Confrontamiento.

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Abrió los ojos de golpe, el blanco puro lo cegó por unos instantes y sintió el pecho dolerle. No se podía mover, su cuerpo estaba paralizado y todas esas imágenes lo invadieron en una secuencia desesperante. El rojo de la sangre, la atroz mordida, el aroma tan venenoso y asqueroso. Sintió nauseas y la cabeza le dio vueltas. Intentaba gritar, intentaba moverse pero parecía que una fuerza superior lo mantenía congelado. Algunas lagrimas salieron resbalando por sus sienes y entonces recordó el rostro manchado, las viseras, a ese pelinegro tendido en el suelo... muerto.

Una corriente dolorosa recorrió toda su espina y por fin sintió sus extremidades, sentándose de forma estrepitosa, el nombre de ese alfa salía en medio de un grito como si hubiera estado retenido en su garganta por mucho tiempo, su pecho ardía tanto que le costaba respirar y estaba seguro que el pánico lo haría enloquecer.

— ¡TAEHYUNG! — Esa voz apuñaló su cabeza atravesando sus oídos y su mente quedo en blanco, de nuevo solo escuchaba una especie de ruido blanco y se perdió por momentos. No supo cuanto le tomó reaccionar y ver a aquel pálido chico de marcadas ojeras, le decía algo mientras lo movía con fuerza de los hombros. — ¿Me escuchas? ¿Taehyung? — La voz del mayor estaba cargada de preocupación. El castaño se quedo viendolo completamente incredulo ¿Estaba alucinando? Quizó responder pero una tanda de enfermeros entraron, alejando a Yoongi del cuerpo del menor y sacándolo del lugar, de inmediato fue atacado de aparatos, preguntas y una sensación extraña en el brazo izquierdo.

Yoongi intnetó poner algo de resistencía, pero al final solo pudo resignarse a abandonar la habitación en la que había pasado los últimos tres días, sin desprenderse del castaño. Supirando solo se quedó mirando la puerta que lo separaba de todas las dudas y preocupaciones de estos últimos días, pero con la ligera tranquilidad de haberlo visto despertar. Ahora solo quedaba esperar. Y lidiar con otra cosa más ¿por qué no? Enfrentar esa conversación que sabría no sería cómoda, tenía que buscar respuestas para dar, de algo que no entendía.

Buscó su celular en su bolsillo y escribió un mensaje:

''Taehyung despertó, nos vemos en la cafetería del hospital''

Fue todo y se dirigió a ese lugar, necesitaba un café, una aspirina y al menos un poco de calma antes de enfrentar de nuevo la misma conversación. Agotado se dejó caer en una de las sillas de la cafetería, eran las 4:36 de la tarde y su café ya se había terminado, pero no tenía energía de ir por una tercera taza, y tampoco fue necesario pues mientras intentaba tomar fuerzas de levantarse una nueva taza fue puesta frente suyo, pero al ver quien se la entregaba su sus ganas de beberla se esfumaron y su semblante se puso más serio.

— Te ves muy mal. — Fue lo primero que dijo el rubio mientras tomaba asiento frente a Yoongi que solo le hizo una mueca girando su vista a otro lado.

— ¿Ya fuiste a verlo? — Soltó con ligera molestia en su tono, estaba cansado y su paciencia era muy limitada. Fue evidente que no estaba dispuesto a ceder. — No, preferí primero hablar contigo. — Contestó Namjoon en su usual tono diplomatico y medido que solo exasperaba más a Yoongi. — Que forma tan interesante de ordenar tus prioridades. — Respondió el pálido con una sonrisita sarcástica que causo un suspiro en el más alto.

— No vengo a discutir, Yoongi, ya dejaste muy claro que no te agrado la última vez que hablamos. — Fue firme en su tono, no se notaba ni una pizca de emoción en sus palabras, parecía que hablaba de cualquier cosa o de un negocio. La realidad es que esta era la segunda vez que intentaban sentarse a hablar. La primera vez fue cuando Yoongi llevó a Taehyung al hospital, la primera noche luego de que este no despertara. Quizá había sido por la conmoción, por el estrés de esa situación o porque Yoongi se sentía culpable pues era quien estaba con Taehyung, sentía que era quien lo tenía que cuidar. Esa noche había nevado y Namjoon solo había atacado al mayor de los dos. Ninguno había sabido manejar la situación, y esa conversión había quedado en el aire. — Lamento lo que pasó esa noche, estaba asustado, no sabía que hacer. — Por primera vez Namjoon sonaba honesto y esa barrera de perfección y control parecía caer. Yoongi noto aquello y quizá también bajo la guardia solo un poco.

— ¿Sabes por qué estaba en mi apartamento? — Yoongi miró al rubio de forma acusatoria. — No tenía a donde ir, su mejor amigo no le habla y siente que no puede confiar en nadie de su familia, terminó en el departamento de un tipo que apenas conoce porque no tenía a donde más ir ¿Qué tan deprimente puede ser eso? — Namjoon bajó la mirada mientras apretaba los labios, una punzada le atravesó el corazón. — Realmente no se que mierda pasa en su familia, pero debe ser muy malo para que al salir del hospital no tengas a nadie a quien llamar, debe ser tan malo como para que en tres días tu hermano no venga a verte ni una sola vez. — Sí, el azabache estaba recriminando de forma ácida al menor. Y este tomaba cada palabra de la forma más culpable posible.

— Es más complicado de lo que crees, Yoongi. — Intentó responder, pero sintió que lo estaba empeorando.

— Oh, debe serlo, porque ¿Qué puede ser más importante que la vida de tu hermano? Todos ustedes son iguales. — Su voz fue arrogante y con cierto aire de desprecio. Cruzándose de brazos mientras se reclinaba en su silla. — No me interesa la mierda que pase en tu casa, ni las tonterías que creas correctas. Siempre es lo mismo, el dinero, el estatus, el apellido. — Eso había sonado más que personal, y es que nadie mejor que Yoongi entendía eso.

— ¿Quieres contarme lo que pasó? — Namjoon intentó escapar del sermon, de la carga de la realidad que ese le mostraba y que de todas formas siempre fue consciente

— No lo sé. Para ser honesto fue demasiado extraño, com toda esta basura de situación. El día que Taehyung salió del hospital me llamó y acabamos en mi departamento, acordamos que estaría allí un tiempo y eso fue todo. No hice mayores preguntas y me dedique a lo mío. Pero esa noche tuve una especie de presentimiento y una angustia que me despertó asustado, fue cuando corrí a la habitación de Taehyung y lo encontré en el suelo. Había sangre en su nariz y no respondía, podía sentir sus latidos y eran muy suaves, casi nulos. Entonces lo traje al hospital. Luego de eso solo pude esperar y ahora estamos aquí. — Soltó un largo suspiro, la peor de las partes era esa. La ausencia de respuestas y la falta de medios para conseguirlas. — Los médicos hicieron exámenes y pruebas pero no encontraron nada, físicamente estaba bien, no saben que es lo que pasó. Su mente solo se apagó, al parecer fue por un choque muy fuerte, pero esa noche no pasó nada raro. — Yoongi mantenía su vista alejada del menor y su voz era fría. — Hace unas horas despertó, pero no me han dicho nada, solo sé que siguen haciendo estudios. — Finalizo con un suspiro y al fin enfrento la vista del rubio que ahora parecía nervioso y preocupado.

— Lamento que tengas que pasar esto, puedes ir a descansar, yo me haré cargo a partir de aquí. — Namjoon se levantó pero Yoongi solo soltó una risa sin moverse de su lugar.

— No tengo idea porque terminé en medio de esto y estoy seguro que no debería ser mi problema, pero pasó y ahora es mi asunto, Taehyung es mi asunto y no pienso ir a ningún lado. — El peli negro se puso de pie enfrentando al más alto, pese a la gran diferencia de estatura, Yoongi tenía un aura demasiado imponente y a fin de cuentas seguía siendo un alfa mayor, pero había algo más, algo en el tono de su voz y en la espesa amargura de su aroma que hizo que Namjoon se sintiera intimidado. — A demás no creo que sea la persona que quiere ver justo ahora, yo te mantendré informado. — Y no le dio tiempo de responder. Con las manos en los bolsillos de su sudadera negra se dio vuelta y empezó a caminar. Y aunque quiso, Namjoon no pudo decir nada, solo se quedó allí de pie resignado, por un lado era verdad que seguramente Taehyung no querría verlo y por otro... la peor parte, algo en Yoongi hacía que se sintiera asustado. 


Cápitulo sorpresa, la verdad es que estoy motivada  muy emocionada. Me siento tan feliz de ver que aun hay personas que me leen y que me recuerdan. Escribir es algo que amo y enserio aprecio demasiado que sigan aquí aun cuando parecía ya no tener fin. Prometo poner más de mi parte, en serio muchisimas gracias. 


Sobre esto ¿Qué les parece? ¿Qué piensan que pasó? ¿Creen que quiza es algún tipo de presagio lo que vio Taehyung esa noche? Tengo miedo de lo que pueda pasar ¿ustedes no? Creo qeu siempre hay mas preguntas que respuestas en esto. 


De nuevo muchas gracias por seguir aquí, sus comentarios son lo que más me motiva, recuerden que tengo un instagram donde subo cosas lindas @vantecosmicx 


Un besito.


CURIOSIDAD // Yoontae (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora