En el Reino del Páramo, el actual rey estaba agonizando en cama, no importa lo que hicieran los doctores, este Stefan estaba muriendo, ya que su corazón no soporto su último ataque de ira, el órgano vital del monarca fallaria en cualquier momento, pero este se aferraba a la vida por que tenía unas últimas palabras para su hijo.
-S.. Ste... Fan...- Llamó débilmente al rey respirando con dificultad y extendiendo la mano buscado a su hijo
-Si... Aquí estoy padre...- Respondió el príncipe en tono serio tomando la mano de su padre
-Hijo... Serás rey antes del mediodía... Y como él rey que serás no puedes dejarte vencer... Por una vulgar hada...- Dijo el moribundo rey tratando de hablar con claridad pese al dolor de su pecho -Hace muchas generaciones... El primer rey Stefan del Páramo venció a la primera Draconia... Gracias a esa victoria nuestro país es próspero y poderoso... Pero no lo será por siempre-
-¿Qué quieres decir padre?- Pregunto Stefan muy confundido, mientras que Tristan, que estaba a su lado para darle apoyo moral, se pone bastante
-El poder mágico de nuestro reino se está perdiendo... Cada generación nacen menos magos... Nuestro propio linaje está en peligro, yo nunca tuve magia, solo fingí tenerla para mantener a raya a nuestros enemigos, tu abuelo y bisabuelo tampoco lo tuvieron... Gracias al cielo tú heredaste la magia de tu madre- Esa declaración del muribundo rey dejó muy sorprendido a Stefan, pero el resto de ministros y consejeros presentes en la habitación ya lo sabían.
-... ¿Por eso arreglaste el matrimonio con la princesa _____ de la Pradera? Porque ella viene de un reino que desborda magia y viene de un linaje mágico muy antiguo... Pero ___ no tiene magia- Dijo Stefan eso último algo confundido, por que fue lo primero que ella dijo cuando se conocieron "No poseo magia, no soy una maga como mis padres"
-No solo por eso Stefan... Ella tiene una magia muy poderosa .. Solo está dormida... Ella ... Ella puede sellar la magia de un dragón- Dijo débilmente el rey sintiendo que yo no tenía fuerzas para aferrarse más a la vida.
-¡¡QUE!!- Dijeron Stefan y el resto de presentes en la habitación, pero Tristan aún conservaba la calma, ya que ya conocía el plan del monarca con este matrimonio arreglado
-Su madre y padre lo han ocultado incluso de ella.... Ya que temían que la secuestraran... La única manera de romper ese sello es que ella se case.... Por eso te insistí en este matrimonio... Ella es el arma definitiva para matar a la familia Draconia- El rey dijo mientras sus ojos miraban el techo respirando con pesadez
-¡¿Pero cómo lo descubriste tú?!- Preguntó Stefan impresionado
-Desde hace muchos años buscamos la manera de restablecer la magia en nuestro país, por lo que colocamos espías en reinos que rebosan en magia, para descubrir sus secretos- Se adelantó a Hablar Tristán -Nuestros espías en el reino de la Pradera descubrieron la habilidad de la princesa-
-¡Por eso Stefan debe recuperar a la princesa! ¡A tu esposa!- Exclamó el rey por última vez -¡Tú debes ser el Stefan que destruya.... Destru... ya ... a los Draco...- Pero el rey no termino de dar esa última orden a su hijo
Stefan sintió como la mano de su padre que sostenía perdió las fuerza y cayó inerte sobre la cama, el resto de presente en esa sala agacharon la cabeza y empezaron a lamentar la muerte del monarca, uno que otro incluso lloró, el sacerdote comenzó a dar los rezos finales para que el alma del rey parta de este mundo y encuentre la paz en el más allá, pero Stefan permaneció estupefacto por las declaraciones finales de su padre así como su última orden.
El príncipe no salió del estado de shock hasta que sintió que algo era colocado en su cabeza, la corona de rey, Tristan se la quitó al cadáver del anterior rey y se la colocó, dándose cuenta que ahora... Tenía el pesó de su reinó en los hombros...
-Como dicta nuestra tradición, cuando un Stefan cae uno nuevo toma su lugar para ser el rey eterno de la humanidad...- Dijo el primer ministro de Estado mientras los demás bajaban la cabeza ante su nuevo rey...
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El cielo estaba nublado y lluvia profundamente fuerte, demostrando la ira del rey Dragón al ver tal mujer de regreso a su castillo, como si descubrir su infidelidad el dia anterior solo fuera un pequeño desliz que se puede olvidar, no quería verla y mandó sus sirvientes a que expulsaran a esta hada descarada de su castillo, pero Belladona insistió tanto y se negó a abandonar el castillo sin aclarar las cosas con su majestad, al principio sería Lilia el siguiente en decirle de manera "Educada, Amable y Civilizada" que su presencia ya no es grata en el castillo, pero Malleus decidió que sería mejor que él mismo contará con el problema de raíz, por lo que la recibió en su estudio.
-Buenas tardes querido prometido y mi dulce Malleus me alegra mucho que al fin pueda recibirme con cariño- Dijo Belladona con su mejor actuación de buena prometida pero Malleus solo sentía asco de mirarla -Se que debe estar muy ocupado el dia de hoy, pero quería aclarar lo ocurrido el día de ayer en el banquete...-
-Si te permito estar en mi presencia, no es para dejar que des tu versión de los hechos, Señora Everspring- Interrumpió Malleus secamente las explicaciones del hada floral -Solo es para decirte personalmente que nuestro compromiso está cancelado y por tu... Cuestionable amistad con el príncipe Stefan del Páramo, tu presencia ya no es bien recibida en este castillo-
-¡¡QUE COSA!!- Reaccionó Belladona indignada -¡¡YO NO TENGO NADA QUE VER CON STEFAN!! ¡¿Y COMO ES ESO DE SEÑORA?! -
-¿No es así como se les dice a las mujeres después casarse, volverse de yacer con un hombre o cuando alcanza esa edad? Señora - Dijo Malleus de manera burlona y sarcástica -Aun que si el título de "Señora" te molesta, tambien hay otra manera de decirle a las mujeres que le abren las piernas a un hombre, si quieres te llamo asi-
-¡¡NO ME FALTES AL RESPETO MALLEUS!! YO SIGO SIENDO PURA Y CASTA - Grito Belladona aún indignada y más enojada.
-¡¡ESO MISMO TE DIGO YO AQUÍ!! - También subió Malleus la voz enojado - Y SI TAN CASTA ERES NO TE IMPORTARA HACERTE UNA PRUEBA DE PUREZA CON LE'BLUE NO? -
-¡¡ESO.. E.. ESO ES INNECESARIO!! Malleus, querido, confía en mi palabra ¿Porque te mentiría con algo tan serio?- Dijo Belladona ahora arrodillándose para pedir piedad al rey -Todas las acusaciones de esa tonta princesa humana son infundadas, lo dijo solo por que estaba dolida por su esposo infiel, mas bien deberia ser ella la juzgada, por ser una descarada y una vulgar ofrecida-
-No insultes a mi esposa Belladona, además para mi es prueba suficiente que fueras a esa fiesta sin ni siquiera contarle a nadie!- Dijo el dragón gruñendo -El que nada teme nada oculta-
-¡¿E.. ESPOSA?! ¡¡NO, YO SOY LA SIGUIENTE REINA!!- Belladona se levantado mirando a Malleus enojada pero se retractó al ver la mirada fría del rey.
-Si no he dejado que un rayo te parta la cabeza, por los siglos de servicio que tu familia ha prestado a los Draconia y al Valle de las Espinas ¡De ahora en más no te quiero volver a ver!-
Belladona con lágrimas en los ojos por la rabia y la frustración se puso en pie -Te vas arrepentir por elegir a esa humana por encima de Malleus Draconia- Dijo la pelirrosa con tono amenazante -¡Y disfrutar jugar a los esposos con tu pequeña puta, por que el Consejos de Sabios y tu abuela se enteraran de esto, no estarán contentos y...-
Pero la hada floral no termino su frase ya que vio como Malleus al fin perdió la paciencia y le lanzo y rayo que le hubiera dado en toda la cara si no fuera por que escapó al último segundo con magia, sin duda el dragón estaba enojado, pero ya encontraría el momento y lugar para castigar a esa prostituta por insultar a su esposa.
Continuará...
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No quiero al héroe, quiero al villano
Fanfictionestabas en tu cama, leyendo tu último libro y tenias que admitir que lo odiaste. lo odiaste tanto que dijiste, si tu hubieras escrito el libro lo hubieras hecho mejor, y cuanti estabas por dar tu último aliento escuchaste ¿a sí? pues hazlo mejor qu...