CURIOSIDAD // Yoontae (omegaverse)

Intromisión.

9:06 pm.

El pelinegro había tomado un baño apenas llegó a casa y así, con su cabello húmedo y desnudo se tumbó en la cama cayendo en un pesado sueño, eso era lo que más le gustaba, dormir. Por eso cuando el timbre de su puerta sonó hizo una mueca y sintió su cabeza explotar levantándose perezosamente y caminando con apenas una toalla a medio poner en su cintura, el timbre seguía repicando de manera insistente haciendo que un gruñido se escapara de sus labios. 

— ¡TE DIJE QUE PASABA A LAS NUEVE! — El castaño entro apenas fue abierta la puerta gritando y empujando al más bajo directo a su habitación. La voz elevada de este martillo entre las cienes del azabache que hizo una mueca exasperada dejándose llevar sin tener energía ni de pelear. — Si crees que te vas a librar de salir esta noche estas equivocado, si tengo que vestirte yo mismo lo haré. — Las manos Hoseok se aferraron a la toalla que era lo único que protegía el cuerpo del pálido, tirando de esta. 

— ¡HEY! — El mayor alzó la voz intentando proteger su desnudez. — BIEN, IRÉ, IRÉ, yo me puedo vestir solo. — Terminó por decir con un resoplido y totalmente derrotado por el más alto que victorioso sonrió y soltó la toalla saliendo de la habitación para esperar por el otro en la sala. 

— Maldito loco. — Refunfuñó el pelinegro cerrando la puerta de un portazo, no sabía realmente porque aguantaba al idiota ese, eran amigos hace tanto que se había acostumbrado y de mala gana siempre terminaba cediendo a toda locura que este decía y pedía como si no tuviera más opción. Hoseok y Yoongi se hicieron amigos cuando tenían catorce o quince años. En esa época el mayor era más volátil y fácilmente explotaba. Así es que se habían conocido, una tarde en la escuela, quien sabe porqué, el castaño había tocado los cojones del pálido en el momento equivocado, terminando con un puñetazo en su mandibula y sangre en su labio, en esa época todos tenían miedo de Yoongi por ser en extremo impulsivo y solucionar todo con golpes, nadie solía retarle tan descaradamente, pero el castaño solo sonrió y se levantó propinándole al pálido un puñetazo en su estomago que lo dejó sin aire, así se hicieron amigos, en la dirección, esperando ser amonestados. Con golpes en su rostro y una risa estruendosa por parte del más joven ''Realmente tenía miedo, no se de donde saque valor'' le confesó y Yoongi sonrió, desde ese día se hicieron cercanos y ahora estudiaban la misma carrera y se habían mudado juntos a la ciudad para seguir adelante con sus planes, aunque eso no duró mucho, Yoongi pronto buscó otro departamento donde no tuviera que padecer las visitas constantes que recibía el más joven y que siempre terminaban en gritos obscenos y ruidos raros en la habitación de al lado que no lo dejaban dormir,  aunque solo se mudó dos pisos arriba del castaño y juraría que a veces lograba aun escuchar sus faenas con cualquier omega griton ¿por que se los buscaba tan ruidosos? nunca entendería eso. 

Más o menos quince minutos después el pálido salió vestido y peinado, Unos pantalones negros ajustados y rasgados en las rodillas y una camiseta blanca ancha que llegaba a sus muslos bastante grande y cubierta por una chaqueta negra de cuero un poco más ajustada. Lo admitía, había hecho su mejor esfuerzo por no parecer un mendigo, aunque no lo conseguía del todo.  Pero al obtener una mueca de aprobación por parte del menor eso le bastó. 

— Al menos te bañaste. — Colgó su brazo en los hombros del pelinegro que soltó un gruñido y salieron a su noche de ''fiesta'' — Ahhh, el aire es tan agradable, hoy será una gran noche, Min, lo presiento. — La voz de Hoseok sonaba peculiarmente más animada y sonreía de forma brillante, mientras que el pelinegro seguía rodeado de su aura oscura y se subía al auto del otro por mero compromiso. 

— ¿Y donde vamos? ¿Quien es ese tal Jerry? — Preguntó con la voz apagada sacando un cigarro y bajando la ventana para luego encenderlo, la brisa le chocaba contra la piel del rostro y se sentía fresca y agradable, Yoongi cerró sus ojos dando una calada y permitiéndose disfrutar ese instante. 

— Jimin. — Le corrigió mientras doblaba en una avenida para tomar la vía a las afueras de la ciudad. — Es interesante, porque será en el bosque, en una especie de casa abandonada, así que podrás embriagarte sin miedo a que la policía te lleve por estar meando en un poste. — Respondió tranquilo y bastante animado, en cambio el mayor estaba a punto de perder la poca paciencia que tenía, de nuevo estaba siendo arrastrado a quien sabe donde y seguramente terminaría bastante mal. — Es el cumpleaños de su mejor amigo, Teahyung, sabes quien es ¿no? — Miró de reojo al pálido que mantenía aun sus ojos cerrados. 

— ¿Te parece que voy a saber quien es ese tipo? — Se encogió de hombros mostrando poco interés en el tema y acercando el cigarro a sus labios.

— Es el hermano menor de Namjoon, debes conocerlo, se habla mucho de él. —

— Ni siquiera sabía que Namjoon tenía hermanos. — Al fin abrió los ojos y se dio cuenta que habían dejado ya la ciudad y que ahora avanzaban por un camino rodeado de arboles, logró escuchar música y bullicio, y suspiró tratando de ponerle buena cara al asunto. — Si es hermano de Namjoon debe ser un alfa engreído con infulas de casanova, como Nam al inicio. — Soltó una risita negando. Los tres chicos se habían conocido al inicio del primer semestre cuando compartían las clases básicas de todas las carreras, no eran precisamente amigos, pero se llevaban bien, habían compartido en diferentes ocasiones.

— Es un Omega. — El pelinegro levantó las cejas un poco sorprendido y se giró a ver Hoseok que aparcaba el auto. — 

— Creía que Namjoon venía de una familia de sangre pura y esas mierdas, mi madre es amiga de la suya. —

— Por eso todos hablan de ese omega. — Le guiñó un ojo con una sonrisita y se bajó del auto con una botella de vodka en la mano que quien sabe de donde había sacado. — 

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¿Les está gustando? ¿Que opinan del desarrollo de los personages?

¿Debería subir otro capítulo de una vez?

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