🦁El celo de la luna Capitulo 5🦁

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La respiración era pesada y tu te encontrabas dormida entre los brazos del chico, por primera vez era él el que estaba despierto y tu dormida, te miraba dormir mientras notaba el desastre que te había convertido, tan fresco en sus recuerdos la man...

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La respiración era pesada y tu te encontrabas dormida entre los brazos del chico, por primera vez era él el que estaba despierto y tu dormida, te miraba dormir mientras notaba el desastre que te había convertido, tan fresco en sus recuerdos la manera en como lo montaste y él cómo te hizo suya, y aunque era un momento dulce, no podía evitar sentir está amargura en su boca, ya que se imaginó que esto ocurriría en circunstancias distintas, tomándose su tiempo para hacer las cosas bien y con calma, no con tantas prisas, pero con el príncipe maldito las cosas nunca pueden ser sencillas o calmadas, siempre tiene que estar siendo señalado, juzgado y en esta ocasión en particular, le querían robar lo que era suyo, a su hembra...

-Te prometo que te lo compensare herbívora- Susurro Leona acariciando tus cabellos con cariño mientras seguías hecho bolita entre sus brazos, tan cómoda con la cara pegada a su pectorales, que hasta sonreías un poco -....... Creo que lo está disfrutando- Murmuró con una sonrisita divertida, vaya conejita loca de la que se enamoró.

Leona solo se acomodo para seguir durmiendo por un rato más antes de que los sirvientes llegaron a despertarlo y prepararlo para el resto de celebraciones y reuniones del dia, o eso iba a hacer, si no fuera por que en algun lugar del palacio escuchaba tal escándalo que no lo dejaron volver a pegar el ojo... Pero no le molestaba, ya sabia de que se trataba y sonreía con felicidad maliciosa para sus adentros.

-¡¿COMO QUE ME TENGO QUE DISCULPAR?!- Gruñido Kimba enojado y dolido por la casi pelea que tuvo con Leona y la resaca de beber casi un barril completo de hidromiel.

-Sip, fue lo que ordenó su majestad el Rey Leona, le faltó al respeto ayer por atacar a su futura esposa y armar un escándalo en las celebraciones por la fundación de este nuevo reino, por eso exige una disculpa pública de su parte- Explicó Ruggie tratando mantener una cara seria en su rostro, pero se queria reir por las caras chistosas de confusión y enojo que ponía el león blanco, debía ser profesional en este momento -Pero si se niega a disculparse debería retirarse de inmediato del palacio y del reino, Leona no tolerará que lo reten en sus propios dominios-

-¡¿Y QUIEN SE CREE ESE SEGUNDO PRÍNCIPE PARA ORDENARME TAL IDIOTEZ?!- Gritó Kimba sintiéndose insultado, pero al acto se mordió la lengua y moderó su timbre de voz, ya que sentía que le taladraban la cabeza -¡Yo no hice nada malo anoche! Solo ejercí mi derecho de amo de castigar a una esclava fugitiva, en todo caso es Leona el que está en falta por meterse, él fue el que armo el escandalo en vez de ser un buen anfitrión y seguir en el banquete, más bien Leona es el que debería ofrecer disculpas-

-... ¿Es tú decisión final?- Dijo serio Ruggie -Tú eres el que entró en falta al atacar la pareja de nuestro rey, en el evento más importante de nuestro reino, cortaremos lazos con ustedes-

-¿Y qué perdemos? Su villa apenas se puede llamar reino, no creo que haya consecuencias, es más Leona tiene que regresar mi propiedad si no quiere ser él el que pierda aliados valiosos- Dijo el león blanco de manera socarrona y victorioso.

-También cortaré lazos comerciales contigo...- Dijo con tono frío el rey Farena, mirando de manera asesina a su pequeño primo maleducado, su esposa le pidió que fuera un testigo neutro en el proceso de disculpa del joven rey Kimba, pero la astuta reina sabía que su esposo no le tiene mucha paciencia a su pariente por sus continuas burlas a ella, a la muestra de prepotencia del albino Farena lo pondría en su lugar.

-Qu.. Que cosa...- Pregunto Kimba ya mirando algo consternado al león mayor, ya que el reino de farena era su mayor comerciante ... para no decir el único.

-El Reino del Oasis es el reino de mi hermano y por tanto nuestros paises tambien son hermanos también- Dijo Farena con cara tan seria que era impropia de él -Si insultas a este reino también me estas insultado a mi, no te dejaré pasar esta falta sin consecuencias-

-No puedes estar hablando en serio- Dijo el joven rey, mirando a su primo mayor.

-Si no te disculpas y compensar tu falta de respeto como es debido ante Leona y su futura esposa cortaré lazos comerciales contigo, tu decides querido primo- Agregó secamente el leon con melena de atardecer, después de lo que hablo con su esposa anoche esta era la gota que colmó el vaso de su paciencia con su pariente, Leona fue rebelde cuando era joven pero jamas llego a los extremos de irrespetuoso e irresponsabilidad que había llegado Kimba, si su tío no lo corrijo en vida, él sí lo haría.

-¡¡P.. PERO _____ ES MI ESCLAVA!!... ¡¡MI PROPIEDAD!!- Reclamó el león albino con rapidez a su primo, después de todo para sus ojos era leona quién se equivocó y era un ladrón.

-... Sabana del Atardecer no reconoce esclavos, tampoco él Oasis, en nuestros reinos solo son personas que son o fueron injustamente aprisionados por pagar una deuda pasada, gente sacada de sus hogares en contra de su voluntad o criminales que están siendo castigados por su crimen.... ____ ¿Cual es de esas tres opciones? Si tiene una deuda pasada se te puede pagar, si es una criminal su deuda ya la pago por cruzar el desierto y quedar al borde de la muerte... Pero si es una persona sacada de su hogar... Tú eres el criminal- Dijo con severidad el león mayor levantándose de la silla y arrinconando a Kimba en la pared gruñendo para hacer que bajara la cabeza -¡¡RESPONDE!!- Soltó como un rugido de León.

Kimba se quedó con la boca callada y sudando frío ante el rey mayor, no podía permitir que sospecharan de él o más bien de los que hizo su padre por él hace 14 años, no podía permitir que supieran de donde sacaron a ____, eso lo meteria en problemas serios no solo con sus familiares sino con otro reinos y tribus, ya que secuestró a alguien de una tribu sagrada, así no le quedó de otra que bajar la cabeza y tragarse su orgullo por esta vez.

-... Ofreceré disculpas al rey Leona y su futura esposa en la reunión de Estado- Dijo Kimba sin atreverse a levantar la mirada, esperando que con esa respuesta ya calmar a Farena, pero cara reflejaba nervios, pero no por el león mayor ante él

-... Tu silencio me preocupa primo, más por que te disculparas yo no indagaré más en esto, pero también espero que compenses tu idiotez y cobardía de atacar a la hembra de Leona como es debido- Dijo Farena serio ya dando dos pasos para atrás dejándolo respirar.

-Asi lo hare rey Farena- Respondió aun nervioso el albino, pero ya sentía algo de calma al saber no investigaran mas a fondo

-Bien- miro a Ruggie y sonriendo como siempre dijo -Espero que puedas avisarle a mi hermano sobre esto, y si hay un problema pueden pedir mi ayuda nuevamente- Dijo mientras se retiraba como si nada hubiera pasado y Ruggie solo soltó una característica risa de hiena, esta reunión del Estado será única.

Sin embargo mientras la divertida hiena caminaba por los pasillos del palacio para buscar a su rey, se quedó meditando como Kimba pasó de ser un león furioso a un gatito asustado cuando Farena preguntó la razón por la que ____ es esclava, es la misma cara que ponen los ladrones cuando son agarrados con las manos en la masa, tal vez debería comentárselo a Leona, esto podría ser de provecho en el futuro.

Continuará...

No quiero al héroe, quiero al villanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora