CURIOSIDAD // Yoontae (omegaverse)

Gris

Taehyung miró alrededor sintiendo una mezcla de curiosidad y nervios, había estado antes en ese departamento, pero aquella vez no se había detenido a mirar nada, ahora que estaba sentado en la sala pudo detallar mejor. Estaba todo ordenado y limpio, pero parecía demasiado gris, apenas habían muebles y una biblioteca, las paredes color crema estaban completamente desnudas y sentía algo de tristeza al ver a su alrededor. Él era un fiel creyente que la decoración de un lugar podían expresar el alma de una persona y sintió una especie de vacío en el estómago al pensar que el alma de Yoongi estaba llena de tanto gris, de huecos por completar y sin ganas de hacerlo, estaba tan perdido en sus pensamientos que no notó cuando el azabache volvió a su lado haciéndole pegar un saltó cuando escuchó su voz.

— Bien, creo que esto te puede quedar, en el baño hay toallas limpias, usa el de mi habitación, yo usaré el del pasillo. — Alzó una ceja al notar como el castaño se había asustado mirando con algo de desconfianza las prendas que le ofrecía. — No puedes quedarte esa ropa mojada, toma una ducha y cámbiate.

— Gracias. — Respondió con algo de duda, tomando las prendas en sus manos y asintiendo mientras mordisqueaba su labio inferior sin saber que más decir, solo hizo caso y se dirigió a donde se le había indicado.

La habitación de Yoongi era apenas distinta de la sala, una gran cama, un armario amplio y bien ordenado y mesa de noche, lámpara y apenas algunas cosas más, parecía como si hubiera llegado apenas y le faltara desempacar la mitad, pero no era así, realmente eso era todo. No quiso darle más vueltas a eso y se adentró en el baño poniendo la ropa sobre la tapa del escusado y se miró al espejo unos segundos. Su cabello húmedo caía por su rostro desordenado, su cara estaba pálida y sus labios algo morados por el frío, pero era algo más que eso, es como si el frío viniera desde dentro, tanto que le empezaba aterrar el desconocido que le miraba desde el reflejo, obligándolo a apartar la vista y dedicar sus pensamientos a la tarea de quitar su ropa mojada, doblándola a medias y sin cuestionar más entró a la ducha iniciando por fin un perfecto espacio de calma, entre el agua caliente y el vapor se dejó ir por un rato, no quería saber nada sobre lo que fuera su vida por ese instante, se tomó ese tiempo, que no supo cuánto fue, para olvidar todo lo que por días le había atormentado, estaba lejos del infierno de su casa, lejos del odio de Jimin, lejos de la locura de Jungkook, sentirse lejos de todo le regaló la calma que venía mendigando por semanas. Todo se sintió bien hasta que unos toques en la puerta lo trajeron de regreso a la realidad.

— Oye, preparé chocolate, sal antes de que se enfríe. — Habló a lo lejos la voz de Yoongi y luego de eso el silencio invadió todo, pero Taehyung ya no pudo regresar a su pequeña burbuja de paz. Simplemente acabó de enjuagar su cuerpo y salió listo para volver al gris de esa casa, el mismo gris que tenía toda su vida, ahora que lo pensaba.

Le tomó apenas cinco minutos ponerse la ropa que Yoongi le había ofrecido, notando de inmediato que esta olía al alfa y extrañamente no le incomodó, él, que nunca se sintió agradado con oler a alguien más, ahora estaba con su nariz contra la tela olfateando, acción que luego le hizo sentir una culpa tonta y vergüenza, quien sabe por qué, si nadie lo había visto.

— Gracias por la ropa. — Apareció por el pasillo con una toalla en sus manos intentando secar su cabello y poniendo esta sobre sus hombros se sentó en la mesa de la cocina.

— Admito que te queda mejor que a mí. — Eso salió sin permiso de la boca del pálido, que prefirió evitar la vista del menor mientras ponía una taza de chocolate caliente frente a este y se sentaba en la silla contigua con su propia taza. — ¿Ahora qué vas a hacer? — Cuestionó mientras daba un trago a su taza, aun sin mirarlo.

— Sinceramente no sé, no creo que pueda ir a mi casa pronto, tampoco sé cómo hablar con Jimin, supongo que puedo ir a un hotel. — Suspiró con desgano pensando en su deplorable situación y miró la bebida sin mucho ánimo de probarla.

— Yo tengo una habitación libre. — Mencionó Yoongi como si se tratara de cualquier cosa, con una expresión completamente neutral, en cambio Taehyung se giró a verlo sorprendido. — Me vendría bien una ayuda con la renta, y supongo que mientras no sepamos de donde viene ese aroma que me persigue estaría bien estar cerca, así evitamos incidentes como el que pasó en la universidad. — Sus argumentos parecían lógicos, pero Taehyung aun sentía extrañeza, eran completos desconocidos. Aunque ya hasta estaba usando su ropa y entre esa idea y regresar a su casa para que su padre lo obligara a casarse con Jungkook... vivir ahí sonaba como un sueño.

— ¿Estás seguro? — La duda en la voz de Taehyung y su cara que parecía signo de interrogación le causaron gracia al pelinegro que solo se encogió de hombros.

— También puedes ir a un hotel, ahí al menos te harán el desayuno. — Comentó más bien en broma y dio otro trago a su bebida. 

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¡DOS ACTUALIZACIONES SEGUIDAS! Merezco una estrellita. Aunque este es algo más corto es muy sustancioso ¿Qué les parece? DIOS yo estoy emocionada ¡Ahora si se viene lo bueno! Ah, realmente estoy inspirada, espero les esté gustando. Si es así por favor dejenme sus comentarios, me anima mucho leerlos. 

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besos