㅡ...digo, si quieresㅡse apresuró a agregar.

El menor canalizó sus pensamientos, tratando de considerarlo. Era la mejor opción, y no tenía una mejor. Así que, asintió.

ㅡ Claro.

¿Qué de malo podía pasar?

Love Gummy - SHIMKONGZ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora