05

448 70 2
                                    

La culpa es mía por subestimarlo, ahora no creo poder volver a dormir.

–Desde el principio pensé que eras un noble por tu ropa, aún más al darme las monedas. También pensé que eras muy tonta y lo sigo pensando. Pero después de buscarte, nunca imaginé que la propia princesa hiciera algo así, por lo que me intriga mucho–

–¿C-Cómo entraste?–, me abrazo a mi misma.

Estoy sentada lejos de él en la cama.

–Por la ventana–, señala esta, –Debes sentirte muy segura al dejarla abierta–

Nunca cierro la ventana del balcón, porque nunca había vivido esto.

–¿Quieres más dinero?–, pregunto en voz baja.

Él ladea la cabeza, –Tal vez–, sonríe con malicia.

Está claro que se va a aprovechar de eso, sabe que me asusta, así que va a usar eso a su favor.

–¿Cuanto quieres?–

Bufa, –No hay prisa princesa, si alguien me ve con mucho dinero, sería sospechoso, así que hagamos un trato–

–¿Qué trato?–

–Cuando yo venga a buscarte, tendrás dinero listo para mí–, mira alrededor de mi habitación.

Incluso en la oscuridad, la luz de la luna ilumina un poco el lugar.

–¿Y qué obtengo yo?–

Sonríe ladino, –Así que no eres tan tonta.....que tal....¿Te enseño a besar?–

–¿Q-Qué.....eso....

–¿No fué por eso que me buscaste en primer lugar?, te enseñaré bien–

–No es necesario, no voy a hacer eso de nuevo–, al menos no hasta unos años después.

Solo bufa.

Quiero dormir, mañana tengo una agenda ocupada, pero con él aquí, va a ser incómodo.

–Entonces....¿Qué tal si te cuido?, pareces tener pesadillas, si te cuido mientras duermes, ¿Estarás tranquila?–

No podré ni siquiera cerrar los ojos si te quedas aquí.

Comienzo a negar, –No hagas nada, solo te daré el dinero, seguro lo necesitas más que yo–

En realidad si es así, necesitas mantener a tu padre.

–Si lo dices así, me hace pensar que quieres demostrar tu autoridad ante mí–

–¡No es así!–

Las luces se encienden por un segundo.

Me tranquilizo de inmediato. A veces, mis emociones me dominan y mi magia se descontrola, por lo que hay pequeños incidentes como este.

–¿Acabas de....

Trueno los dedos, encendiendo un momento las luces. Vuelvo a hacer lo mismo, apagandolas.

Me mira fijamente. Repentinamente se acerca a mí y me toma por los hombros, –¡¿Tienes poder de sanación?!–

Está apretado algo fuerte.

Comienzo a negar, –N-No, no es tan fuerte. Solo curo heridas menores–

Me suelta, haciendo un chasquido con la lengua, –¿Qué princesa tiene magia tan pobre?, no sirve de nada tener poder entonces–

Eso me lastima un poco. Ya sé que no soy la protagonista, pero no tienes que decir algo así.

Solo me abrazo a mi misma, agachando un poco la cabeza.

𝓞𝓷𝓬𝓮 𝓾𝓹𝓸𝓷 𝓪 𝓽𝓲𝓶𝓮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora