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Al día siguiente.

Nuestras maletas ya están en el barco, solo falta que Yurim y yo subamos a este.

–Ya me despedí, así que subiré primero–, Yurim dice, tocando mi hombro.

Asiento. Miro a Jungkook, quién a estado tomando mi mano fuertemente desde que salimos del castillo.

–Piensa en tu padre antes que en mí, él es tu prioridad en este momento–, me paro frente a él, acariciando su mejilla.

–Eso intento, pero no puedo–

–Jungkook. Lo hablamos antes, perderás a tu padre por no perderme a mí y al final también tengo que irme. Cuida de él–

Aprieta su mandíbula, sus ojos se cristalizan. Lo abrazo, no puedo curar su malestar, solo puedo ofrecer mi cariño.

Me separo de él, tomo su rostro. Me paro de puntillas y beso sus labios.

Jungkook se queja, como un sollozo. Pero aún así, me besa también, abrazándome.

Nos separamos lentamente. Su expresión de tristeza me rompe el corazón.

–Eres muy fuerte, mi esposo es muy poderoso, lo soportará–, intento consolarlo de alguna manera.

–Te encontraré......nos veremos pronto, solo espera por mí–,

Limpio sus lágrimas, sintiendo las mías deslizarse por mis mejillas.

–Cuidate Jungkook. Pensaré mucho en tí–

–Yo también–

–Lo siento alteza, pero es hora de partir–, un sirviente anuncia.

Eso solo es un golpe en el estómago para ambos, pero no podemos seguir así.

–Me voy. Cuídate, no te preocupes demasiado, llegaré a salvo–

Asiente, aunque no puede hablar porque su respiración es pesada.

Solo me abraza fuerte una vez más. Su rostro se esconde un momento en mi cuello, después levanta un poco la cabeza, su boca está cerca de mi oído.

Murmura algo que no logro entender, confundiendome un poco.

–Ve con cuidado–, dice una vez que nos separamos.

Quiero preguntar que es lo que dijo, pero ya no hay tiempo. Muevo mi mano en su dirección, despidiendome, después doy media vuelta y avanzo al barco.

Subo este, Yurim de inmediato se acerca a mí y entrelaza su brazo con el mío, acariciando este para consolarme.

Miro una vez más hacia atras, Jungkook solo me observa, con los puños cerrados. Debe estarse conteniendo mucho para no subir aquí.

–Te amo–, susurro.

Lo veo sorprenderse.

Pero dejo de verlo, yendo a mi lugar. Yurim se sienta a mi lado, por lo que pronto sentimos el barco moverse.

Suspiro. Es cómo el penúltimo capítulo de mi vida aquí, solo estaré tranquila hasta que esté en la isla, por lo que debo ser rápida con el último protagonista.

Perderé dos días viajando en barco. Solo cuento con tres para conseguir el beso y un día para llegar a la isla, ya que está cerca del imperio.

En el peor de los casos, tendré que besarlo en un descuido, ó aún peor, forzado, ya que no me puedo permitir perder más tiempo.

Fué mi culpa, pude organizar bien esto, pero realmente fue difícil no estar con Jungkook, ahora que todo estaba saliendo bien.

–Está loco....

𝓞𝓷𝓬𝓮 𝓾𝓹𝓸𝓷 𝓪 𝓽𝓲𝓶𝓮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora